Turismo
Diez lugares de Colombia para dejarse sorprender por la naturaleza
Alejados del ruido y las aglomeraciones, escondidos en medio de reservas naturales, parques y termales se encuentran estos rincones paradisíacos del territorio nacional. Una oportunidad para conocer y apreciar la biodiversidad del país.
Aunque la tercera ola de la pandemia generó nuevos confinamientos, el sector turístico, especialmente en las regiones, continúa trabajando por la reactivación segura y la geografía colombiana tiene una gran oferta de lugares aún por descubrir. Adicionalmente, el confinamiento ha generado una carga de estrés que muchos colombianos han podido liberar viajando por exóticos parajes del territorio nacional.
Durante Semana Santa, por ejemplo, la ocupación hotelera llegó al 37,34%. San Andrés, Cartagena, Boyacá, Tolima, el Alto Magdalena, Quindío, Risaralda, Meta y Santander fueron los lugares que registraron un mayor número de visitantes. El trabajo en casa y el teletrabajo también han contribuido a despertar el interés por descubrir nuevos parajes de Colombia desde donde atender las obligaciones laborales.
A continuación presentamos una lista de 10 destinos poco explorados del país que vale la pena conocer.
Salinas de Galerazamba
Conocido también como el mar rosado, este maravilloso lugar, ubicado en Santa Catalina, Bolívar, ofrece una postal excepcional de un fenómeno natural que se presenta por la alta concentración salina que le da un color rojizo al agua. Desde Cartagena el viaje dura una hora y desde Barranquilla una hora y 15 minutos. Por el ingreso se cobran 5 mil pesos como contribución para la preservación de la zona. A 15 minutos se encuentra el Volcán del Totumo, famoso por los baños de lodo de los que sus visitantes pueden disfrutar.
El fin del mundo
Así fue bautizada una caída de agua de 75 metros en Mocoa, Putumayo, rodeada de bosques nativos, montañas y cañones. En medio de los chorros de agua se puede disfrutar de la fauna y la flora propias del Amazonas colombiano, a una altura de 580 metros sobre el nivel del mar. La entrada a este escenario natural se realiza por Mocoa, en donde se toma un bus hasta la vereda San José del Pepino y posteriormente un teleférico que recorre cerca de 500 metros de selva para llegar al sendero que luego de 30 minutos de recorrido conduce a las famosas cascadas.
Toche
Entre termales naturales, cerca a un cementerio indígena y al volcán Cerro Machín, se encuentra un corregimiento con invaluables tesoros ambientales, entre los que se destaca un bosque con unas 600 mil palmas de cera, el más grande de Colombia y una de las joyas de la ciudad de Ibagué, en el departamento del Tolima. El viaje ofrece la oportunidad de conocer de cerca el proceso de crecimiento de la palma, un símbolo nacional que tarda aproximadamente 60 años en alcanzar su altura máxima.
Río Manacacías
El encuentro de los ríos Manacacías, Yucao y Meta, en el municipio de Puerto Gaitán, forma un espectáculo natural de colores y densidades, que también son el hábitat de los delfines rosados, conocidos como toninas en los llanos orientales. En este lugar se puede disfrutar de playas como La Española, Maracas y El Miedo, escenarios perfectos para apreciar la fauna de la región.
Cueva de los Guácharos
El principal atractivo de este Parque Nacional Natural, ubicado en Palestina, Huila, son los guácharos. Una especie de ave que habita en oscuras y profundas cuevas durante el día y en la noche sale a buscar alimento utilizando un sistema de ecolocación similar al de los murciélagos. Para el ingreso es necesario realizar una reserva.
Río Anchicayá
Nace al oeste de Cali y desemboca en el océano Pacífico. Es ancho y caudalosos, de aguas generalmente tranquilas. A lo largo de su cauce goza de una gran biodiversidad, variedad de climas y ecosistemas. Se recomienda visitarlo en compañía de un guía y aprovecharlo para practicar actividades como el kayak, que permite la observación de especies de aves y animales.
Oasis de la sirena
Sobre esta piscina natural cristalina que forma el río Danubio, de color esmeralda, cae una cascada que nace en el corazón del bosque andino: cascada La sirena. Un lugar mágico del municipio de Dagua, en el Valle del Cauca, para pasar un día completo entre el agua, rodeado de naturaleza, oyendo y observando aves como patos, colibríes, gorriones, azulejos, carpinteros y loros. Muchos habitantes de la zona y los turistas que la han visitado la califican como una de las más hermosas y poco conocidas de Colombia.
Parque Sanquianga
En este santuario natural, en Tola, Nariño, se encuentra el 53 por ciento de los manglares del departamento y el 20 por ciento de los del Pacífico colombiano. Es un rincón del país que ofrece experiencias para los amantes de la naturaleza, gracias a su riqueza en especies marinas, estuarios y aves que anidan aquí. Para llegar se puede viajar desde Buenaventura.
Parque Guátika
Este lugar es un zoológico poco conocido que alberga unos mil animales entre los que se encuentra el jaguar, leones, osos y cientos de especies rescatadas del tráfico ilegal de fauna silvestre. La forma más fácil de llegar a este lugar es acercarse al centro de Tibasosa (Boyacá) y desde ahí preguntar por la ubicación del bioparque. Este destino se encuentra a tan solo tres horas de Bogotá y a 10 minutos del municipio de Tibasosa.
Desierto de la Candelaria
A pesar de no ser tan conocido como la Tatacoa o el desierto de la Guajira, este desierto en el departamento de Boyacá ofrece la oportunidad de disfrutar de varios fenómenos celestes y de un paisaje propicio para el senderismo. En este lugar también se puede aprender de la cultura muisca. Muchos lo conocen como el desierto de Almas, debido a que se encuentra apartado de grandes centros poblados y gracias a ello se ha posicionado como un atractivo escenario para el recogimiento espiritual.
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