GENTE

Hay preocupación por la salud de Doña Cuquita, la viuda de Vicente Fernández

Su médico le confesó a un medio televisivo el padecimiento de la esposa del rey de la ranchera mexicana.

29 de diciembre de 2021
“El rey de la música mexicana”, así llaman a su ídolo, quien posa aquí junto a su esposa, Cuquita, en el famoso Bulevar de la Fama en Hollywood, donde el cantante recibió una estrella por haber grabado 53 álbumes en tres décadas.
María del Refugio posó junto a su esposo en el famoso Bulevar de la Fama en Hollywood, donde el cantante mexicano recibió una estrella por haber grabado 53 álbumes en tres décadas. | Foto: HéCTOR MATA-afp

A María del Refugio Abarca le ha tocado un diciembre amargo, tras la irreparable pérdida de su famoso y legendario esposo, Vicente Fernández, el pasado 12 de diciembre. Mejor conocida como Doña Cuquita, la mamá del también reconocido artista Alejandro Fernández padece varios problemas de salud, por los cuales su familia está muy pendiente de ella, en especial su hija Alejandra.

Según trascendió en medios del espectáculo en México y Estados Unidos, hay preocupación por el estado físico de la viuda del Charro de Huentintán. La desaparición física de su adorado esposo ha causado estragos en ella, ya que sufre de una enfermedad gastrointestinal de la que habló su propio doctor de cabecera.

Al programa Al Rojo Vivo, el médico gastroenterólogo Gabriel Galván hizo algunas revelaciones. Contó el especialista que Doña Cuquita ha tenido algunos problemas con el aparato digestivo.

“Alejandra la trae cortita. Cuquita es muy de ‘estoy bien’ porque es bien fuerte, pero de verdad que sí le batalla poquito con su aparato digestivo”, reveló el médico Galván.

La mujer que estuvo casada con el cantante por casi seis décadas (desde el 27 de diciembre de 1963) se encuentra rodeada de sus hijos y nietos, quienes decidieron no dejarla sola, sabiendo que el choque emocional que está teniendo es uno que no se puede afrontar en soledad.

Hace cinco meses, cuando Vicente Fernández ingresó de emergencia al hospital luego de una caída en su rancho en Guadalajara como consecuencia de los síntomas del síndrome de Guillain-Barré, Doña Cuquita también requirió atención médica y tuvo que ser operada de urgencia para que le retiraran una hernia del vientre. La operación fue exitosa y en unos días le permitió regresar al lado de su esposo en el centro médico, donde estuvo hospitalizado hasta que falleció.

Durante la convalecencia del rey de la ranchera mexicana, su esposa hizo una petición especial cuando lo vi muy mal en la unidad de cuidados intensivos. Una amiga muy cercana de la esposa de Fernández reveló en una entrevista al portal mexicano de noticias de farándula TV Notas que Doña Cuquita se encontraba muy “triste y desesperada”, y quería que Vicente abandonara el hospital para cuidarlo ella misma en su rancho Los Tres Potrillos.

La amiga de María del Refugio le aseguró al medio mexicano que ella les pidió directamente a los médicos que lo sacaran del hospital para estar más cerca del cantante.

Se rumora que su familia fue muy cercana a los carteles de la droga en México. Sufrieron con sus infidelidades también, pero al final Cuquita, la madre y esposa abnegada, logró mantener a los Fernández juntos. De los tres hijos, dos –Vicente y Alejandro– siguieron su legado, pero sin tanto impacto. Gerardo se ocupó del negocio familiar.
| Foto: getty images

La historia de amor entre Vicente Fernández y Doña Cuquita fue memorable. El pasado 27 de diciembre, Chente y su inseparable Cuquita habrían cumplido 58 años de casados.

En sus redes sociales, su hijo más famoso, Alejandro Fernández, no dejó pasar la fecha y recordó con un conmovedor post lo mucho que sus padres se querían.

Con una fotografía familiar, El Potrillo escribió: “Hoy se cumplirían años. 58 de casados y los mismos enseñándonos, entre muchas otras cosas, todo lo que el amor puede construir. Los amamos, jefes ♥️”.

Hace unos días, Álex Fernández, hijo de Alejandro Fernández y nieto de Vicente y Doña Cuquita, en entrevista con medios mexicanos, contó que no quieren dejar que su abuela viviera sola y que iban a hacer todo lo posible porque ella se sintiera amada y acompañada en este terrible momento de su vida.

Sin embargo, la mujer de 75 años decidió que no era momento para atemorizarse por el futuro y, en un acto de valentía y honor, tal y como lo describió su nieto, decidió marcharse para el rancho Los Tres Potrillos, en Jalisco, en donde compartió la mayor parte de su vida al lado de Vicente Fernández.