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Nerissa y Katherine Bowes-Lyon tenían la edad mental de 6 años y en 1941 fueron internadas en una clínica especializada.

TELEVISIÓN

The Crown: ¿qué tan cierta es la historia de las primas escondidas de la reina Isabel?

Según la serie, la mamá de la monarca hizo pasar por muertas a dos sobrinas que tenían retraso mental y estaban encerradas en un centro psiquiátrico. El episodio real, sin embargo, tiene algunas diferencias. Vea esta y otras noticias de entretenimiento de la semana.

29 de noviembre de 2020

Muchos televidentes quedaron asombrados cuando vieron en The Crown, la serie de Netflix sobre la vida de la reina Isabel, un episodio dedicado a la depresión de la princesa Margarita, la hermana menor de la monarca. Y todo porque en ese episodio, y luego de visitar a una psiquiatra, ella descubre una historia macabra sobre dos de sus primas hermanas: Nerissa y Katherine Bowes-Lyon.

Según la ficción, ellas tenían retraso mental y su familia, liderada por la mamá de la reina Isabel, decidió mantenerlas escondidas en una especie de manicomio justo cuando Jorge V, el papá de la actual monarca, accedió al trono de forma sorpresiva por la renuncia de su hermano, el rey Eduardo VIII, quien se había enamorado de una mujer divorciada. Según la ficción, incluso llegaron a declararlas muertas para que nadie supiera de su existencia.

Cuando Margarita confronta a su mamá, esta le dice que tomaron la decisión para no generar sospechas sobre la posible existencia de genes defectuosos en la sangre de los herederos al trono. Le explica que los Windsor (la familia que está en el trono inglés) ya tenían antecedentes difíciles, como el caso de Jorge III (conocido popularmente como el rey loco), y que si la prensa se enteraba que en familia de la esposa del rey había casos similares, comenzarían a dudar sobre la idoneidad de los próximos monarcas.

Como la serie mezcla eventos que ocurrieron de verdad con elementos inventados, varios medios británicos se pusieron a buscar en los archivos la historia real: las primas, hijas de un hermano de la mamá de la reina, tenían la edad mental de un niño de 6 años y fueron diagnosticadas en 1941 con “imbecilidad” –como se le llamaba a su condición en la época–. Aunque sí las enviaron a un hospital y en el registro oficial aparecían muertas, al parecer se trató de una decisión de su propia madre, y ni la reina ni su mamá estuvieron involucradas.

Es más, la revista Tatler cuenta que los hijos vivos de la señora dicen que sus hermanas no aparecían muertas en el registro como un intento de ocultar su paradero, sino por un error de su mamá, que dejaba en blanco los formularios que le enviaba la entidad encargada de llevar el registro de los miembros de las familias nobles, y que en esa época lo publicaba en un libro, como el que consultan la reina y su hermana en la serie. Dicen que lo hacía porque no le gustaba dar muchos detalles de ellas, ya que en esa época el retraso mental era visto con muy malos ojos.

Según los reportajes de los medios británicos, la reina Isabel y su mamá se enteraron de la verdad en 1982 y decidieron enviar un abultado cheque al sanatorio para cubrir algunos de los gastos de sus familiares (”para los dulces” como se dice coloquialmente). Eso sí: nunca las visitaron y no fueron a sus entierros, que transcurrieron en completa soledad, y rodeadas de otros compañeros del centro sanatorio. Tampoco le informaron a la prensa ni corrigieron el registro, por lo que en 1987, cuando The Sun reveló la historia, se generó un gran escándalo y se popularizó la versión del encubrimiento que terminó saliendo en la serie.

MAGNATES

Elon Musk: el segundo hombre más rico del mundo

Esta semana, y gracias al aumento en el precio de las acciones de Tesla, su compañía para fabricar autos eléctricos, el estadounidense Elon Musk se convirtió en el segundo hombre más rico del mundo, según el listado de Bloomberg, sobrepasando a Bill Gates, fundador de Microsoft. Musk, quien en enero estaba en el puesto 35, ha tenido un ascenso vertiginoso durante 2020. No solo porque su empresa SpaceX logró mandar con éxito a varios astronautas al espacio en una misión conjunta con la Nasa, sino también porque Tesla fue aceptada en el S&P 500, el índice bursátil en el que solo están las mejores compañías que cotizan en la bolsa de Estados Unidos.

Gracias a eso, el millonario, de 49 años, pasó de tener un patrimonio neto de 7.200 millones de dólares a uno de 127.900 millones de dólares. La mayor parte de ese dinero lo tiene por Tesla, que hoy vale casi 500.000 millones de dólares, mucho más que empresas como Coca-Cola y Disney. Actualmente, por encima de Musk solo aparece Jeff Bezos, el dueño de Amazon.

