FORMACIÓN
Revolución en los idiomas
A través de la programación neurolingüística, ULA enseña lenguas extranjeras a sus estudiantes.
Como una revolución en la enseñanza de lenguas extranjeras califica el Centro de Idiomas ULA su metodología. Así lo señala su CTO y directora académica, Jennifer Jiménez, quien sostiene que la institución cuenta con alrededor de 5.000 estudiantes.
Y es que el método de enseñanza de ULA es novedoso, ya que no se enfoca solamente en formar en otros idiomas, sino que también desarrolla las habilidades lingüísticas de sus alumnos.
Así, a través de métodos lúdicos, vivenciales y sensoriales, basados netamente en programación neurolingüística (PNL), aprenden distintos idiomas tanto niños como jóvenes y adultos.
“La PNL nos incentiva a un aprendizaje muy retador, más vivencial, en el que hay un desarrollo emocional y una estimulación cerebral”, explica Jiménez. Para ella la creatividad y los estímulos cognitivos son claves a la hora de aprender una lengua.
Otro de los diferenciales de este centro de idiomas –en el que, además del inglés, enseñan francés, alemán, portugués y japonés– es el tipo de valoración: esta es cualitativa y no cuantitativa, lo cual motiva aún más el estudio de las personas. “En general, trabajamos con mucha creatividad para que el aprendizaje no se convierta en una clase más, sino en un hábito”.
Jennifer Jiménez, CTO y directora académica de ULA, asegura que la metodología de enseñanza es diversa.
De igual forma, la vocera asegura que la academia se enfoca en el bienestar de sus estudiantes. “Sabemos la importancia de que cuenten con áreas lúdicas. Por eso tenemos lugares como el Rincón del Idioma, un espacio relajado, fresco y lleno de naturaleza, que incentiva el aprendizaje”.
Asimismo, ofrecen áreas vivenciales, tales como una sala de cine, que hace parte de todo el programa de inmersión en los idiomas y ULA Fest; o un festival, en el que estudiantes y su círculo se sumergen en una experiencia cultural y lúdica vivencial a través de las lenguas.
A través de métodos lúdicos, vivenciales y sensoriales niños, jóvenes y adultos aprenden distintos idiomas.
Expansión
Actualmente, ULA tiene sedes en Bogotá (6), Medellín (1), Tunja (1), Bucaramanga (2) y Soacha (1). Próximamente abrirá puntos en Cali, Barranquilla, Villavicencio y Manizales. Fuera de Colombia se encuentran en Arequipa (Perú) y su plan de expansión contempla para 2021 la apertura de sedes en Guadalajara (México) y Lima (Perú).
En general, los retos de la compañía para los próximos años se pueden resumir en el afianzamiento de una cultura multibilingüe en el país, al igual que seguir consolidándose como uno de los mejores centros de idiomas en Latinoamérica.
La empresa, que es la única academia que cuenta con los permisos de la Secretaría de Educación de Bogotá para dar clases presenciales, gracias a la aprobación de sus protocolos de bioseguridad, también quiere continuar creciendo en Latinoamérica y, por qué no, llegar a Europa.
Para Jiménez, aprender un segundo idioma es una de las mejores inversiones, toda vez que el desarrollo de una segunda lengua es tan significativo como adquirir una casa nueva, por ejemplo: “Saber un segundo idioma nos abre puertas y nos ayuda a cumplir metas y a crecer tanto en lo académico como en lo personal y laboral. También nos incentiva la creatividad y la memoria”.
Política de calidad
De acuerdo con la vocera, ULA dispone de personal idóneo en el acompañamiento del proceso de formación académica, garantizando así el cumplimiento de los requisitos aplicables, la efectividad y mejora continua del sistema de gestión.
“En ULA contamos con docentes de calidad y nuestra apuesta es el talento nacional, es decir, docentes que se han formado en el país y que han tenido la oportunidad de complementar su capacitación en el exterior; estamos seguros de que más vale una metodología de calidad que un acento nativo”, afirma Jiménez.
Esto, sumado al uso de herramientas tecnológicas, pone a la academia a la vanguardia en materia de tendencias educativas mundiales.