Aniversario
La cultura "roja" se adapta a las nuevas audiencias para el 70 aniversario de China
El Partido Comunista China ha usado los medios de comunicación y el ocio como herramientas de propaganda para infundir el patriotismo enraizado en el corazón mismo de su ideología. Este aniversario no será la excepción.
De las pantallas de cine a los escenarios teatrales, la industria del entretenimiento chino se tiñó de rojo patriótico con motivo del 70º aniversario de la fundación de la República Popular de China, que se conmemora el martes, aunque adaptándose a los gustos de las generaciones más jóvenes.
Ataviado con un uniforme del ejército chino con manchas de sangre y una capa con una estrella roja en el centro, Wang Huaifu y sus camaradas gesticulan con pistolas frente a una fila de soldados que enarbolan triunfantes banderas de color escarlata.
Wang es el principal actor en el patriótico espectáculo de acrobacias "La batalla de Shanghái", una recreación de los combates de 1949 entre los comunistas y los nacionalistas por el control de Shanghái.
"La China y el Shanghái actuales no se convirtieron en lo que son fácilmente. Se luchó por ello", dice Wang, de 35 años.
El sector cinematográfico de China, que ejerce un enorme poder, podría convertirse en el mayor mercado mundial del séptimo arte en 2020, gracias al fuerte crecimiento de su taquilla y al aumento del precio de las entradas, según la consultora PwC.
Desde su llegada al poder en 1949, el Partido Comunista China ha usado los medios de comunicación y el ocio como herramientas de propaganda para infundir el patriotismo enraizado en el corazón mismo de su ideología.
Pero según expertos, el ocio patriótico tuvo que adaptarse para resultar atractivo para los jóvenes adultos cosmopolitas y urbanizados de China, grandes seguidores de los éxitos de taquilla de Hollywood.
"No intentamos proceder con un tipo de educación rígida y servida en bandeja", asegura Dong Zhengzhen, guionista de "La batalla de Shanghái". "Deberíamos dejar que los jóvenes sientan y absorban conscientemente a través del propio encanto del arte".
El drama histórico "My People, My Country" –basado en siete hitos históricos desde 1949– utiliza "una narrativa y técnicas de producción más propias de Hollywood", señala Nicole Talmacs, académica de cine chino en la universidad Xi‘an Jiaotong-Liverpool.
La película "reduce el rígido enfoque a la ‘narración de la historia‘ al que recurrieron anteriores filmes conmemorativos", señala Talmacs.
El drama histórico se exhibirá en casi 40 países, Estados Unidos incluido, un día después de su estreno en China, algo posible en parte gracias a la adquisición de numerosos cines de todo el mundo por magnates chinos.
Entretenimiento "inapropiado"
En un momento en que la industria del entretenimiento chino intenta atraer mayores audiencias, los censores sustituyeron recientemente algunos espectáculos por otros que defienden la causa comunista.
En julio, la Administración Nacional de Radio y Televisión publicó una lista de 86 programas televisivos que "elogian la madre patria, la gente y los héroes", para que los canales los programen durante este año, políticamente clave.
Y en el periodo previo al aniversario, también prohibió las series y dramas de época con "fuertes elementos de entretenimiento".
Los dramas de época –como el popular "Historia del palacio Yanxi", con 18.000 millones de visionados– eran muy comunes en China, pero son mal vistos por las autoridades, por celebrar un estilo de vida fastuoso durante el mandato imperial.
Y en junio se canceló el estreno de la cinta bélica "The Eight Hundred", después de que una asociación de miembros retirados del partido la consideraran "inapropiada" por glorificar, en su opinión, al Kuomitang, el Partido Nacionalista Chino.
En su lugar se están lanzando toda una serie de ofertas artísticas para "adoptar firmemente la dirección política, opinión pública y orientación de valores correctas", dijo a mediados de septiembre el organismo dedicado a los medios.
La Asociación de Productores de Películas china pidió a la industria cinematográfica que use filmes que "promuevan enérgicamente el patriotismo como núcleo del espíritu nacional".
Películas como "Liberation", "My People, My Country" y "Chairman Mao 1949" están invadiendo las salas de cine chinas.
El día del Ejército, en agosto, se estrenó "The Bugle from Gutian", que narra los acontecimientos que llevaron al establecimiento del principio del liderazgo absoluto del Partido Comunista sobre las fuerzas armadas.
"Me conmovió mucho", dijo Liu Hexin, uno de los asistentes al pase en Pekín. "Hubo muchos antecesores que derramaron su sangre por la bella vida que tenemos hoy".
"Creo que la cultura es la herramienta más poderosa [para transmitir mensajes], porque la literatura y las obras artísticas pueden cultivar las raíces y las almas", opina Li Chunyan, director ejecutivo de "La batalla de Shanghái".