HOLLYWOOD

Las tragedias de Michael J. Fox

En 1991, pocos años después de convertirse en uno de los actores más reconocidos por su papel de Marty McFly en Volver al futuro, Michael J. Fox recibió la noticia más dura de su vida: sufría de párkinson a los 29 años. Hoy, tres décadas más tarde, el actor publica No Time Like the Future (No hay un momento como el futuro), la autobiografía en la que revisa ese y otros episodios dolorosos de su vida, y cuenta cómo logró superarlos. El que más ha llamado la atención fue un percance que sufrió en 2018, pues los médicos le descubrieron un tumor en su médula espinal, que estaba a punto de dejarlo parapléjico.

Esa vez lograron operarlo con éxito, aunque la cirugía era de mucho riesgo y varios médicos pensaban que podía causarle la muerte o dejarlo paralítico. Pero cuando Fox creyó que ya estaba fuera de peligro, luego de cuatro meses de recuperación, sufrió una caída que lo volvió a dejar en la cama. Ya está mejor, pero en el libro confiesa que el párkinson lo ha afectado tanto que decidió retirarse del cine: “Hay un tiempo para todo, y mi tiempo de dedicar una jornada laboral de 12 horas y memorizar siete páginas de diálogo es mejor dejarlo atrás”.

REALEZA

“Tuve un aborto”: Meghan Markle

Mucha sorpresa causó esta semana un texto escrito por Meghan Markle y publicado en The New York Times el miércoles. Allí la duquesa confesó que el príncipe Harry y ella estaban esperando a su segundo hijo, pero lo perdieron porque sufrió un aborto espontáneo en julio pasado. “Perder un hijo significa cargar con un dolor casi insoportable, experimentado por muchos, pero del que pocos hablan”, escribe en un artículo conmovedor, en el que también cuenta que todo sucedió en su casa de Santa Bárbara, California.

“Después de cambiarle el pañal (a Archie), sentí un fuerte calambre. Me dejé caer al suelo con él en mis brazos, tarareando una canción de cuna para mantenernos a los dos tranquilos. La alegre melodía contrastaba con mi sensación de que algo no estaba bien. Sabía, mientras abrazaba a mi hijo mayor, que estaba perdiendo al segundo”. Según explica, desde entonces Harry y ella intentan reponerse de la pérdida. Al parecer, la familia real ya está enterada y han apoyado a la pareja en todo momento.

MUNDO

Trump: persona non grata

Ahora que Donald Trump dio los primeros pasos para reconocer su derrota en las elecciones de Estados Unidos, muchos se preguntan a dónde se irá a vivir una vez salga de la Casa Blanca. Hasta antes de llegar a la presidencia, el magnate residía en la Trump Tower de Nueva York, y allí se movía en los círculos de la alta sociedad. Pero debido a que su gobierno ha sido bastante impopular en la ciudad, algunos creen que, de volver a su antigua casa, el presidente y su familia enfrentarían un alto grado de rechazo social.

Por eso, muchos apuestan que el mandatario se mudará a Mar-a-Lago, su condominio de Palm Beach, Florida, un estado en el que ganó las elecciones y en donde tiene una gran base de fanáticos. Esto, sin embargo, no sería tan fácil: en 1993, cuando le otorgaron el permiso para construir el complejo como un “club social”, Trump se comprometió a que no lo usaría como residencia y a que solo pasaría allí 21 días al año y nunca más de siete seguidos. Sus vecinos están bastante enojados, pues hasta ahora no ha cumplido, y prometen demandar si rompe definitivamente la regla.

ARTE

Pelea por un Picasso

Los derechos de venta sobre El rescate (1932), una famosa obra de Pablo Picasso, tienen enfrentados a Astrid-Caroline Cole, una reconocida marchante de arte de Londres, y a los hermanos Sean, Lauren y David Carpenter, dueños de una empresa de violines en Nueva York. Cole dice que los hermanos compraron la obra en 2017 y no sabían de su importancia hasta que ella les contó que mostraba a Picasso sacando del agua a su amante María Teresa Walker.

También asegura que ellos le concedieron el derecho a vender la obra con una comisión del 10 por ciento si ella conseguía incluirla en una exposición que estaba organizando el Tate de Londres en 2018. La obra estuvo en la exposición, y ella los acusa de incumplir el acuerdo, porque dice que recibió una oferta para comprar el cuadro de parte de Paul Allen, el fallecido cofundador de Microsoft, pero que ellos se negaron. Los hermanos, por su parte, afirman que el acuerdo nunca existió. El juez no ha fallado, pero ya dijo que “a primera vista” pareciera que Cole falsificó un correo en el que Allen le ofrece casi 13 millones de dólares por el cuadro.