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Muere Liliane Bettencourt, la millonaria detrás del gigante L'Oreal
La empresaria francesa murió a los 94 años. Sufría de demencia y alzhéimer, lo que le creó problemas con altas esferas del poder que abusaron de su condición para obtener beneficios monetarios.
El mundo de la moda vuelve a llorar a un gigante. Hace dos semanas el empresario Pierre Bergé dejó de existir, y con esta muerte se enterró definitivamente a esa águila de dos cabezas que era Bergé y su pareja Yves Saint Laurent, ambos fundadores de la marca de ropa que lleva el nombre de este último.
Este miércoles 20 de septiembre falleció la que fue la mujer más rica de Francia. Liliane Bettencourt, la heredera y principal accionista del gigante cosmético L’Oreal, tenía 94 años. Así lo ha informado su familia por medio de un comunicado.
"Liliane Bettencourt murió esta noche en su domicilio. Hubiera cumplido 95 años el 21 de octubre. Mi madre se fue en paz", escribió su hija Françoise Bettencourt-Meyers. La millonaria sufría demencia y Alzheimer desde hace dos años.
La revista Forbes le calculó una fortuna de 33.000 millones de euros a ella y su familia. Por su complicado estado de salud tuvo que lidiar con problemas judiciales en los que involucraban a su gorda billetera y familiares. Una batalla que duró poco más de una década y que finalizó en mayo de este año.
Este lío se convirtió en uno de los culebrones más grandes en la historia de Francia. Pues involucraba a las altas esferas del poder. Se llegó a afirmar que el entorno de Liliane se aprovechaba de ella para obtener beneficios a costa de su incapacidad. Hasta el presidente Nicolás Sarkozy fue imputado en 2013 por abusar de la debilidad de la millonaria para obtener financiación.
Su hija fue protagonista del escándalo. Bettencourt-Meyers afirmaba que el fotógrafo François-Marie Banier de enriquecerse a costa de la magnate de forma abusiva.
Liliane Bettencourt sobrepasó al gigante Bernard Arnault, quien tiene en sus manos el imperio de lujo Louis Vuitton Moët Hennessy.
Bettencourt heredó la empresa cosmética después de la muerte de su padre, el fundador y químico Eugène Schueller, en 1957.
Françoise Bettencourt-Meyers expresó en el comunicado confianza y apoyo a la compañía: “En estos dolorosos momentos para nosotros, quiero reiterar, en nombre de nuestra familia, todo nuestro compromiso y lealtad a L‘Oreal y renovar mi confianza en su presidente Jean-Paul Agon y sus equipos en todo el mundo”.