LA SEMILLA DEL ICETEX
Hace más de 30 años un joven estudiante se encontró ante una encrucijada: no podía aceptar una beca para realizar una especialización en los Estados Unidos, porque no tenía recursos para sostenerse en el exterior. El joven, Gabriel Betancur Mejía, solicitó un préstamo a la compañía Colombiana de Tabaco y ofreció como garantía el resultado de sus estudios. El sistema le quedó sonando y el proyecto para la creación de un instituto para financiar estudios en el extranjero quedó consignado en su tesis de Administración Pública. Fue la semilla del Icetex, fundado en 1952, que ha apoyado la capacitación de más de 550 mil estudiantes en el extranjero y que ha servido de modelo para entidades similares en América Latina. Betancur Mejía, abogado, diplomático y economista fue su primer director. Hoy, después de 30 años de funcionamiento, el Icetex lo recuerda. Y el país le reconoce su incansable labor en torno a los problemas educativos y culturales no sólo desde el Ministerio de Educación, sino desde la Unesco como Embajador de Colombia y Sub-director del organismo internacional.