Kanye West suspiraba por Irina Shayk desde antes de casarse con Kim Kardashian

Tras ser vistos juntos en Francia, el rapero y la modelo ya no dejan duda de que son pareja, tras varios meses de cocinar lo suyo a fuego lento.

Así se lo aseguró a Page Six una fuente allegada a los tortolitos, de acuerdo con la cual empezaron a verse en marzo pasado. Sin embargo, solo en recientes semanas la relación tomó forma y trascendió a la prensa. “Él la persiguió”, sostuvo el informante.

Otro infidente le confirmó a la publicación que todo arrancó al comienzo de la primavera. “Es algo casual por el momento, pero están muy dedicados el uno al otro”.

No obstante, siendo más incisivos, resulta que la chispa entre ellos no se encendió recientemente, sino hace varios años.

Otra fuente proveniente del mundo de la música reveló que ellos habían tenido un affaire antes de que él se casara con Kim Kardashian en 2014.

En efecto, en 2010, el magnate del rap y de la moda la invitó a participar en el video de su canción Power. Dos años después, la tuvo en la pasarela de Yeezy, la multimillonaria marca que lo ha convertido en uno de los más poderosos en el mundo de la ropa. En ese momento, sin embargo, ella estaba de pareja del futbolista portugués Cristiano Ronaldo, con quien duró alrededor de una década.

Las fuentes coinciden en que West siempre ha tenido una especie de fijación con la modelo rusa y citan, a modo de muestra, que la nombró en su canción Christian Dior Denim Flow, en las líneas que dicen: “Quiero ver a Irina Shayk cerca de Doutzen (Kroes)”.

Actualmente, West está en proceso de divorcio de Kardashian, la madre de sus cuatro hijos. La noticia se conoció a comienzos de este año, luego de una serie de salidas infortunadas, en las que él trató agresivamente a Kim. Se armó un escándalo cuando dijo que ella había querido abortar a uno de sus hijos y que le estaba siendo infiel.

La verdad es que se trató de otra de sus crisis a causa del desorden bipolar que padece y que ya en otras ocasiones había causado que el rapero y su conocida esposa fueran la comidilla en el show business.

Al parecer, según la prensa estadounidense, a Kardashian se le llenó la copa y decidió dejarlo, pues él no es muy dado a tomar la medicación con juicio y eso hace que caiga en incoherencias que han sido noticia de primera plana.

A propósito de Kardashian, la reina de los reality shows, los medios gringos afirman que a ella no le importa que él esté con Shayk. Más bien, dijo People, está concentrada en sus hijos y su carrera, que ya la ha hecho dueña de una fortuna que sobrepasa los 1.000 millones de dólares.

Hace poco, con motivo del cumpleaños de West, dijo que lo amaría siempre.

Sin embargo, a cuatro meses de haber entablado la demanda de divorcio, ella ya está lista para empezar a salir con alguien. Se ha rumorado que tiene por pretendientes al colombiano Maluma y a Van Jones, presentador de CNN, pero nada de eso se ha confirmado.

“Cuando pidió el divorcio, ella estaba muy molesta y lidiando con la situación. Pero ahora que ha recorrido un largo camino, está muy contenta y convencida de que tomó la decisión correcta”, le dijo a la revista una persona allegada a Kardashian, quien conformó un verdadero emporio de moda junto a West.

También se ha sabido de la reacción de Bradley Cooper, expareja de Irina, ante sus amores con Kanye West. Un amigo del actor le dijo que él apoya cualquier decisión que ella tome con su vida, pues solo quiere que sea feliz.

Cooper y Shayk formaron un hogar durante cuatro años, de 2015 a 2019, del cual quedó una hija. La relación empezó a trastabillar por la época en que él protagonizó Nace una estrella, junto a Lady Gaga. El rumor del momento fue que el intenso amor de los actores en la pantalla había trascendido a la vida real. Testigos llegaron a afirmar cómo, en una fiesta, Irina se arrinconó, mientras que Bradley era todo sonrisas y susurros con Lady Gaga.

Ahora, surge una pregunta en caso de que la relación entre West y Shayk prospere: ¿podrá ella hacer que el cantante siga al pie de la letra el tratamiento y no incurra en sus absurdos desatinos?

En otro escenario más amable, se cree que los dos podrían darle vida a todo un fenómeno en el mundo de la moda, ya que está comprobado que todo lo que West toca se vuelve oro.