Grave daño ambiental en Florencia, Caquetá

El 24 de abril de 2015, la Alcaldía de Florencia, en Caquetá, expidió el Decreto 0289 en el que se aprobó el Plan Parcial Ciudad Verde, que autorizó un área de expansión urbana en una zona rica en ecosistemas naturales al noroccidente del casco urbano de Florencia. En el Decreto, se especificaron diversas recomendaciones de cuidado ambiental para que la construcción de proyectos habitacionales no tuvieran efectos negativos en los ecosistemas intervenidos y, por el contrario, promovía la gestión de estrategias para reforzar y preservar estas áreas. Sin embargo, los urbanizadores no tuvieron en cuenta estas recomendaciones y causaron un impacto importante en cauces de agua de gran relevancia.

Un análisis técnico ambiental realizado en agosto de 2016 por la Fiscalía General de la Nación concluyó que, debido a adecuaciones en el terreno realizadas por las constructoras de la obra, se generó un impacto irreversible en uno de los cuerpos de agua que hacían parte de la quebrada El Dedito y, por ende, hay afectaciones graves en los ecosistemas cercanos.

Lo cuestionable del caso es que tras 3 años de haber sido entregado este informe por parte de un delegado de la Fiscalía General de la Nación y a pesar del llamado de varios voceros de la comunidad, que prefirieron mantener en secreto su identidad, las entidades implicadas en el seguimiento de este proyecto, en especial la Alcaldía, no han efectuado las acciones necesarias para detener el daño y sancionar a las constructoras responsables. Según los voceros, estos proyectos urbanísticos no cuentan con una Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, por lo que además se están contaminando las aguas de tres fuentes hídricas importantes que cruzan la ciudad de Florencia, lo que podría afectar aproximadamente a 500 familias en la capital caqueteña.

Por ahora, y con la idea de evitar que el daño a la quebrada y a los ecosistemas vecinos siga empeorando, una prestigiosa firma de abogados de Bogotá prepara una acción de simple nulidad contra el plan parcial. Si la acción logra éxito, las constructoras que están edificando los desarrollos de vivienda en las 190 hectáreas que autorizaba el decreto deberán suspender de inmediato los trabajos, hasta tanto no se corrijan o se mitiguen las graves afectaciones que sufrió esta importante fuente.