EMPRENDIMIENTO

Nunca es tarde para emprender

¿Cuál es la edad apropiada para ser empresario? Estudios demuestran que no existe un parámetro definido y que el éxito de un negocio no depende de la edad de su gestor. VIVIR + conoció la historia de dos colombianos que en la madurez de su vida decidieron lanzarse al reto de hacer empresa.

22 de febrero de 2019
| Foto: Comercial

Un emprendedor innato 

Pedro Pablo Trujillo, nació el 17 de julio de 1960 en el municipio de Alpujarra, en el seno de una familia típica tolimense. Aprendió a hacer pan cuando era aún muy pequeño gracias a que sus parientes se dedican a este oficio. A los 14 años ya era el mejor panadero de esta zona del país. 

Esta experiencia le permitió identificar la alta rentabilidad que deja la producción de alimentos y entendió que el negocio de la comida es próspero. Todo parecía indicar que este sería el futuro cercano de Trujillo. Sin embargo, como el destino es caprichoso, abandonó su sueño de ser empresario para encaminarse como un exitoso profesional.

Trujillo es abogado y ha desarrollado su profesión en diferentes facetas. Cuando parecía que ya tenía su futuro asegurado y podía darse un respiro para descansar decidió, a sus 50 años, retomar su propósito de ser independiente y se lanzó a crear empresa.

En la actualidad, es el fundador y gerente general de Industrias Alimentek, una compañía procesadora de alimentos que elabora, empaca y comercializa lechona, tamal y costillas de cerdo enlatadas, entre otras comidas típicas del país.

Hoy, su fábrica produce entre 8.000 y 10.000 latas de producto al día. La mayor parte de la producción se comercializa bajo la marca Raíces de mi Tierra, el resto es la maquila que realiza para otras industrias de platos típicos enlatados.

Pasión por la química

Julián Bustillo es un químico industrial cartagenero que por más de 25 años ejerció su profesión en el desarrollo de proyectos agroindustriales y sociales, tanto públicos como privados, sin abandonar su pasión por los laboratorios.

Durante este tiempo y, de manera paralela a su trabajo, creaba diferentes fórmulas químicas, todas pensadas en reducir las concentraciones contaminantes que afectan a la población de escasos recursos de Cartagena.

Hace exactamente 15 años, Bustillo decidió que ya era hora de comercializar las formulaciones en las que había trabajado durante esos años. Fue así como dejó de lado los proyectos en los que trabajaba y se dedicó de lleno a su emprendimiento.

De esta manera nació Productos Dipsol Ltda, compañía dedicada a la fabricación y venta de productos, cien por ciento biodegradables, diseñados para la limpieza y la desinfección profesional, además de prestar servicios de aseo y mantenimiento de canales residuales.

Su empresa, por medio de sus productos, apoya las labores de eliminación de olores en las estaciones de bombeo y canales de aguas residuales de Cartagena y Barranquilla. También ha trabajado en reducir los agentes contaminantes registraos en Bazurto, la principal plaza de mercado de la capital de Bolívar.

En el 2012, a sus 62 años, recibió en nombre de su compañía el Premio a la Innovación en Bolívar, PIB, en la categoría Empresa-Producto.