Sin el pan y sin el queso

La vida privada de la realeza ha cautivado al público por años, y series como The Crown han aumentado el apetito por detalles inesperados. Por eso impactó tanto la noticia según la cual Wallis Simpson, la divorciada estadounidense que enamoró al rey Eduardo VIII y lo llevó a abdicar 11 meses después de asumir el trono, en 1936, estaba enamorada de otro hombre. Según Andrew Morton, periodista que logró jugosas confesiones en entrevistas con Lady Di, Wallis realmente amaba a Herman Rogers, un apuesto y millonario compatriota suyo educado en la Universidad de Yale. Durante la Segunda Guerra, Rogers ayudó a la pareja a instalarse en París y se volvió confidente de Simpson, quien se sentía deprimida por su asilo dorado en París y por la negativa de la corona de permitirle el trato de ‘alteza real’. Tras la muerte de la esposa de Rogers, Wallis pensó que tenía oportunidad de hacer una nueva vida junto a él, pero este se casó antes con otra. Tal parece pues que Simpson se quedó sin título y sin el amor de su vida.