DEPORTES
La polémica salida de Hernán Torres del DIM
No es usual que un director técnico salga en plena competencia y mucho menos cuando mostró buenos resultados. Los rumores de peleas internas rondan en la capital antioqueña.
Cerca de la media noche del domingo se dio el despido de Hernán Torres. Algo que es muy poco usual en el fútbol profesional colombiano. Lo que comenzó como una catarata de rumores vía Twitter en pocos minutos se convirtió en noticia.
A pesar de los buenos resultados obtenidos el técnico tolimense fue literalmente echado de su cargo. De acuerdo con las versiones de prensa que han surgido, la orden la habría dado el propio dueño del equipo Raúl Giraldo, quien habría tenido varias diferencias con el adestrador.
Lo curioso del caso es que los números de Hernán Torres en el Deportivo Independiente Medellín son más que sobresalientes. Dirigió 56 partidos, de los cuales ganó 25 y perdió 17. Actualmente su equipo ocupa el cuarto lugar en la tabla de posiciones y está prácticamente clasificado a las rondas finales del campeonato.
Estas estadísticas permiten deducir que la repentina salida de Torres no tiene nada que ver con temas deportivos. Varios allegados al equipo han deslizado rumores sobre un fuerte encontronazo entre el accionista mayoritario y el entrenador. Ni siquiera el presidente del equipo, el carismático Eduardo Silva, pudo mediar en este conflicto.
Trascendió en varios medios antioqueños que los altos directivos del equipo no vieron con buenos ojos la sanción de cinco fechas que había recibido el entrenador por haberse excedido verbalmente con un juez. Además, el fuerte temperamento del entrenador tampoco era del agrado de la dirigencia y buena parte de la prensa de la ciudad.
Se supo también que los jugadores intentaron interceder para que el técnico no fuera removido de su cargo, pero no fueron escuchados. El propio presidente del equipo les aseguró que era una decisión ya tomada.
Javier Álvarez, que trabajaba como gerente deportivo de la institución, tomará las riendas del equipo. Álvarez estuvo al tanto de todas las contrataciones que hizo el DIM para esta temporada y además es un hombre muy cercano a la dirigencia del equipo.
Más allá de los rumores que siempre suelen tejerse después de una salida polémica, la apuesta del equipo paisa es más que arriesgada. Torres había logrado conformar un equipo compacto con una idea de juego conocida y efectiva. A pesar de que en los últimos partidos había tenido una merma en su rendimiento el equipo se perfilaba como uno de los más firmes candidatos al título.
De hecho, el semestre pasado estuvo a punto de lograr el título. Tuvo un rendimiento sobresaliente, con fútbol alegre y contundente. Quedó a las puertas del título que terminó siendo para Santa Fe, pero demostró tener un equipo competitivo que está para mucho más.
Cuando parecía que el DIM había logrado comunión entre el equipo, la hinchada y los directivos ocurre esta intempestiva salida a tan sólo dos fechas de terminar la fase regular. Ahora, el reto para los jugadores y el nuevo cuerpo técnico será finalizar la labor que había iniciado un técnico tan trabajador como cascarrabias.