Oscares, ratas y cucarachas
Es un testimonio desgarrador. Rubina Ali, la pequeña que interpretó a Latika en la premiada Slumdog Millionaire, lanzó recientemente su anunciada autobiografía, en la que explica con un realismo sorprendente para una niña de 9 años cómo ha soportado momentos difíciles en su vida, como el abandono de su madre biológica. "Yo tenía un año cuando mi madre dio a luz a mi hermano Abbas (...). Al año siguiente, nuestra madre nos abandonó y se fue con otro hombre. Según mi padre, no fue una gran pérdida. Al parecer ella no se ocupaba realmente de nosotros y siempre lo amenazaba con dejarlo por otro (...). He oído muchos rumores de que tenía muchas aventuras". Con igual sordidez, Ali explica cómo ha sido su vida y las de las 10.000 personas que habitan cada kilómetro cuadrado de las comunas de Mumbai. Explica que su zona "está llena de desagües de aguas sucias, de excrementos y de estiércol" y que "todos vivimos con todos, y también con los animales y con bichos tales como las ratas, las cucarachas y los mosquitos (...). Hay que ir mirando dónde se ponen los pies", añade Ali, quien contó con la ayuda de dos periodistas para publicar la historia. "Yo estoy acostumbrada a ello, pero he visto a muchos niños caerse en estas zanjas, lo cual me parece divertido". Resulta impresionante que la autora de semejantes detalles sea una persona que participó en una de las películas más importantes de los últimos años y estuvo en la alfombra roja de los premios Oscar.