GRUPO RÍO BOGOTÁ
No cesan los impactos al humedal Jaboque: ahora se tiñó de rojo
A las obras para la construcción de senderos con cemento en el sector conocido como el bosque de Las Lechuzas, ahora se suma un vertimiento rojo inyectado por el canal Carmelo. Según la Empresa de Acueducto, todo indica que un camión descargó el líquido.
Tres humedales bogotanos están en el ojo del huracán por las obras en cemento que iniciaron durante la pasada administración: Jaboque, Juan Amarillo y Córdoba, ecosistemas que figuran entre los más biodiversos de la ciudad.
En Juan Amarillo, el humedal más grande de Bogotá con 222,7 hectáreas distribuidas en Suba y Engativá, avanza la construcción de un puente elevado para comunicar los barrios de estas dos localidades, mientras que en Córdoba, ubicado en Suba, está sobre la mesa un proyecto de varios senderos en los sectores uno y tres.
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Las obras en Jaboque, humedal con 148 hectáreas en Engativá, constan de un sendero elevado para peatones y bicicletas de 5,5 kilómetros en la zona de manejo, trocha con concreto que conectará el barrio Unir II con el río Bogotá.
Así luce parte del bosque de Las Lechuzas en el humedal Jaboque. Foto: Cealdes.
A pesar de que este año un juez le dio un revés a este tipo de obras, al declarar nulo el Decreto 565 de 2017 de la pasada Alcaldía, que modificó la política de humedales y permitió la construcción de infraestructura, ciclorutas, senderos, alamedas, plazoletas y adoquinados, la comunidad ambientalista ha denunciado que las intervenciones siguen su curso.
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“A pesar de la nulidad del Decreto 565, continúa la obra del supuesto corredor ecológico que está destruyendo el bosque de Las Lechuzas con estructuras para un sendero palafítico de madera plástica”, denunció hace algunas semanas el Centro de Alternativas al Desarrollo (Cealdes).
María Fernanda Rojas, concejal de Bogotá, informó recientemente que la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) no podrá hacer seis observatorios y ocho tramos de sendero palafítico en Jaboque, ya que la Secretaría Distrital de Ambiente (SDA) ratificó el desistimiento tácito de la prórroga y modificación del permiso de ocupación. “Estas obras eran una barbaridad y ya no podrán ser adelantadas”.
El sendero en Jaboque sigue su curso a pesar de las decisiones jurídicas recientes respecto a las obras en los humedales. Foto: Cealdes.
Carolina Urrutia, secretaria de Ambiente de Bogotá, dijo a su vez que las obras que recibió en los humedales Juan Amarillo y Jaboque son proyectos que nunca hubiera autorizado y que no van a realizar por parte de la actual Administración Distrital.
“Las intervenciones llevan un avance significativo en su desarrollo, en algunos casos de más del 70 por ciento. Estamos adelantando una investigación exhaustiva para dos procesos sancionatorios por un presunto incumplimiento en los permisos en los humedales Juan Amarillo y Jaboque. También realizamos un análisis jurídico que nos asegure que cualquier decisión que tomemos sobre las obras avanzadas, no vaya a sufrir de inestabilidad jurídica”.
Aguas rojas
Al avance de las obras en Jaboque ahora se suma una inyección de aguas rojas. La denuncia fue hecha por la concejal Rojas, quien a través de fotografías le solicitó a la Empresa de Acueducto y a la Secretaría de Ambiente realizar el control necesario para determinar la procedencia del vertimiento.
Al llamado se sumó Daniel Bernal, miembro de la Fundación Humedales Bogotá y experto en calidad del aire. “Este canal que alimenta al humedal Jaboque está teñido de rojo. Esto me recordó el desastre de marzo 2016 cuando el humedal de pintó de azul por la empresa de impresión Printer ¿Qué se sabe de esta grave situación?”, informó en sus redes sociales.
El canal Carmelo le inyectó un vertimiento de color rojo al humedal Jaboque. Foto: revelada por la concejal María Fernanda Rojas.
