Lady Di y Carlos III habrían tenido una hija antes de Harry y William; se revelaron inquietantes detalles

La realeza británica se convirtió en blanco de diversas noticias en los medios internacionales, debido al impacto que tuvieron varios acontecimientos relacionados con sus integrantes. Muertes, movimientos inesperados, secretos, disputas y traiciones fueron protagonistas de todo lo que rodea la historia de la corona inglesa.

Tras la muerte de la reina Isabel II, las miradas de los curiosos se posaron en todo lo que estaba relacionado con Carlos III, sus hijos, William y Harry, y los acontecimientos que marcaron la vida de Lady Di, también conocida como la princesa Diana de Gales. Poco a poco se destaparon detalles reveladores de la realeza, conociéndose a fondo qué sucedió al interior de la familia con el pasar de los años.

Recientemente, la prensa internacional recordó una inquietante noticia que le dio la vuelta al mundo en 2015, precisamente porque se mencionaba un secreto que se habría ocultado por mucho tiempo. El diario estadounidense Globe fue el encargado de soltar una bomba de información, la cual apuntaba a que la princesa Diana y el príncipe Carlos, en ese entonces, habrían tenido una hija antes de sus hijos varones.

El medio puntualizó que la pareja desconocía de esta situación, ya que se habría dado todo por cuenta de una fertilización in vitro. Aquella mujer se llamaría Sarah y nacido después de un supuesto examen de fertilidad que ordenó la reina Isabel II para asegurar su descendencia como fuera, relató el diario en su versión.

Globe señaló que en aquella cita médica a la que asistieron los príncipes, extrajeron el esperma de Carlos y los óvulos de Diana, con el fin de fecundarlos. Esta muestra no fue desechada como se habría informado de forma oficial, sino que, por el contrario, se habría implantado en la esposa del ginecólogo, quien no podía ser padre.

De acuerdo con los detalles que fueron publicados por el medio, la mujer nació en Nueva Zelanda, precisamente diez semanas después de la boda de Diana y Carlos. Sarah tuvo acceso a esta historia cuando ya tenía 20 años de edad, debido a que sus supuestos papás murieran en un accidente.

La supuesta hija de los príncipes se topó con esta información por casualidad, precisamente cuando vio un diario con los datos reales de su vida. Con el pasar del tiempo todo habría cambiado, ya que Sarah Spencer, como la empezaron a llamar, hizo movimientos que involucraban a la familia real.

Globe, de igual manera, volvió a referirse al tema en otra de las publicaciones que hizo, señalando que la mujer no dudó en acudir donde Carlos III para reclamarle por la muerte de Lady Di, quien falleció en agosto de 1997. El diario apuntó que William estaba ansioso por conocer a su supuesta hermana, por lo que buscó tener un encuentro en secreto con ella en Estados Unidos, pero no se concretó de la forma esperada.

Lo particular del tema fue que ninguna fuente directa de la realeza se pronunció al respecto ni desmintió estas versiones, dejando en el aire cuál era la verdad de esta mujer. Tiempo después se indicó que Sarah habría cambiado su nombre e identidad, partiendo lejos de Londres para proteger su vida e integridad por amenazas y advertencias que recibió.

“Nuestras fuentes dicen que William pensó que sería bueno conocerla, pero que prefirió enviar a Kate en su lugar. William se quedó perplejo cuando Kate le dijo que Sarah era la viva imagen de su madre y que podría ser sin duda su hermana mayor”, reseñó el diario en aquel momento, centrándose en el parecido físico que existía.

Este punto fue fundamental en el caso, ya que se compartió una supuesta fotografía de Sarah, donde se evidenciaba la similitud en los rasgos que había con Diana de Gales. Los ojos, la forma del rostro y la nariz apuntaban a que posiblemente sí se trataba de una hija mayor de la que fue la pareja más comentada de la realeza británica.

Distintos medios reseñaron esta información, plasmando dudas e inquietudes en los seguidores de la fallecida princesa, quienes conservan la pregunta de si es o no la hija mayor del matrimonio. Vanitatis comentó que una novela publicada por Nancy E. Ryan en 2011, titulada La desaparición de Olivia, era el camino a las respuestas de este caso, ya que se relataban hechos similares a los que dio Globe.

Por el momento se desconoce la realidad de estos detalles, teniendo en cuenta que jamás se vieron declaraciones de Sarah o de algún familiar directo de Diana de Gales.