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Revelan la burla de la reina Isabel II a Camila Parker que la hizo “echar chispas” el día de su matrimonio
El entonces príncipe de Gales y Camila Parker se casaron el 9 de abril de 2005, ocho años después del fallecimiento de Diana de Gales.
La familia real británica continúa en la lupa internacional a más de dos meses de la muerte de la reina Isabel II. Poco a poco empiezan a desvelarse curiosos episodios en torno a la monarquía y su círculo más cercano, algunos de ellos ocurridos incluso hace más de una década y que, a pesar de ello, se evocan hoy en día.
La muerte de la soberana Isabel II, quien gobernó suelo británico por siete décadas, estuvo precedida por un sinnúmero de momentos que traspasaron la esfera pública y ahondaron en lo más recóndito del espectro privado. El matrimonio de uno de sus hijos, el ahora rey Carlos III, con Camila Parker fue uno de los sucesos que no pasó desapercibido y cuyos instantes no generaron para todo el mundo una sorpresa.
Fue en 2005, y después de tres décadas de conocerse, que se oficiaron dos bodas (una civil y otra religiosa) que no estuvieron alejadas de las críticas y de para quienes la memoria de la princesa Diana seguía más viva que nunca. La fecha decidida, tras algunos tropiezos y contra todo pronóstico, fue el 9 de abril de ese año.
#TalDíaComoHoy en 2005 el príncipe Carlos de Inglaterra anuncia su boda con Camila Parker. ⛪ pic.twitter.com/wre4hueOcC
— Toda una amalgama (@Todaunaamalgama) February 10, 2018
Ese evento marcaría un “día muy especial para nosotros y nuestras familias”, rezaba un comunicado en aquel entonces y que, según recogió The Independent, también decía: “Se pretende que la Sra. Parker Bowles use el título su alteza real la princesa consorte cuando el príncipe de Gales acceda al trono”.
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¿Una broma o venganza?
De acuerdo con medios internacionales, llegado el momento la decisión que “enfureció” a Camila fue que la monarca británica optara por vestir un atuendo completamente blanco justo en su boda. Algunos lo interpretaron como una muestra de “venganza”, luego de que Parker hiciera lo mismo cuando el entonces príncipe de Gales se casó con Diana en julio de 1981.
¿Una broma? Sea cual haya sido el motivo, lo cierto es que fue una determinación que, según traspasó el ámbito privado, no fue del agrado de quien ahora es conocida bajo el título de reina consorte. Varios conocedores en temas de la realeza han expresado en varias oportunidades las fricciones que marcaron la relación entre Camila e Isabel II.
Este detalle del vestuario generó toda una teoría de conspiración en redes sociales entre quienes atribuyeron el atuendo de la reina, en 2005, como una respuesta a lo propio que hizo la hoy en día esposa de Carlos III. Sin embargo, la opinión de los internautas queda como una hipótesis ante otros hechos de la monarca quien, tal como lo informó El Mundo (en febrero de este año), quería que su nuera se convirtiera en reina consorte y por ello había manifestado su “deseo”, a propósito de su jubileo de platino.
Cumpleaños de Carlos III como rey
Este lunes –14 de noviembre– Carlos III (de 74 años) celebró su primer cumpleaños como heredero al trono y bajo un nombramiento como guardián del Gran Parque de Windsor, una designación que previamente había estado para su padre, el fallecido duque de Edimburgo.
Europa Press informó que la Casa Real había divulgado una imagen oficial en la que el rey británico está apoyado en un roble. Así las cosas, el hijo de Isabel II acepta un título que se remonta al siglo XVI. El palacio de Buckingham no se ha referido a si el monarca continuará la tradición de su madre, en la que se festejaban sus aniversarios a mitad de año, en vez de abril.