Max Henríquez

Su historia se remonta a 1974 cuando el gobierno nacional y la Organización Meteorológica Mundial reclutaban bachilleres ofreciéndoles una beca para que estudiaran Ciencias Naturales y se especializaran en Meteorología, una rama poco explorada en el país. Max se presentó y cuando tenía 20 años abandonó Barranquilla para irse a estudiar a Budapest (Hungría). Allí vivió durante seis años y a su regreso entró a formar parte del Instituto Colombiano de Hidrología, Meteorología y Adecuación de Tierras (Himat). En 1984 el Noticiero Nacional lo contrató para que presentara la sección del clima, que fue bien recibida por el público. En 1991 salió del noticiero y creó Señal 3, empresa que hacía pronósticos para todo el mundo y brindaba informes para canales de televisión regionales, Señal Colombia y Caracol Radio. En 2000 cerró su compañía y se vinculó a un proyecto del que hoy se arrepiente “impulsé el Movimiento Verde Colombiano, con el que pretendíamos aglutinar a las ONG ambientales para llegar al Senado, pero resultó un fracaso”. Desde 2002 hasta 2007 se desempeñó como subdirector de Meteorología del Ideam, pero confiesa que se aburrió de trabajar para el Estado en “misiones imposibles”. Una vez salió del Ideam trabajó en RCN Televisión como director y presentador de La Meteo, pero dos años después se retiró y salió del país. “A mi esposa la contrató la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) y desde hace casi cuatro años vivimos entre Francia y Suiza”, explica. Ahora Max vive allí con su esposa Maritza Delgado y sus hijos, da los pronósticos todos los días para la Revista Agrollanos, trabaja con Fedearroz a los que les da pronósticos bimensuales y escribe tres libros para la Universidad Santo Tomás: uno sobre climatología ambiental colombiana, otro sobre cambio climático y un tercero sobre desastres naturales.