Caja de compensación
Así recomiendan los expertos invertir las cesantías
Las cesantías son una prestación social a la que tienen derecho los trabajadores formales y equivalen a un mes de salario por año laborado, o proporcional si no se completan los 12 meses. Aunque su objetivo principal es servir como auxilio para quienes se quedan sin empleo, este ahorro puede ser utilizado para educación y compra de vivienda.
Hasta el próximo 14 de febrero los empresarios colombianos tendrán plazo para consignarle a sus empleados las cesantías. Andrés Vásquez, vicepresidente comercial del Fondo de Pensiones y Cesantías Porvenir, resaltó que “En 2021 quedó demostrado que las cesantías son un ahorro con propósito. Cada día más empresas colombianas cumplen con el pago oportuno de esta prestación. Por eso es muy importante que los colombianos hagan un buen uso de las cesantías, especialmente para momentos de incertidumbre económica”.
En 2021, entre el primero de enero y el 14 de febrero, 10.474.020 trabajadores recibieron el pago oportuno de sus cesantías: 6.238,319 hombres y 4.235,701 mujeres, según cifras de la Superintendencia Financiera; el 44,7 por ciento de los afiliados se encontraban vinculados a Porvenir.
“Más de 136.000 empresas consignaron 3.5 billones de pesos correspondientes al auxilio”, precisó Vásquez, quien hizo un llamado para que también este 2022 los empleadores realicen el pago de la prestación social a tiempo y dentro de los términos que fija la ley, con el fin de evitar sanciones e incurrir en pagos adicionales, como la indemnización moratoria de un día de salario por cada día de mora, contemplada en el numeral 3 del artículo 99 de la ley 50 de 1990. Adicionalmente, mencionó que el pago oportuno de esta prestación social permitió a muchos colombianos que quedaron cesantes en 2021 usar este ahorro para solventar gastos. En el caso de Porvenir, detalla el directivo, 677.125 afiliados hicieron uso de sus ahorros por terminación de contrato, a quienes se les desembolsaron 1,23 billones de pesos.
“Las dificultades de estos tiempos han evidenciado mucho más la importancia de contar con estos recursos para los trabajadores, ahorro que desde el inicio de la pandemia ha actuado como una suerte de blindaje para protegerlos, por ejemplo, frente a contingencias como pérdida de empleo o caída en los ingresos, causal que todavía sigue activa”, destacó Santiago Montenegro Trujillo, presidente de Asofondos.
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Sin embargo, la labor de los empleadores no debe limitarse a hacer el pago oportuno de las cesantías. Para Vásquez es importante que las empresas, además de consignar a tiempo, trabajen en campañas de educación financiera que permitan que este ahorro sea utilizado de forma responsable por sus beneficiarios. El año pasado esa tarea dio buenos frutos. La prestación social apalancó la meta de muchos colombianos de tener vivienda propia. “El 2021 fue un año histórico para el sector vivienda. Muchos colombianos vieron materializada la meta de tener casa propia gracias a las ayudas ofrecidas por el Gobierno Nacional y a sus ahorros en cesantías. Solo en Porvenir se desembolsaron 1.27 billones de pesos, un aumento del 22,7 por ciento comparado con el año anterior cuando los retiros sumaron 1,03 billones”.
De hecho, de acuerdo a la Asociación Colombiana de Administradoras de Fondos de Pensiones y de Cesantía (Asofondos) la compra de vivienda fue la segunda causa de retiro del auxilio monetario: fueron retirados 2,14 billones por este concepto y 1,63 billones de pesos para mejora y liberación de deuda en vivienda; lo cual implica que aproximadamente el 54 por ciento de los retiros totales se destinaron a ambos usos. Estas causales, detalla el reporte del gremio, tuvieron un crecimiento significativo en este año de recuperación económica, con un aumento del 28,3 por ciento y 23,3 por ciento, respectivamente frente a 2020.
Las cifras de Asofondos reportan que la educación también fue un tema prioritario para los trabajadores: se retiraron 535 mil millones de pesos (7,6 por ciento de los retiros de 2021), lo que representa un incremento de 9,4 por ciento con respecto al año 2020.
Sin embargo, en su más reciente informe Misión de Empleo advierte que el destino de las cesantías debe ser exclusivamente para que el trabajador acumule y disponga, si así lo desea, de más recursos cuando se desvincula de una empresa por cualquier motivo. Por eso, promover el uso responsable de las cesantías debe ser un tema prioritario para todos los involucrados. Hay que concientizar a sus beneficiarios sobre el rol de esta prestación social en épocas de coyuntura económica.
¿Cómo se calculan las cesantías?
Para liquidar las cesantías, los empresarios utilizan el último salario del trabajador, teniendo en cuenta el auxilio de transporte. En caso de que el sueldo haya reportado una variación en los últimos tres meses, se promedian los salarios percibidos durante los doce meses del año que se liquidan y el resultado se multiplica por el número de días laborados en ese período. Al final, la cifra se divide sobre los 360 días del año comercial, y no por los 365 días del calendario.
Por su parte, los intereses de las cesantías son un valor adicional a esta prestación social y se fijan con base en una tarifa del 12 por ciento anual del valor total de las cesantías. Para quienes no cumplen con un periodo completo de un año de labores, se calcula un proporcional por fracción del año. “Este monto se debe pagar a los trabajadores antes del 31 de enero de cada año. Si la terminación del contrato laboral es anterior a la finalización del año, los intereses sobre las cesantías se deben cancelar junto con la liquidación de prestaciones sociales del trabajador”, explica Vásquez.
De acuerdo a lo anterior, una persona que percibió un salario mensual de 2.000.000 de pesos los 12 meses del año, recibirá por concepto de cesantías 2.000.000 de pesos. Para este mismo caso, le serán consignados 240.000 pesos por intereses; resultado de multiplicar el valor del auxilio de cesantías por los días trabajados, por uno por ciento mensual y dividiéndolo por 360 días laborables al año.