Grupo Éxito: así construye un futuro sostenible para Colombia y la región

Más de cuatro décadas de la vida de Carlos Mario Giraldo, presidente del Grupo Éxito, han estado al servicio del sector del consumo masivo en Colombia. Hoy es reconocido como uno de los líderes más influyentes de la región e impulsor de grandes transformaciones, como las que llevaron al Grupo Éxito a consolidarse como el retail más sostenible del país, el segundo en América Latina y el séptimo en el mundo, según el Corporate Sustainability Assessment. En agosto de este año, el grupo se convirtió en la sexta empresa colombiana en cotizar en Wall Street y figura entre las primeras diez compañías con mejor reputación del país. El plan es seguir avanzando en el crecimiento del negocio en Colombia, Uruguay y Argentina.

Para que los esfuerzos por la sostenibilidad se traduzcan en cambios reales debe haber una conciencia colectiva, una cultura compartida. ¿Cómo es ese proceso en el interior del Grupo Éxito?

CARLOS MARIO GIRALDO: Venimos en una evolución. Hace unos años se hablaba del capitalismo absoluto, luego del capitalismo consciente y la propuesta nuestra es hablar de generación consciente, que incluye no solo a la empresa, sino también a los socios comerciales, proveedores, clientes, a todos los grupos de influencia que tiene la compañía. Se trata de una generación que entiende que la empresa tiene que ser rentable, competitiva e innovadora, que tiene que impactar el negocio, pero también a la sociedad y al planeta.

Cada vez más clientes y proveedores están tomando decisiones basadas en una agenda sostenible, ¿cómo lo perciben en el Grupo Éxito?

C.M.G.: Hemos visto cómo los clientes aprecian los cambios en favor del planeta. Por ejemplo, que no haya más bolsas de plástico en Carulla o que haya una marca como Pomona Ganadería Sostenible que tiene este sello porque proviene de fincas que no han deforestado, cumplen con derechos humanos laborales y cuidado de las cuencas. Cobramos un 5 por ciento más y se lo trasladamos a esos ganaderos que están dispuestos a asumir ese rigor que implican los procesos adicionales en la finca.

Hay acciones muy interesantes, como el hecho de que algunas de las lechugas y albahacas que comercializan las producen madres cabeza de familia en barrios populares…

C.M.G.: Las terrazas verdes comenzaron en las comunas de Medellín, se expandieron a las de Siloé, en Cali, y ahora van a llegar a Bogotá. Estas mujeres tienen cultivos hidropónicos en las terrazas de sus casas, en principio, financiados por Grupo Éxito, pero ahora empresas como Avianca y Nutresa también contribuyen. Los productos no solo se venden como orgánicos, sino como generadores de oportunidades para esas personas.

Y en esta línea, el Grupo Éxito viene trabajando por posicionarse en los barrios populares de la mano de los tenderos…

C.M.G.: Nuestra alianza con las tiendas de barrio es una belleza. Surgió cuando nos expandíamos con almacenes en los barrios populares. Los tenderos nos preguntaban cuántos más íbamos a abrir porque decían que cada vez que llegaba un Surtimax, en algunas ocasiones, bajaban las ventas. Entonces acordamos hacer negocios juntos. Ellos conocen más que nadie su barrio, a los consumidores. Así que desarrollamos un modelo de comercio asociativo, trabajamos con los que ya tienen su tienda y participamos en un porcentaje importante de su venta.

La producción textil propia ha sido una política diferencial desde su fundación…

C.M.G.: El Éxito es tal vez el principal comercializador de ropa en Colombia. De hecho, nació como un negocio de ropa; el establecimiento original de Gustavo Toro, nuestro fundador, en el centro de Medellín, era una tienda de telas; y de allí tuvo la idea de iniciar la producción desde un taller para que las mujeres tuvieran oportunidad de trabajar. Hoy, nuestro negocio vende 52 millones de prendas al año. La mitad son de marcas propias, que han sido producidas en más de 300 talleres que emplean a más de 9.500 personas, muchas de ellas mujeres cabeza de hogar, y generan un entorno y ecosistema económico y social muy potente. Aun en las épocas cuando todo el mundo importaba la ropa, impulsados por una tasa de cambio favorable, mantuvimos la defensa de ese sistema social tan poderoso, como lo son las famiempresas.

¿Por qué vale la pena seguir haciendo empresa en Colombia?

C.M.G.: Creemos en Colombia y en sus instituciones, que son fuertes, sólidas y confiables, indistintamente de los gobiernos. Además, las altas y bajas han representado en el largo plazo una ruta de crecimiento, de generación de una clase media supremamente importante, no solamente para el consumo, sino para el desarrollo social y familiar. Eso significa confiar.

¿Cómo le gustaría ser recordado?

C.M.G.: Por haber desarrollado gente, permitido que otras personas salgan adelante y hoy sean actores fundamentales para esta sociedad. También por ayudar a generar una mayor huella social y una menor huella ambiental. Y tercero, porque al final, cuando todos acá piensen en el legado digan: lo hicimos todos, no fue él solo.

*Contenido elaborado con apoyo de Grupo Éxito.

Lea también: Así contribuyen las empresas a cerrar brechas y generar progreso en Colombia

Contenido relacionado: Empresas: pilares fundamentales para el progreso y la transformación en Colombia