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Príncipe Felipe, esposo de la reina Isabel II, sale del hospital

El príncipe consorte, que en junio cumplirá 100 años, fue ingresado el 16 de febrero como “medida de precaución” tras haberse sentido mal.

16 de marzo de 2021
Príncipe Felipe, esposo de la reina Isabel II, sale del hospital | Foto: AP

El duque de Edimburgo, marido de la reina Isabel II, salió este martes del hospital tras permanecer a sus 99 años un mes ingresado, inicialmente por una infección a la que se sumó después una operación cardíaca.

Vestido con camisa blanca y jersey color crema, el príncipe Felipe, que desde 2017 está retirado de la vida pública, fue visto en el asiento trasero de un vehículo saliendo del hospital King Edward VII de Londres.

El príncipe consorte, que en junio debe cumplir 100 años, fue ingresado allí el 16 de febrero como “medida de precaución” tras haberse sentido mal.

Ante las especulaciones y preocupación por su avanzada edad, la casa real informó pocos días después de que la hospitalización no estaba relacionada con la covid-19, sino que se debía a una infección.

Bajo una fuerte expectación mediática, a principios de marzo fue trasladado del pequeño y elegante King Edward VII, situado en el barrio londinense de Marylebone, al gran hospital público St Bartholomew que, según su página web, posee el mayor departamento especializado en enfermedades cardiovasculares de Europa.

Allí fue sometido “con éxito” a una intervención quirúrgica “para tratar una enfermedad cardíaca preexistente”, antes de regresar en ambulancia pocos días después al hospital que finalmente abandonó este martes.

El príncipe consorte, que en junio debe cumplir 100 años, fue ingresado el 16 de febrero como “medida de precaución” tras haberse sentido mal. | Foto: Getty Images - WPA Pool / Pool

Polémica por presunto racismo

Mientras el príncipe Felipe se encontraba internado en una clínica, la familia real británica se vio envuelta en una polémica desatada por la entrevista de Enrique y Meghan Markle.

La familia, dijo el príncipe Guillermo, “no es racista”, siguiendo con la contraofensiva lanzada después de que su hermano denunciara conversaciones sobre el color de piel que tendrían sus hijos.

En una explosiva entrevista televisiva vista por 50 millones de personas en todo el mundo, Enrique y Meghan afirmaron que algún miembro de la familia había mostrado “preocupación” por el color de piel de tendrían sus hijos, ya que la madre de Meghan es negra.

Esta acusación provocó una grave crisis en la monarquía de un país donde la fuerza del movimiento Black Lives Matter llevó recientemente a revisar la historia colonial y su relación con la trata de esclavos.

  Harry y Meghan dejaron pasmado al mundo al contar que un miembro de la familia real les preguntó de qué color iba a ser su hijo, Archie, entre otras muestras de racismo.
Harry y Meghan dejaron pasmado al mundo al contar que un miembro de la familia real les preguntó de qué color iba a ser su hijo, Archie, entre otras muestras de racismo. | Foto: ap

Ahora el tema está bajo la mirada de todo el planeta, en especial en Estados Unidos donde la pareja vive desde su estrepitosa salida de la monarquía hace un año, y en la Commonwealth, un conjunto multirracial de más de 50 países en los cinco continentes unidos por sus lazos históricos con la corona británica.

En este contexto, la realeza lanzó una respuesta que, pese a su tono conciliador, dejó claro que estas acusaciones no serían aceptadas sin discusión.

Si su padre y heredero al trono, el príncipe Carlos, de 72 años, había respondido únicamente con una risa nerviosa el martes cuando le preguntaron al respecto durante una visita a una iglesia africana de Londres convertida en centro de vacunación contra la covid-19, Guillermo fue más locuaz.

“No somos una familia racista en absoluto”, aseguró el segundo en la línea sucesoria al trono británico, de 38 años, mientras recorría una escuela de un barrio multirracial del este de la capital junto a su esposa Catalina.

También precisó no haber hablado con Enrique desde la difusión de la entrevista el domingo pero tener la intención de hacerlo, lo que algunos interpretaron como la confirmación del alejamiento entre los dos hermanos.

Enrique, de 36 años, y Meghan, de 39, explicaron su salida de la monarquía y su exilio a California por la falta de apoyo de la corona ante la insostenible presión y el racismo de la prensa sensacionalista.

Esto provocó una airada reacción del director de la Sociedad de Editores, Ian Murray, quien aseguró que la prensa británica no es sectaria ni racista. Más de 250 periodistas respondieron sin embargo calificando de “ridícula” esta “negación” y Murray acabó dimitiendo el miércoles.

Con AFP.