La Secretaría de Ambiente realizó una visita al canal Carmelo, que seguía pintado de rojo. “A pesar de percibir la coloración, no fue posible identificar el punto exacto del vertimiento y se halló una red pluvial con potenciales conexiones erradas. Ya le informamos al Acueducto para que realice la verificación de las redes y encuentre las posibles causas”.
"Ya abrimos una investigación preliminar que permita esclarecer los hechos. Pudimos determinar la contaminación con una sustancia roja en las aguas del canal, sin embargo no fue posible identificar la fuente del vertimiento y por eso consideramos que se puede tratar de una conexión errada”, dijo Camilo Rincón, director de control ambiental de la Secretaría de Ambiente.
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Luego de recorrer la zona, técnicos de la EAAB evidenciaron que al parecer un camión fue el encargado de teñir las aguas del canal de rojo. “La comunidad nos informó que un vehículo descargó el líquido en el canal. El área encargada está revisando el comportamiento del canal y trabajando en la recopilación de fotografías que permitan identificar a los responsables”.
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Todo indica que un camión fue el culpable del vertimiento de color rojo en Jaboque. Fotos: denuncias ciudadanas.
La concejal Rojas manifestó que estará atenta al seguimiento para dar con los responsables. “Es importante realizar un seguimiento directo para que estas actuaciones no vuelvan a pasar y afectar el sistema hídrico de la ciudad”.
Caicas, un grupo comunitario que busca dar a conocer y proteger la bioarqueología y etnohistoria del humedal Jaboque, le solicitó a la EAAB realizar análisis físico químicos y rastreos para hallar los culpables de este atentado ambiental, actividades que la empresa dijo que realizará en los próximos días.
No es la primera vez que Jaboque se tiñe de colores por las conexiones erradas al sistema de alcantarillado. Fotos: denuncias ciudadanas.
La biodiversidad en peligro
Jaboque es una palabra chibcha que significa tierra de abundancia. En la época prehispánica, fue uno de los sitios sagrados de los muiscas, huellas que han sobrevivido al paso del tiempo a través de los monolitos que se han encontrado en sus dominios.
“Es uno de los humedales de mayor interés arqueológico. Cuenta con un observatorio astronómico, monolitos que dispusieron nuestros antepasados muiscas cerca del río Bogotá que determinaban las fechas para la siembra y la cosecha” dijo la Fundación Humedales Bogotá.
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Este humedal hace parte de la cuenca del río Salitre, un sistema hídrico conformado por los canales Los Ángeles, El Carmelo y Marantá. Es el segundo cuerpo de agua más grande la capital del país.
Jaboque es el segundo humedal más grande de Bogotá. Las obras merman su biodiversidad. Foto: Jhon Barros.
En sus 148 hectáreas habitan animales como la rana sabanera, culebra sabanera, curíes, ardillas y comadrejas. Según el último censo realizado por la Fundación Humedales, es el tercer ecosistema con más registros de aves, 130 especies, cifra que solo es superada por Córdoba y La Conejera.
“En la zona terrestre del humedal hay árboles nativos como sauce llorón, aliso y arboloco. En cuanto a las especies vegetales acuáticas encontramos botoncillo, junco y barbasco”, dijo la organización.
Con 130 especies de aves, Jaboque es el tercer humedal con mayor cantidad de avifauna. Foto: EAAB.
En un recorrido realizado antes de la cuarentena por el coronavirus, la Fundación Humedales Bogotá evidenció el impacto de las obras en concreto, residuos sólidos en los canales Los Ángeles y El Carmelo y una gran afectación en el tercio bajo de Jaboque.
“Aunque hay varios focos del cuerpo de agua ya abiertos, una buena extensión que limita con el río Bogotá y el sector de La Florida presenta alta acumulación de residuos orgánicos como buchón de agua”, dijo Jorge Emmanuel Escobar, director de la fundación.
* Este es un contenido periodístico de la Alianza Grupo Río Bogotá: un proyecto social y ambiental de la Fundación Coca-Cola, el Banco de Bogotá del Grupo Aval, el consorcio PTAR Salitre y la Fundación SEMANA para posicionar en la agenda nacional la importancia y potencial de la cuenca del río Bogotá y sensibilizar a los ciudadanos en torno a la recuperación y cuidado del río más importante de la sabana.