La reina Isabel II ya conoció a su bisnieta Lilibet Diana

El pasado viernes 4 de junio nació en California, Estados Unidos, Lilibet Diana Mountbatten-Windsor, la segunda hija del príncipe Harry y su esposa Meghan Markle, un momento de alegría que culmina un año de lazos tensos entre la pareja y la familia real británica.

Pese a la pandemia y la distancia, la reina Isabel II pudo conocer a su bisnieta, que fue presentada por videollamada a la monarca por parte de los duques de Sussex. De acuerdo con lo reseñado por la revista People, la pareja que estaba “muy emocionada” y no podían esperar para compartir el emotivo momento tan pronto regresaron a su casa desde el hospital Santa Bárbara Cottage.

Hasta el momento se desconoce la fecha en la que Meghan y Harry viajarán a Reino Unido para presentar a la recién nacida a la familia real. Sin embargo, parece que los duques podrían visitar la casa de campo de la soberana en el mes de diciembre.

Sobre los detalles del nacimiento de la menor, que, según lo informado por sus padres, lleva el nombre de su bisabuela, la reina Isabel, apodada Lilibet por su familia, y de su abuela, Diana de Gales, hizo historia al convertirse en la primera hija de miembros principales de la familia real inglesa en nacer en Estados Unidos.

“Lili se llama así en honor a su bisabuela, su majestad la reina, cuyo apodo familiar es Lilibet. Su segundo nombre, Diana, se eligió en honor a su querida y difunta abuela, la princesa de Gales”, manifestaron los duques de Sussex a través de un comunicado, donde informaron además que la menor pesó 7 libras y 11 onzas (3,5 kilos).

Esta es la segunda hija de la pareja, tras Archie Harrison Mountbatten-Windsor, nacido en mayo de 2019. Hace tres meses la pareja dio una explosiva entrevista a Oprah Winfrey en la que denunciaban el trato de los medios de comunicación y de la propia familia real británica, a la que acusaron de racismo por interesarse por el color de Archie antes de su nacimiento, ya que Markle tiene ascendientes afroamericanos.

Al respecto, el príncipe Harry y Meghan dijeron que el racismo fue parte de su decisión de abandonar el país. Meghan manifestó que, incluso, consideró suicidarse cuando estaba embarazada de su primer hijo, Archie.

Pese a esto, el anuncio del nacimiento de la segunda hija suaviza el cierre de un periodo público doloroso para el matrimonio.

“Ella es mucho más de lo que jamás habíamos imaginado y agradecemos el amor y las plegarias que sentimos llegar desde todo el mundo”, dijeron Harry y Meghan.

“Gracias por su permanente amabilidad y apoyo durante este momento muy especial para nuestra familia”, añadieron.

En los últimos años, la reina Isabel se ha visto alegre con el incremento en el número de sus bisnietos, lo cual permite hablar de un baby boom en la realeza británica.

Solo en este año, además de Lilibet, han nacido August Brooksbank, hijo de la princesa Eugenie, quien llegó en febrero. Un mes después, Zara Phillips, hija de la princesa Ana, recibió a su tercer hijo, Lucas Tindall.

Así las cosas, la reina Isabel ya tiene once nietos y completará la docena cuando nazca el primogénito de la princesa Beatrice, quien anunció hace poco su embarazo.

Entre los bisnietos de la monarca y su fallecido esposo Felipe también están los príncipes George, Charlotte y Louis, hijos del futuro rey William; Isla y Savannah, hijas de Peter Phillips (hijo de Ana), y Mia y Lena Tindall, las otras hijas de Zara Phillips.

Entre ellos, Charlotte es la primera en disfrutar de la abolición de la prevalencia de los hombres sobre las mujeres en la línea de sucesión. Por eso no fue desplazada por su hermano menor, Louis. Si Harry y Meghan tienen un tercer hijo varón, Lilibet tampoco se verá obligada a ocupar un lugar después de él en razón de su sexo.

Los nietos de la reina que aún están lejos de estrenarse como padres son Lady Louise Windsor, de 17 años, y su hermano James, de 13, vizconde Severn, por ser aún muy jóvenes.