Los matrimonios más breves de la historia de Hollywood

Pamela Anderson y Jon Paters: 12 días

El escándalo del momento lo protagoniza Pamela Anderson, de 52 años, que a comienzos de febrero anunció el fin de su enlace con el productor de cine Jon Peters, apenas doce días después de prometerse que estarían juntos para siempre. Los fugaces esposos, que tuvieron una ceremonia secreta en Malibú, California, han saltado a los tabloides no solo por su rápida ruptura, sino por la andanada de acusaciones mutuas que se han lanzado desde que se reveló la noticia.

Peters, 22 años mayor que la actriz, aseguró en un mensaje al portal de revista Page Six que fue una boda por interés. Según él, Pamela tenía deudas que ascendían a 200.000 dólares, sin mayor posibilidad de pagarlas. Como una muestra de generosidad hacia su nueva esposa, saldó ese monto y además renovó todo su armario. Por su parte, los representantes de Anderson han desmentido las declaraciones de Peters, que calificaron de ridículas.

La también modelo usó sus redes sociales para expresar que se sentía traicionada por esos señalamientos. Además, de acuerdo con una fuente cercana a ella, tan solo un día y medio de convivencia con su marido fue suficiente para darse cuenta de que había cometido un grave error. El productor resultó ser muy controlador y enfocado en la fama, de la que ella hace mucho se distanció para concentrarse en labores de caridad y de activismo por los animales.

En el corto tiempo que estuvieron juntos, sin que Pamela lo solicitara, hizo llamadas para que le dieran papeles en las películas en las que él actualmente trabaja.

La pareja se conocía desde la década de 1980, cuando coincidieron en una fiesta en la Mansión Playboy. Salieron durante unas semanas y desde entonces Peters había estado detrás de la protagonista de Guardianes de la bahía. Él asegura que fue ella quien le propuso que se casaran en un mensaje de texto.

Estas fueron las quintas nupcias para ambos, pero también las más breves. Anderson batió su propia marca, pues ninguno de sus dos matrimonios con Rick Salomon superaron el año de duración.

Rudolph Valentino y Jean Acker: Menos de 12 horas

En 1919 Rudolph Valentino, el primer sex symbol de la historia, se casó con la actriz Jean Acker sin saber que era lesbiana. Minutos después de la boda, ella se encerró en la suite nupcial y no lo dejó entrar por más de que insistió.

Fue el matrimonio más efímero del que se tenga noticia, de acuerdo con Guinness Records. Tras el divorcio, Valentino no esperó el tiempo establecido por la ley para permanecer soltero y se casó en México con Natacha Rambova. Al regresar a Estados Unidos se le acusó de bigamia y estuvo unos días en la cárcel.

Jason Alexander y Britney Spears: 55 horas

Un fin de semana de excesos en 2004 llevó a Britney Spears al altar vestida de ombliguera, jeans y cachucha. El contrayente era Jason Alexander, un amigo de la infancia a quien la princesa del pop había invitado a pasar Año Nuevo en Las Vegas.

Cuando el equipo de la cantante se enteró del disparate que había cometido, se encargó de anular el que fue su primer matrimonio, alegando que en el momento de dar el consentimiento, Britney era incapaz de comprender sus propias acciones.

Nicolas Cage y Erika Koike : 4 días

Después de salir un año, Nicolas Cage y la maquilladora Erika Koike se dieron el sí en una noche de borrachera en Las Vegas en 2019. En su solicitud para invalidar el matrimonio, cuatro días más tarde, el prolífico actor alegó que bajo el estado en que se encontraba no podía tomar decisiones de esa trascendencia, además de ignorar que su esposa mantenía una relación con otra persona.

No se trata del único matrimonio exprés de Cage, pues en 2002 se divorció de Lisa Marie Presley, hija única de Elvis Presley, apenas tres meses después de la boda.

Tracey Edmonds y Eddie Murphy: 2 semanas

El 1 de enero de 2008, el paradisiaco escenario en el que Eddie Murphy y Tracey Edmonds contrajeron nupcias se convirtió rápidamente en un infierno.

Quienes asistieron a la lujosa boda en la Polinesia Francesa aseguran que la fiesta ni siquiera había terminado cuando los recién casados empezaron a discutir. Durante la luna de miel, los invitados los oían gritar y llorar en las noches.

Por fortuna, la ceremonia no producía efectos legales, por lo que a la pareja le bastó con cancelar los planes de un futuro matrimonio civil.

Jeremy Thomas y Drew Barrymore: 29 días

Seis semanas de romance fueron suficientes para que Drew Barrymore, inolvidable protagonista de ET, entonces de 19 años, le pidiera matrimonio a Jeremy Thomas, un bartender galés.

La propuesta tuvo lugar en un callejón de Los Ángeles a las 2:00 de la mañana, y tres horas más tarde ya eran marido y mujer.

Curiosamente, al pedir el divorcio 29 días después, la actriz citó como justificación una frase que dio título a una de las películas en las que participó siendo una niña: Diferencias irreconciliables.

* Este artículo hace parte de la última edición de la revista Jet Set. Puede leer otros aquí.