DESARROLLO SOSTENIBLE
El sector religioso de Colombia reafirma su interés en el cumplimiento de los ODS
Un informe alterno señala que la desigualdad social histórica se ha incrementado a causa de la pandemia.
La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) constituye el principal lineamiento global de acción para las personas, el planeta y la prosperidad, con el fortalecimiento de la paz universal de modo más libre y la búsqueda de la erradicación de la pobreza, incluso de la más extrema.
Su seguimiento y evaluación son posible gracias una plataforma estratégica global internacional denominada Foro Político de Alto Nivel sobre Desarrollo Sostenible (HLPF), de reunión anual.
Este año, Colombia formó parte de los 42 países participantes en el HLPF y durante la realización del evento (entre el 6 y el 15 de julio) dio a conocer su tercer “Reporte Nacional Voluntario” (RNV) de implementación de los ODS.
Además de presentar la articulación del “Plan Nacional de Desarrollo 2018-2022” con los ODS, el RNV enfatizó en la territorialización y en el cumplimiento de las metas de los Objetivos y la participación de actores no gubernamentales en torno a la Agenda 2030.
Dentro de estos últimos se incluye el sector interreligioso colombiano, que presenta, de manera alterna, el informe “¿Cómo Vamos en los Objetivos de Desarrollo Sostenible en Colombia hasta el año 2020?”, efectuado por la iniciativa ecuménica “Despertando al Gigante” y la “Plataforma Interreligiosa Fe y Desarrollo” para generar un balance aproximativo de los avances en temas relacionados con las metas del Plan Nacional de Desarrollo y los ODS.
Objetivos de Desarrollo Sostenible 2020, los hallazgos más destacados
El documento es de libre acceso al público interesado en conocer la situación actual de los ODS en Colombia y expone, entre otras realidades, que el país atraviesa la peor crisis económica en su historia desde 1975.
El informe destaca, además, que, si bien los efectos de la pandemia sobre la economía han agudizado la pobreza y el hambre en el país (ODS 1: Fin de la Pobreza y ODS 2: Hambre Cero), es cierto que las causas de ambos fenómenos son de naturaleza estructural. Esto se sustenta en el hecho de que Colombia es uno de los países más desiguales del mundo.
Por otro lado, Colombia cerró el 2020 con cifras preocupantes en lo relacionado con el ODS 3: Salud y Bienestar, en salud materna infantil y muertes no fetales y la inasistencia niños y adolescentes a centros clínicos y hospitalarios para sus controles de desarrollo y atenciones en salud, que se agrava en el caso de las personas con discapacidad, cuyas cifras de inasistencia son del 76,6 por ciento.
En lo que respecta a Acción por el Clima (ODS 13), el informe resalta como positivo el incremento del uso de la bicicleta para la movilidad en Bogotá, que dispuso en tiempos de pandemia de 84 kilómetros adicionales a los 550 preexistentes de carriles destinados a este medio de transporte.
Considerando el ODS 16: Paz, Justicia e Instituciones Sólidas, si bien para el 2020 el índice de homicidios presentó una mejora con respecto a años anteriores, es preocupante que se sigue ejerciendo violencia contra líderes sociales y defensores de derechos humanos, más el reclutamiento de niños y adolescentes como una de las tensiones que tiene Colombia sin resolver para lograr la paz sostenible y duradera.
El documento puede descargarse aquí y leerse en su resumen ejecutivo.