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¿Se parecen? Así es la ‘hija adoptiva’ de Esperanza Gómez
La actriz de cine para adultos ha desempeñado su rol como madre de forma ejemplar.
Esperanza Gómez es una de las actrices más famosas en el país y todo porque fue la pionera en el campo de la pornografía en cuanto a actrices porno colombianas se refiere, logrando hacerse a un nombre muy reconocido en esta industria, lo que le ha dado una fortuna modesta con la que vive tranquila y le permite darse sus lujos sin tener que estar metida en un set de grabación de forma permanente.
Antes no se sabía mucho de esta caldense que siempre fue muy reservada con su intimidad, pues el tabú que había por la industria del cine para adultos le impedía disfrutar de su fama a cabalidad. Sin embargo, los tiempos cambiaron y Gómez empezó a abrirse mucho más a los medios de comunicación, donde ha contado su historia, ha revelado secretos íntimos de su vida en pareja y hasta ha revelado que tiene una “hija”.
Se trata de su sobrina Valentina Gómez, hija de su hermana y que ha criado desde los años de su primera infancia, pues en el momento en que la pequeña llegó al mundo, era Esperanza la que veía por todas en su hogar, por lo que estuvo siempre al frente de la crianza de la chica, a quien le fue honesta con respecto a su trabajo desde muy temprana edad, para que nadie le fuera a contar las cosas desde la perspectiva errónea.
“Tengo una niña de 26 años, ha sido como mi hija y la eduqué, padre no es el que engendra, es el que hace el papel… Nunca me vio teniendo citas diferentes a mi marido, ella entendió que lo mío era un trabajo, la asimilación es diferente si uno les cuenta y no se entera por sus compañeritos que cambian las cosas e interpretan diferente”, reveló Esperanza en una de sus entrevistas con la emisora Tropicana.
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Por otro lado, Gómez también se ha referido a que ella está muy familiarizada con implantar la disciplina en su hogar y eso incluyó a Valentina, a quien regañaba como si fuera su propia hija para enseñarle el manejo de la autoridad, el carácter y a hacer bien las cosas en la vida; no se podía crecer pensando que todas las cosas le iban a llegar a las manos por cuestiones de magia.
“Yo trabajaba y respondía económicamente tanto por mi hermana como por la niña y yo era la que se sentaba en la casa a hacer tareas con ella, la que le ayudaba con los proyectos de la escuela, la que la regañaba, ya que mi hermana no la castigaba y entonces me tocaba a mí”, le contó a Camilo Triana en su segmento digital para YouTube.
Hoy Valentina ya es una mujer hecha y derecha que en efecto heredó toda la belleza de la familia Gómez, más que todo los atributos bien conocidos de la actriz, quien ha revelado en muchas ocasiones que solo realiza una película al año donde solo hace lo que ella, por contrato, desea hacer.
Valentina ostenta una figura de envidia que muestra sin tapujos en sus redes sociales con conjuntos sensuales de corsé con transparencias y encajes que le roba el aliento a más de uno ganándose miles de likes y comentarios que exaltan su belleza y su carisma, sin dejar a un lado aquellos que se pasan de tono y que ella, como su tía, sabe manejar a la perfección.
“Hermosa 👏👏👏”; “Muy guapa mi segunda Esperanza Gómez”; “¡Qué encantadora estás!”; “Igual de hermosa que la mamá Esperanza Gómez”, son algunos de los comentarios que se pueden leer en las publicaciones tanto de Esperanza como de Valentina cuando las dos unen sus bellezas en postales y videos que quedan en la nube para la posteridad.