Entrevista
Del madrugón al Bogotá Fashion Week. Así llegó San Victorino a las pasarelas
De la moda popular del centro de Bogotá a una de las pasarelas de moda más importantes de la capital del país, un grupo de microempresarios del sector brillarán esta noche. Estos son los detalles del evento.
En un movimiento estratégico para conectar diferentes sectores de la moda y dinamizar la economía local, San Victorino participa por primera vez en la séptima edición del Bogotá Fashion Week (BFW). Este icónico sector comercial de la capital se une al evento bajo un nuevo componente denominado Puente, diseñado para vincular proyectos, regiones y comunidades al ecosistema de la moda nacional.
“Este año, Puente acercó a los empresarios de San Victorino a un escenario como BFW, para que tengan la oportunidad de visibilizar sus apuestas mientras seguimos impulsando el crecimiento de los participantes y sus unidades productivas”, aseguró Ovidio Claros Polanco, presidente ejecutivo de la Cámara de Comercio de Bogotá.
La capital, que concentra el 42 % del mercado de moda de Colombia, se reafirma como el epicentro de la industria de la moda en el país. La inclusión de San Victorino en este evento es una muestra del compromiso del BFW con la diversificación y el apoyo a todos los sectores de la moda, desde los grandes diseñadores hasta los emprendedores y comerciantes locales.
María Paz Gaviria, gerente de Programas Culturales de la Cámara de Comercio de Bogotá, se refirió a esta primera edición de Puente, que se llevará a cabo en la tarde del jueves 24 de mayo en el Auditorio Principal del BFW, con la pasarela El Madrugón.
Lo más leído
Hablemos un poco sobre El Madrugón…
María Paz Gaviria (M. G.): Será un homenaje a esta tradición del sector comercial de San Victorino, donde los comerciantes se reúnen al amanecer para comprar y vender prendas, sobre todo los miércoles y los sábados. Así mismo, este es un reconocimiento a esa nueva generación de comerciantes y fabricantes que están transformando la industria a través de nuevas ideas, modelos de negocio, formas de expresión e incluso la sostenibilidad que incorporan a sus procesos de producción.
¿Cómo se hizo la selección de los microempresarios que participan?
M. G.: Son alrededor de 42 millones de prendas las que se venden en este sector, así que por parte de la Cámara de Comercio hacemos una gran convocatoria en la que los empresarios participan. A partir de esto, se hace una selección de marquistas preparados para trabajar en la colección. Esto se hizo bajo el liderazgo de Pilar Castaño y Ana María Londoño, quienes hacen parte de un proceso de acompañamiento y mentoría que genera procesos de transformación en torno al diseño. Además, realizamos otros eventos para el sector como ‘San Victorino a la Moda’.
¿Qué significa la presencia de San Victorino por primera vez en el Bogotá Fashion Week?
M. G.: Esta es una plataforma de promoción y posicionamiento de Bogotá como la capital de negocios de moda en el mercado nacional e internacional. Son 6.248 empresas activas en el sector de la moda de San Victorino, donde casi un 95 % son microempresarios que se están abriendo camino. Más que una semana de la moda, es un espacio para la transformación, en el que a través del diseño independiente buscamos resaltar la importancia de generar espacios de promoción para esta industria. De este modo, su participación genera un vínculo que aprovecha el posicionamiento del BFW a nivel de mercado, visibilidad y pone valor en el corazón de la moda de Bogotá.
El Denim estará presente…
M. G.: Es muy importante mencionar que tenemos tanto la pasarela El Madrugón como espacios de negocio y conocimiento. El evento inicia con un conversatorio sobre el mito y la magia del índigo, un espacio de formación asociado a la historia del denim. Este material del jean, que tradicionalmente fue una prenda de trabajo, ha trascendido el género, se ha transformado y hace alusión a esa manera transversal en que el denim puede atravesar nuestras vidas. Cuando hablamos del sector de San Victorino, el volumen de la producción allá es de denim y precisamente esta colección logra generar procesos de transformación, lujo y volúmenes, que vamos a ver posteriormente en la pasarela.
¿Qué esperan que suceda después de este evento?
M. G.: Además de resaltar y posicionar, buscamos que a través de esta plataforma se siembren semillas de transformación. Esperamos que existan espacios para la internacionalización, para generar ventas y visibilidad de lo que es hoy el diseño colombiano. Hacemos una invitación para que como colombianos consumamos moda local e incluso tenemos una serie de compradores internacionales que han sido seleccionados para adquirir moda colombiana. Con esta colección, y de la mano de ProColombia, buscamos abrir caminos para la moda a nivel internacional y que la producción de nuestro país también sea consumida a nivel local.