De lujo: el modelo híbrido con el que Mercedes-Benz quiere continuar conquistando el mercado colombiano

La marca de Stuttgart sigue liderando las ventas en el segmento de lujo en todo el mundo, lo cual no es un dato que sorprenda en su centenaria historia, especialmente durante los últimos cinco años, cuando solo en 2019 –antes de la pandemia– logró comercializar 2.339.562 vehículos. En Colombia las cosas no son diferentes, ya que Mercedes-Benz es catalogada como una de las firmas que abandera el mercado luxury, aunque ahora con mayor énfasis en el segmento de híbridos enchufables y no enchufables de la más alta gama, y en el que alcanzó las 1.175 unidades entre enero y septiembre, según el Runt.

Justamente uno de los modelos de mayor aceptación en esa área es la GLE 450 4MATIC, un SUV híbrido, no enchufable, de aspecto deportivo y carácter fuerte que viene configurado con el paquete estético AMG Line, del que se destacan aspectos como la generosa persiana con terminaciones cromadas, estribos que facilitan el acceso, escapes incrustados en la defensa trasera, rines de 20 pulgadas y sillas de formas deportivas.

Lo interesante es que esta camioneta, con tres filas de sillas, se impulsa con un motor de 3,0 litros, seis cilindros y 24 válvulas, que genera una potencia de 362 caballos y un torque de 500 Nm, el cual se acopla a una caja automática de 9G-Tronic y tracción 4MATIC con sistema electrónico de tracción 4ETS, que le concede un buen desempeño todoterreno y la mejor adherencia en diferentes suelos. A esto se suma la tecnología EQ Boost (Mild Hybrid) de 48 voltios, que se encarga de asistir al propulsor en el inicio de la marcha; además de añadir 22 caballos a la potencia, 250 Nm más de torque y de cumplir funciones de alternador.

Mercedes-Benz CLA 180, el coupé de 4 puertas

Otro de los modelos de la marca de la estrella que es necesario destacar es el CLA 180, un subcompacto que desde su concepción, en 2013, ha logrado conquistar el mercado con ese particular diseño que ha sabido imponer un concepto vanguardista puro y colmado de deportividad, pero sin perder el ADN que lo define como integrante de una familia de élite.

Sin embargo, la segunda generación, que rueda por las vías desde 2019, exhibe una carrocería tipo coupé con cuatro puertas y línea de techo más baja, con acertados retoques y molduras AMG Line, que la hacen mucho más aspiracional, las cuales se expresan en su parrilla diamantada, las prominentes entradas de aire frontales, las salidas de escape en aluminio y sus rines bitono.

Mientras en el interior expone sus mejores argumentos de elegancia y confort desde el timón tipo D con levas de cambio para operar la transmisión 7G-DCT, las sillas tipo cubo (de una sola pieza en cuero Ártico) y, por supuesto, dos pantallas de 10,5 pulgadas completamente integradas. Una para el panel de instrumentos y la otra para acceder al infoentretenimiento MBUX

Mercedes-Benz User Experience que viene con CarPlay y Android Auto, por medio de una plataforma touchpad instalada en la consola central.

Lo interesante es que esta ‘nave’ se impulsa con un propulsor de 1,3 litros que desarrolla una potencia de 134 caballos a 5.500 rpm y 200 Nm de torque desde las 1.460 rpm, que se acopla a una caja de doble embrague y siete velocidades 7G-DCT, que permite un consumo más bajo que su predecesor. Sin dejar de mencionar que este modelo cuenta con siete airbags y función de frenado autónomo, entre otros sistemas, que hoy le permiten ostentar las cinco estrellas en las pruebas de seguridad de Euro NCAP.