Roban a siete personas en sendero de la quebrada La Vieja de Bogotá

^{* Este es un contenido periodístico de la Alianza Grupo Río Bogotá: un proyecto social y ambiental de la Fundación Coca-Cola, el Banco de Bogotá del Grupo Aval, el consorcio PTAR Salitre y la Fundación SEMANA para posicionar en la agenda nacional la importancia y potencial de la cuenca del río Bogotá y  sensibilizar a los ciudadanos en torno a la recuperación y cuidado del río más importante de la sabana.}

Desde el jueves de la semana pasada, dos senderos de los cerros orientales volvieron a recibir visitantes luego de los cinco meses de cuarentena obligatoria: Santa Ana, ubicado en la localidad de Usaquén, y la quebrada La Vieja en Chapinero.

Para el regreso a estos espacios naturales, los bogotanos primero deben registrarse en un aplicativo de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) para reservar el día y hora del recorrido, actividades que por ahora sólo se realizarán los días jueves, viernes y fines de semana, entre las 6 y 10 de la mañana.

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Así lo hizo Vanessa Bustamante, una bogotana de 25 años graduada como trabajadora social, para poder recorrer La Vieja - Alto de la Cruz el domingo pasado junto a tres amigas. “Con un grupo de amigas de la universidad nos gusta hacer senderismo y visitar los ecosistemas de la ciudad. Era una oportunidad para salir de nuevo después del confinamiento”.

_{La repartura del sendero La Vieja en Chapinero ya arrojó los primeros robos. Foto: CAR.}

El recorrido de las cuatro amigas empezó a las 9:30 de la mañana. “Por el camino nos encontrábamos con otras personas que subían o bajaban, algunos funcionarios de la Empresa de Acueducto y al menos dos policías. Todo parecía normal y estábamos felices por estar en la naturaleza”.

Luego de una hora y media de caminata y próximas a la meta deseada, el Alto de la Cruz, las ciudadanas tomaron aire para subir la parte rocosa. “La Vieja es un sendero que hemos frecuentado mucho, por lo cual no nos parece inseguro. Incluso entre semana todo era normal. El domingo solo vimos dos policías en la primera estación, llamada Claro de Luna”.

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Las senderistas avanzaron unos 10 minutos por un camino rocoso y estrecho hasta que fueron sorprendidas por tres hombres. “Uno de ellos tenía retenido en el piso a un ciudadano chino. A mis amigas que iban adelante las increpó un hombre con cuchillo, y a mí, que iba de últimas, un hombre me puso un revólver en la cabeza y me ordenó arrodillarme. Yo nunca había visto una pistola. Nos tomaron a los cuatro como rehenes prácticamente”.

Vanessa no le vio el rostro a su verdugo, sólo le analizó la ropa. “Nos preguntaron si alguien más venía con nosotros. Yo decidí decir que atrás había visto a un grupo de norteamericanos y más gente para que nos dejaran ir. Pero eso no pasó. Empezaron a hacer tiempo para ver si alguien llegaba”.

_{La quebrada La Vieja es una de las principales joyas ambientales de la localidad de Chapinero. Foto: CAR.}

Los ladrones despojaron a las ciudadanas de todas sus pertenencias, como maletas, chaquetas, aretes, cadenas y celulares. “Luego de 10 minutos, los hombres se fueron hacia lo más alto del cerro. Los cuatro rehenes empezamos a correr de inmediato hacia abajo”, dice Vanessa.

La bogotana corrió a pasos galopantes, porque sentía que la perseguían y le iban a disparar. “Pensé que no iba a lograr llegar. Nos robaron los bastones de senderismo y había llovido la noche anterior, por lo cual la bajada era sólo barro. Nos resbalamos continuamente”.

Las víctimas llegaron a donde los policías de la primera estación de La Vieja. “Le contamos todo lo que sucedió y empezó el perifoneo con los guías de la Empresa de Acueducto y otros policías. Yo aún no caía en cuenta de la gravedad del asunto y seguía en shock. El policía se comunicó con otros para intentar atrapar a los tres ladrones. Los senderistas nos auxiliaron y dieron agua”.

Pasada una hora, tres personas bajaron de la montaña e informaron que arriba tenían a dos sospechosos por haber robado a una pareja. “Nos dijeron que los atraparon cuando los intentaron robar. Es decir que los ladrones robaron a siete personas: Xuanne, el ciudadano chino, a nosotras cuatro y Rey y Angie, la última pareja”.

_{La reapertura de los senderos en los cerros orientales ya arrojó los primeros robos. Foto: EAAB.}

Según Vanessa, Rey fue el que los persiguió, alertó a la Policía con gritos y le tiró piedras a los ladrones. “Así empezó la persecución de los tipos, quienes iban con nuestras pertenencias y las de ellos. Los ladrones se vieron acorralados y se tiraron por el barranco, entonces los policías empezaron a disparar”.

