La química del semen

En una investigación de Gordon Gallup, un sicólogo de la Universidad de Nueva York, en Albany, las mujeres detractoras del condón encontrarán una nueva excusa para odiar este producto. Gallup encontró que las mujeres que no usan el preservativo durante la relación sexual tienen menos depresión y son menos propensas al suicidio que las personas que utilizan condón o no tienen una vida sexual activa. Esta conclusión lo llevó a especular que el semen podría tener químicos poderosos -y potencialmente adictivos- que logran alterar el humor de las mujeres.

El estudio, que ha sido catalogado por los expertos como el primer intento serio por entender el efecto de la química del semen en la mujer, también encontró que quienes tienen relaciones sexuales sin condón se veían afectadas por la depresión en la medida en que se espaciara cada encuentro sexual. Mientras más tiempo pasara sin tener este tipo de relaciones más afectado se veía su estado de ánimo.

El estudio fue hecho entre 293 estudiantes y en él se controlaron ciertas variables, como el método anticonceptivo usado al momento del estudio, la frecuencia con que cada una de ellas tenía relaciones y otros detalles de los tratos afectivos que sostenían.

La investigación arrojó otros hallazgos interesantes. Por ejemplo, Gallup encontró que las mujeres que no usaban condón eran más propensas a iniciar una relación sexual y a buscar una nueva pareja tan pronto terminaban una relación afectiva. El investigador explica que debe existir una conexión química de dependencia. "En cierta forma estas mujeres son más vulnerables al efecto rechazo". Efectivamente, el semen contiene hormonas entre las cuales se encuentran la testosterona, los estrógenos, la prolactina y las prostaglandinas, las cuales son absorbidas a través de las paredes de la vagina y son conocidas por su capacidad para elevar el estado de ánimo.

"Las mujeres que hacen el amor regularmente sin condón, explica el experto, deben compartir ciertos rasgos de personalidad que las hacen menos susceptibles a la depresión". El comportamiento más asociado a las que no usan condón es que son más arriesgadas a la hora del sexo. Sin embargo, los estudios no han encontrado una correlación entre este tipo de comportamiento y niveles bajos de depresión.

El interés de Gallup es replicar estas conclusiones en un grupo más grande de mujeres para examinar si la falta de semen las coloca en un riesgo mayor de depresión durante la fase premenstrual o la menopausia y el posparto, momentos en que muchas de ellas se abstienen de tener relaciones.

A pesar de los resultados de la investigación los expertos recomendaron el uso del condón para prevenir enfermedades de transmisión sexual o practicarse un examen de VIH y enfermedades venéreas antes de decidir tener relaciones sexuales sin el preservativo.