Especial Líderes Empresariales
La historia de HA Bicicletas: de negocio familiar a líder del mercado de ciclismo en Colombia
Jorge Hernán Aristizábal convirtió HA Bicicletas en un referente de sostenibilidad, innovación y compromiso social en Colombia. Hoy, después de 30 años de liderazgo, ha logrado impulsar el ciclismo nacional y el bienestar en las comunidades, demostrando que los negocios pueden ser motores de cambio positivo.
Jorge Hernán Aristizábal es un visionario que transformó HA Bicicletas en un ejemplo de innovación, sostenibilidad y compromiso social con Colombia. Con más de tres décadas dedicadas a la organización, lideró la evolución de un pequeño emprendimiento familiar a una organización con más de 500 colaboradores, masificando el uso de bicicletas de alta calidad a precios accesibles y convirtiéndola en un motor de bienestar para empleados, clientes y comunidades.
Bajo su liderazgo, HA Bicicletas se convirtió en una de las pocas compañías en Colombia en obtener la prestigiosa certificación de Empresa B; y ha desem-peñado un papel clave en el desarrollo del ciclismo nacional, impulsando a atletas que han llevado al país a escenarios internacionales, como los Juegos Olímpicos. Para Aristizábal el éxito no se mide solo en números o medallas, su verdadero orgullo radica en los programas sociales y educativos que benefician tanto a sus empleados como a las comunidades en las que opera.
Usted tuvo la oportunidad de ocupar varios roles en la compañía hasta llegar a ser gerente. ¿Cómo analiza la evolución de HA Bicicletas en el mercado colombiano?
JORGE HERNÁN ARISTIZÁBAL: Yo comencé a trabajar en HA Bicicletas en 1987 y asumí el cargo de gerente en el año 2000. En todo este tiempo he visto cómo ha evolucionado significativamente en el mercado colombiano. Desde su fundación en 1958, la empresa ha estado estrechamente ligada a la historia del ciclismo en el país. Creo que hemos desempeñado un papel fundamental en la masificación de la bicicleta como medio de transporte y herramienta deportiva, así que hemos crecido con el ciclismo en Colombia, pasando de ser un pequeño negocio con 15 empleados a una organización con más de 500 colaboradores. Además, hemos logrado posicionarnos como una opción costo-beneficio ideal, ofreciendo productos de alta calidad al mejor precio.
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Luego de tantos años de trabajo, ya está a punto de jubilarse, ¿cuál fue su sello de liderazgo?
J.H.A.: Siempre he creído en dar oportunidades. En HA Bicicletas fomentamos el desarrollo interno, ofreciendo a nuestros empleados planes de vivienda, educación y crecimiento profesional. Por ejemplo, garantizamos que el salario mínimo en nuestra compañía sea 1,6 veces el salario legal vigente, lo que contribuye a mejorar la calidad de vida de nuestros colaboradores y sus familias. Este enfoque en el bienestar y la promoción del talento interno es lo que considero mi mayor aporte como líder.
¿Cuál será el reto para quien llegue a la gerencia general?
J.H.A.: El cambio de administración será un desafío interesante. Lo más importante para la nueva gerencia será mantener el enfoque humano que caracteriza a HA Bicicletas. Esta empresa no solo busca ser rentable, sino también generar bienestar para todos los grupos de interés: empleados, clientes, proveedores, sociedad y medioambiente. En términos estratégicos, el reto será fortalecer el crecimiento y la internacionalización de la compañía, llevando nuestras marcas al mercado global, mientras conservamos los valores que nos definen.
¿Cuál fue el mayor desafío que tuvo que afrontar?
J.H.A.: Sin duda, los efectos de la pandemia del Covid-19. Durante los primeros años de la crisis, la bicicleta fue considerada un artículo de máxima necesidad, lo que nos permitió seguir operando mientras muchas industrias cerraban. Sin embargo, después del auge de 2020 y 2021, enfrentamos una saturación del mercado y problemas logísticos que afectaron a todo el sector. Nos enfrentamos a grandes dificultades por excesos de inventarios, pero ahora estamos viendo una recuperación gradual.
¿Y cuál considera es el aporte más importante de la compañía al país?
J.H.A.: Nuestro mayor aporte es contribuir al bienestar de las personas. Generamos empleo digno, apoyamos la educación y fortalecemos el ciclismo como deporte y medio de transporte sostenible. También hemos patrocinado deportistas, incluyendo medallistas olímpicos como Mariana Pajón, y trabajamos con fundaciones para impactar positivamente a las comunidades. Creemos en devolverle a la sociedad lo que nos ha dado, y eso se refleja en nuestras acciones.
¿Cómo lograron integrar la sostenibilidad en su modelo de negocio?
J.H.A.: La bicicleta en sí misma es un símbolo de sostenibilidad: es transporte limpio, salud y movilidad accesible. Pero nosotros quisimos ir más allá. Adoptamos prácticas como el desarrollo de empaques ecológicos, la reducción de plásticos y la minimización de nuestra huella de carbono. Certificarnos como empresa B fue un proceso exigente que tomó tres años, pero nos permitió reforzar nuestro compromiso con el medioambiente, la responsabilidad social y la ética empresarial. Ahora, cada tres años, debemos recertificarnos, lo que nos impulsa a seguir mejorando.
La compañía también tiene iniciativas relevantes en términos de responsabilidad social. ¿Cuál es la apuesta con estos programas?
J.H.A.: Nuestro enfoque en responsabilidad social nace del sentido de gratitud hacia la comunidad. Apoyamos fundaciones que trabajan en temas de educación, alimentación y salud, como Presencia Colombo Suiza, Saciar, Corporación PAN, Hospital Infantil Santa Ana y Correcaminos. A través de programas como ‘Escuela en Bici’ y ‘Explorando en Bici’, promovemos la movilidad escolar y enseñamos mecánica de bicicletas a niños en zonas rurales. Para nosotros no se trata solo de aportar recursos económicos, sino también tiempo y compromiso personal. Queremos que nuestros empleados vivan esta misión y sean parte activa de las iniciativas.
¿Cómo le gustaría que recuerden su paso por la compañía?
J.H.A.: Me gustaría que me recuerden como alguien que ayudó a las personas a cumplir sus sueños. Mi propósito ha sido ofrecer oportunidades para que los empleados crezcan dentro de la empresa y alcancen sus metas. Más que un gerente, quiero ser visto como un facilitador de sueños y bienestar para todos los que han sido parte de esta organización.