“Me fui de la familia real para romper con el ciclo de dolor”: Harry de Inglaterra

Cuando se creía que las desavenencias de Harry con la familia real se suavizarían luego de la muerte del príncipe Felipe, su abuelo, él ha dado unas declaraciones que probablemente no harán sino agravar el daño causado por la entrevista que él y su esposa, Meghan Markle, le dieron a Oprah Winfrey, de acuerdo con The Times, de Londres.

Esta vez, al decir del periódico, el blanco de la diatriba parece ser su padre, Carlos, príncipe de Gales y heredero al trono. “Creo que no hay que apuntar con el dedo para culpar a alguien, pero en lo que se refiere a paternidad yo he experimentado, de alguna forma, dolor y sufrimiento debido a su vez a la pena y el sufrimiento que quizá mi padre o mis padres padecieron. Quiero estar seguro de romper con el ciclo”, le dijo el hijo de Lady Di a Dax Shepard en el podcast Armchair Expert.

“Hay mucho dolor y sufrimiento genéticos que se transmiten de todos modos, pero como padres deberíamos hacer lo que más podamos, intentarlo y decir: ‘¿Sabes qué? Esto me pasó a mí, pero me voy a asegurar de que no te pase a ti’”, afirmó el duque de Sussex, quien ya es papá de un niño, Archie, y espera a una hija con Meghan.

El nieto de la reina Isabel II, de 36 años, también sorprendió al revelar que la primera ver que sintió ganas de dejar a la familia real no fue el año pasado, cuando en efecto lo hizo, sino cuando era un veinteañero.

La otra entrevistadora del programa, Monica Padman, le preguntó si se sentía en una jaula cuando era miembro activo de la casa real y respondió: “¿Ese es el trabajo? Sonreír y soportar. Manos a la obra. Yo estaba en mis veintes y pensé: ‘No quiero este trabajo, no quiero estar aquí, no quiero hacer esto. Mira lo que esto le hizo a mi madre, ¿cómo voy a sentar cabeza y tener una esposa y una familia, si sé que eso va a pasar otra vez?’”.

El duque de Sussex siguió expresando las dudas que lo inquietaron sobre la realeza y cómo en algún momento pensó que podía renovarla desde dentro: “He visto detrás de bambalinas. He visto cuál es el modelo de negocio y no quiero ser parte de eso. Una vez que empecé a hacer terapia fue como si la burbuja se explotara. Saqué mi cabeza de la arena, le di una buena sacudida y me dije: ‘Estás en una posición privilegiada, deja de quejarte, deja de pensar que quieres algo diferente. Haz esto distinto porque no puedes salirte. ¿Cómo vas a hacer esto de otra manera? ¿Cómo vas a hacer que tu madre se sienta orgullosa? ¿Cómo vas a usar esta plataforma para operar realmente un cambio?’. Mirando en perspectiva, comprendí que ayudando a los demás, me ayudo a mí mismo”.

Una vez más, el príncipe reconoció que toda esa inestabilidad emocional con la que creció lo llevó a abusar de las drogas y el alcohol, lo cual fue cubierto por la prensa en su momento. Incluso, hubo reportes detallados de su experiencia con la marihuana.

“De repente te ves a ti mismo consumiendo mucha droga y parrandeando salvajemente. Y miras que la otra gente también lo hace. Ellos seguramente no tenían conciencia de ello. Yo no tenía tampoco conciencia de que estaba muy loco”.

Harry agregó que, simplemente, en ese momento le pareció que estaba en sus veintes y eso era lo que se suponía que hace la gente de su edad.

En la conversación, sin embargo, el príncipe volvió a insistir en el tema de su padre y detalló cómo, a medida que fue conociendo más a fondo su historia, el modo en que fue criado, comprendió por qué lo crio a él como lo hizo.

“Y aquí estoy. Trasladé a mi familia a Estados Unidos. Ese no era el plan pero, a veces, tienes que tomar decisiones y poner a tu familia y a tu salud mental primero”, explicó.

En un momento dado de la charla, Shepard le preguntó si era válido comparar su vida con la del protagonista de la cinta The Truman Show, interpretado por Jim Carrey y quien no sabe que su vida es en realidad un programa de televisión. El príncipe no titubeo en contestar: “Yep, yep, (sí, sí), (la vida en la realeza) es como una mezcla entre The Truman Show y el zoológico”.

Pero la entrevista tuvo también un matiz algo más distendido, cuando Harry relató lo que Meghan y él hacían para mantener en secreto su relación cuando esta comenzaba. “La primera vez que Meghan fue a Londres para quedarse en mi casa, nos encontramos en un supermercado, fingiendo que no nos conocíamos y mandándonos mensajes de texto desde los extremos opuestos de la tienda”.

Nada que ver, explicó, con su vida ahora en Los Ángeles, donde manifiesta sentirse menos presionado por la atención de la gente y los medios. “Aquí puedo caminar un poquito más libremente. Puedo pasearme con Archie detrás de la bicicleta. (En Londres) no habría tenido la posibilidad de hacer eso”.

En fin, analistas como Valentine Low, del Times, dijeron que los grandes “damnificados” de esta nueva andanada son, además de Carlos, sus padres, la reina Isabel y su esposo Felipe, por el modo en que llevaron las cosas en su familia. Lo bueno, concluyó Low, es que esta vez no hubo ataques para su hermano mayor, el príncipe William. Como se recuerda, Harry sostiene un duro rifirrafe con él, debido a que el futuro rey no ha aprobado nunca a Meghan.