Gente

Murió Darío Gómez: así fue la vida y carrera musical del ‘rey del despecho’

El cantante antioqueño murió a los 71 años en Medellín.

27 de julio de 2022
Darío Gómez, el Rey del despecho murió en Medellin
Darío Gómez, el Rey del despecho murió en Medellin | Foto: Instagram oficial Darío Gómez

Lejos de cualquier palacio que responda a su apelativo de ‘rey’, Darío Gómez llegó al mundo el 6 de febrero de 1951, en San Jerónimo, Antioquia, en un humilde hogar campesino.

Como joven de campo debió crecer entre la naturaleza y apoyar a su familia en las labores de agricultura.

Sin embargo, muy joven descubrió que su cantar, literalmente, era otro talento, y empezó a componer versos a los 14 años. La casita vieja fue la primera canción que salió de su inspiración mientras estaba en el colegio.

Trabajó como mecánico mientras conseguía apoyo para incursionar en la música. Tenía 12 hermanos, por lo cual era tan difícil decirles a sus padres que se iría de la vereda Los Cedros para cantar.

Sin embargo, su abuelo materno le regaló un tiple y se aventuró con su voz, sus composiciones de joven y su amor a la música, a buscar oportunidades en Medellín, Armenia y hasta en Venezuela.

De tanto probar suerte, un día la vida lo llevó hasta la puerta de Codiscos a finales de la década de los 70. En la disquera vieron en su talento un diamante por pulir y le dieron la oportunidad de grabar con su hermano Heriberto Gómez a dúo, bajo el nombre de Los Legendarios. Empezó a tocar el cielo del éxito cuando le dedicó a su hermana Rosángela Ángel perdido, quien había fallecido, y en medio del dolor logró vender más de medio millón de copias.

“Voy por esta senda triste, la senda de mi amargura, buscando un ángel perdido que no le hallé su ternura”, iniciaba la canción.

Desde 1977 y hasta 1982 se mantuvo en la agrupación. Se convirtió en director artístico de la disquera y con autoridad quiso probar suerte con la música parrandera y el grupo que llamó Los Viejitos Verdes. En 1985 debutó como solista.

Codiscos fue su trampolín. Se atrevió a irse de una de las más importantes empresas musicales de Colombia y fundar su propia productora, Discos Dago. Ahí se convirtió en el rey de los despechados, cantándole al desamor y la traición.

Su mayor éxito fue Nadie es eterno (1989), bajo el trabajo discográfico “Nuestro ídolo”. De ahí en adelante, todo lo que compuso se volvió himno en los bares, cantinas y reuniones. Entre comillas, Sobreviviré, Corazonada, La tirana, Daniela, Me río de ti o Mi renuncia han sido coreadas por miles de personas en el mundo.

Su carrera artística le ha brindado más de seis millones de discos vendidos.

El hijo de Luz Dary Gómez Pineda y Jorge Armando Gómez Arcila, a quien confesó haber matado por accidente, duró más de 30 años casado con Olga Lucía Arcila y tuvo otras parejas después. Sus hijos son: Lady, Kely, Walter, Luz Dary, Jorge y Wílmar. También enluta a sus nietos, una de ellas llamada Daniela, a quien dedicó uno de sus principales éxitos.

Darío Gómez se convirtió este 26 de julio en el principal despecho de sus seguidores. Murió en Medellín, en la Clínica Las Américas tras sufrir un colapso súbito en su hogar, según informaron de manera oficial. Llegó sin signos vitales a ese centro médico y pese a las maniobras de reanimación a las 7 y 31 de la noche partió de este mundo dejando un legado imborrable en la música popular.