El guacal ideal

1.    A la medida. Lo mejor es que vayas a comprarlo con tu perro o con tu gato; deja que entre, que se dé vuelta y así sabrás cuál es el más cómodo. Un guacal debe permitir libre movimiento de tu mascota y garantizar que puede cargar el peso de tu peludo.

2.    Lo barato sale caro. La calidad es importante. No inviertas en guacales que no tengan una buena estructura o que no te ofrezcan calidad. La idea es comprar un guacal que te sirva varias veces y que brinde seguridad a tu mascota.

3.    Fácil de guardar. El guacal ideal debe ser desarmable o flexible (en el caso de los gatos), porque la mayor parte del tiempo pasará guardado en el depósito de tu casa.

4.    Colores llamativos. Procura que el guacal que compres sea de colores llamativos, será más fácil de identificar en la banda de maletas de un aeropuerto.

5.    Y el hombre se inventó la rueda. Si tienes un perro de gran tamaño, lo mejor es que compres un guacal con ruedas. Esto te evitará mucho esfuerzo.

6.    Que entre el aire. En viajes largos tu mascota se va a agitar y la temperatura de su cuerpo se puede elevar. Es por esto que la ventilación del guacal es definitiva para evitar choques de calor.

7.    Sin bordes peligrosos. Verifica con detenimiento el interior del guacal para percatarte de que no haya bordes que le puedan causar molestia o una lesión a tu mascota.

8.    Piensa a futuro. Si vas a comprar un guacal para tu cachorro, cómpralo de una vez pensando en el tamaño que va a tener cuando sea adulto.

9.    No compres un rompecabezas. Si bien el guacal ideal debe ser desarmable, procura que no tenga muchas piezas. La pérdida de una de estas puede hacer el guacal inservible.

10.    Prêt-à-porter. Hay cargadores para pequeños perros y gatos que están muy a la moda. Si vas a un evento o a una reunión, puedes hacer uso de uno de estos y lucir muy chic.