CIENCIA

Murió Rafael Navarro, un científico mexicano que colaboró con la NASA para una misión a Marte

Tenía 61 años de edad y perdió la batalla contra el nuevo coronavirus.

29 de enero de 2021
Rafael Navarro, científico de la Nasa
Rafael Navarro, científico de la Nasa | Foto: Twitter: Instituto de Ciencias Nucleares de la Unam

Este jueves falleció por la covid-19 el científico mexicano Rafael Navarro, quien formó parte del equipo de la NASA en las misiones de viaje a Marte, según anunció el físico teórico Miguel Alcubierre.

“Hoy falleció por covid-19 un querido amigo, compañero y colega, a quien le tuve un enorme cariño y una gran admiración, el doctor Rafael Navarro, uno de los científicos más reconocidos del país. En el Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM estamos de luto. Descansa en paz, Rafael”, publicó Alcubierre en su cuenta de Twitter. “Rafael fue uno de los fundadores de la astrobiología en México, colaborador en la misión Curiosity de la NASA en Marte. Científico incansable y multipremiado, una pérdida incalculable para la ciencia mexicana”, destacó el científico teórico sobre Navarro.

Navarro se licenció en biología de la Facultad de Ciencias Naturales de la UNAM en 1983 y luego hizo un doctorado en química de la Universidad de Maryland, College Park, en 1989, en colaboración con el doctor Cyril Ponnamperuma. Desde la Universidad de Maryland trabajó en el centro de especialización en diseño y química de cometas para investigación y docencia en exobiología en la NASA.

También realizó investigaciones en algunas de las regiones más extremas del planeta, ya que formó parte de expediciones científicas patrocinadas por la NASA a regiones alpinas tropicales como el pico de Orizaba en México, de 5.610 metros de altura, y el pico Bolívar, de 5.007 metros, en Venezuela. Como astrobiólogo estudió el efecto de la temperatura sobre la actividad microbiana del suelo y su efecto sobre la línea de árboles.

Uno de sus trabajos más destacados fue la participación en la Misión Curiosity, en la que se envió un astromóvil de exploración al planeta Marte, misión que estuvo dirigida por la NASA.

“Realmente es muy importante y me siento muy contento porque es muy difícil, como científico, pertenecer a una misión espacial; hay muchos científicos en ciencias planetarias y no todos tienen el éxito y la suerte de poder participar. Para mí es un privilegio. Soy el único en Latinoamérica con bandera de otro país que participa en esa misión americana”, dijo en su momento el científico mexicano.

El vehículo iba a ser enviado al espacio inicialmente en octubre de 2009 para que llegara a mediados de 2010; tuvo retrasos y fue lanzado finalmente en noviembre de 2011, y llegó a Marte, exactamente al cráter Gale, en agosto de 2012. El objetivo de esta misión era poner sobre la superficie de Marte un vehículo explorador, que era tres veces más pesado y dos veces más grande que los vehículos utilizados en la misión Mars Exploration Rover, para enviar muestras de suelo y polvo para ser analizado.

La misma Universidad Autónoma de México lamentó el hecho en su perfil de la red social: “Nos duele profundamente la muerte del doctor Rafael Navarro, queridísimo universitario y reconocido científico en México e internacionalmente. Enviamos nuestras condolencias a sus familiares, amigos y colegas”.

Mientras que el Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM afirmó: “Esta es una de las noticias más tristes que hemos tenido que compartir con ustedes. Hoy ha partido, para ser polvo de estrellas, nuestro muy querido Rafael Navarro, investigador del Instituto de Ciencias Nucleares, y nuestro amigo, colega, compañero”.

Navarro fue profesor invitado en la Universidad de Maryland en College Park en Estados Unidos, las universidades Denis Diderot y Val-de-Marne en París, Francia, y en el Instituto Tecnológico de Massachusetts en Estados Unidos. Trabajó con Mario Molina en química atmosférica y electricidad atmosférica.

También fue director de investigación del Centro Nacional de Investigaciones Científicas en Francia y el primero en recibir la beca creativa Mario Molina en Ciencias Ambientales. Además, fue honrado con el Premio Universitario Nacional 1998 para Jóvenes Científicos en Ciencias Naturales por su carrera científica.

Uno de sus más importantes reconocimientos fue la medalla Alexander von Humboldt, que recibió en 2009 de la Unión Europea de Geociencias y el Premio de Geociencias 2009 de la Academia de Ciencias para Países en Desarrollo en Trieste, Italia, por el descubrimiento de la zona desértica marciana, desde Atacama hasta el norte de Chile.