Reconocimiento

Dos de los ladrones fueron capturados, con edades entre los 30 y 32 años. “Nos dijeron que debíamos reconocerlos para hacer el proceso de denuncia. Nos reunieron a todas las víctimas en la entrada del sendero en la calle 71 por la Avenida Circunvalar. Los dos hombres estaban en un camión de la Policía”.

Vanessa vio a sus verdugos a los ojos. “Sentí un profundo sentimiento de desilusión, miedo, desesperanza y vulnerabilidad al no comprender por qué pasa esto en el país. Después de darme la pela defendiendo en dos oportunidades a las personas que han estado privadas de la libertad, no pude más que llorar. Lo material se recupera, pero sentir que por lo que trabajas y en lo que crees pierde sentido cuando ves que tu vida está en riesgo”.

La trabajadora social informó que no le vio el rostro a ninguno de los ladrones durante el robo. “Mis otras amigas, el ciudadano chino y la pareja si tuvieron contacto visual. Uno de ellos no tenía tapabocas, que fue el que no lograron capturar. Yo reconocí al que me puso el revólver por la ropa”.

_{La ciudadana pide una mejor distribución de las autoridades por el sendero de La Vieja. Foto: EAAB.}

La Policía le dijo a las víctimas que se subieran en el camión donde tenían a los ladrones para ir a poner la denuncia. “Esto era más que el colmo, por lo cual nos opusimos. Nos llevaron aparte a Carabineros, donde están los presos políticos casi que de vacaciones, e inmediatamente nos alertaron sobre el tiempo que llevaría el proceso de denuncia, aproximadamente siete horas”.

El proceso empezó a las 11 de la mañana. “Tres horas después seguíamos en Carabineros esperando, con los ladrones y la Policía. Todo el tiempo se nos insistía en no violentar físicamente a los ladrones o podríamos truncar la captura”.

Proceso judicial

Todos fueron llevados a la UPJ de Puente Aranda para dar inicio oficial al proceso de denuncia. “De nuevo nos dicen que debemos esperar más, pero que ya la fiscal tenía conocimiento de caso. Revisaron los antecedentes de los dos hombres: hurto, homicidio por hurto, violencia intrafamiliar, estupefacientes y abuso sexual por tocamiento. Uno de ellos aún tenía casa por cárcel”.

Las siete víctimas miraban con rabia a los dos ladrones. “Nuestras cosas no aparecieron y los capturaron sin armas. En total nos robaron siete celulares, tres relojes smartwatch, un applewatch, cuatro maletas, cuatro bastones de senderismo, cuatro chaquetas, un buzo deportivo, joyas y dinero en efectivo”.

Vanessa recuerda que todos salieron de la UPJ a las 11 de la noche, luego de la toma de los testimonios. “Debo decir que hubo un grupo de policías muy atentos que nos acompañaron en el proceso y nos apoyaron, aún cuando nos decían que estos trámites representan muchos problemas también para ellos”.

_{La trabajadora social hace un llamado para mejorar la seguridad en los senderos. Foto: EAAB.}

Los ladrones quedaron en la UPJ de Puente Aranda. “Al otro día, es decir ayer lunes, les hicieron la audiencia. El policía de la Sijín que tomó nuestras declaraciones nos aseguró que les dictarían medida por todos los antecedentes, es decir que irían a la cárcel”.

El Secretario de Seguridad de Bogotá le informó a Vanessa que los dos ladrones ya se encuentran en la cárcel La Modelo, “una voz de aliento para seguir con el proceso. Eso me da algo de esperanza y espero que coordinen esfuerzos para tener justicia. No me han dicho aún a cuánto los condenaron”.

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Para Vanessa, la captura y judicialización exitosa de los ladrones tiene su raíz en la presencia del ciudadano extranjero. “Por eso hubo mayor movilización y agilidad por parte de la Policía. Sin embargo, no nos devolvieron ninguna de nuestras pertenencias. El abogado de la familia de uno de los ladrones nos mostró que tenían nuestras cosas”.

_{Vanessa le hace un llamado a las autoridades para que trabajen con la comunidad en mejorar la seguridad. Foto: CAR.}

La ciudadana hace un llamado colectivo para que las autoridades hagan una mejor distribución de los uniformados durante los recorridos por los senderos. “Los policías sólo están al inicio y al final, y La Vieja es un tramo muy largo en el que pueden pasar muchas cosas. Los que roban en este lugar son personas que viven en los barrios aledaños y conocen los caminos de los senderos mejor que los policías. La reapertura debe apoyarse en la comunidad”.

Los tres ladrones no estaban registrados en la aplicación de la Empresa de Acueducto. “Lo que nos dijo la Policía es que pudieron entrar por la conexión con la quebrada Las Delicias. Unos senderistas vieron fogatas por el sendero, lo que no es usual. Algo está pasado allá y es necesario hacer una investigación”.

El mensaje de Vanessa no es cerrar de nuevo el sendero de La Vieja. “Lo que hay que hacer es tener una mejor redistribución de las autoridades. También hace falta una campaña informativa para la comunidad. Por ejemplo, nosotros no sabíamos que en Carabineros se puede solicitar un acompañamiento”.