Opinión

Con estas acciones el Meta impulsa una agricultura más sostenible

La gobernación departamental ha consolidado varios instrumentos de planeación para impulsar la industria mientras fortalece políticas de sostenibilidad y conservación.

Rafaela Cortés Zambrano*
3 de diciembre de 2024
Rafaela Cortés
Rafaela Cortés Zambrano. Gobernador del Meta 2024. Especial Gobernadores. Foto Estudio Bogotá Abril 10 de 2024. Foto: Juan Carlos Sierra-Revista Semana. | Foto: JUAN CARLOS SIERRA PARDO / SEMAN

Para el departamento del Meta es muy importante contar con espacios de diálogo e interacción del orden regional, con actores estratégicos del sector agropecuario con relevancia nacional, a través de los cuales se impulse el desarrollo sostenible de los territorios, porque esa visión coincide con los objetivos que “El Gobierno de la Unidad” persigue en su Plan de Desarrollo, que integra un enfoque territorial y sostenible, además de promover ordenanzas que fortalecen cadenas productivas sostenibles, como las de guadua, apicultura y otros sectores estratégicos.

Este marco normativo ha trascendido al ámbito de la implementación, destacándose iniciativas como la ordenanza de la ganadería sostenible, fundamentada en acciones establecidas en documentos técnicos del orden nacional. Esas acciones establecidas en las ordenanzas han sido respaldadas por cooperantes y han permitido la creación de redes piloto de proveeduría que no solo contribuyen al cumplimiento de “acuerdos cero deforestación”, sino que también generan incremento en la productividad de la cadena y poseen potencial para acceder a mercados de carbono.

Una de las ordenanzas más relevantes de este cuatrienio es la del Plan Departamental de Extensión Agropecuaria (1262 de 2024), que contempla 13 sistemas productivos y 32 líneas; esta herramienta de planificación incorpora un enfoque territorial y se fundamenta en el servicio de extensión agropecuaria con perspectiva de paisaje. Este enfoque reconoce los sistemas productivos desde una visión integral, valorando especialmente el componente poblacional de cada territorio, promoviendo la productividad y la mejora en la calidad de vida de los productores desde la conservación de la biodiversidad y el equilibrio ecosistémico, lo cual es clave para la sostenibilidad y resiliencia del territorio.

En el ámbito ganadero, la región de la Orinoquia representa el 21 por ciento del inventario nacional, con un total de 6 millones 241 mil cabezas de ganado, destacándose el departamento del Meta como el segundo mayor inventario ganadero del país, con 2 millones 382 mil animales (ICA, 2024). Este sector no solo es un pilar clave para la economía regional, sino también un elemento central en las tradiciones y costumbres del territorio.

Según Proorinoquia, esta región es líder en diversas actividades productivas del país: 97 por ciento de la soya, 97 por ciento del marañón, 63 por ciento del arroz secano, 45 por ciento de la palma de aceite, 36 por ciento del maíz amarillo tecnificado, 35 por ciento de las plantaciones forestales, y 15 por ciento del cacao. Este último es clave en la estrategia de sustitución de cultivos ilícitos. Además, aporta el 18 por ciento de la producción piscícola, el 10 por ciento del inventario porcino, y el 77 por ciento del petróleo que se genera en Colombia.

En este contexto, la producción de biomasa en el Meta y en la Orinoquia se posiciona como un eje estratégico, al aprovechar las capacidades productivas de la región y su alineación con las políticas de sostenibilidad y conservación, para la transformación energética de manera estratégica y adecuada. Estas acciones fortalecen el desarrollo económico del territorio, contribuyen a la mitigación del cambio climático y a la preservación de los recursos naturales; generando un impacto positivo en las comunidades y los ecosistemas locales.

*Gobernadora del Meta.