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Dunkin’ Donuts: de emprendimiento familiar a una franquicia que emplea 1.200 jóvenes en Colombia
Hace 40 años, Miguel Merino, trajo a Colombia la franquicia estadounidense. Hoy, se ha consolidado como una marca apreciada por los colombianos y una de las primeras oportunidades de empleo para muchos jóvenes.
Usted logró traer a Colombia una de las marcas más queridas por los colombianos, ¿qué lo llena hoy de orgullo?
Miguel Merino: Darle oportunidad de empleo a los jóvenes ha sido una de las grandes satisfacciones nuestras. Aquí han tenido la opción de su primer trabajo, con el que muchos se ayudan a pagar sus estudios académicos o a contribuir a las economías familiares. Les hacemos mucho énfasis en cinco pilares: que sueñen sin límite; que se informen para que puedan volver esos sueños realidad; que tengan pasión, porque no hay cosas fáciles en la vida; la honestidad en todos los contextos; y, por último, que piensen en que tenemos un hermoso país, que quieran lograr una Colombia mejor.
¿Cuál es el mayor reto que ha tenido que enfrentar Dunkin’ en sus 40 años de historia en el país?
M.M.: Un reto grande fue la pandemia. Fue algo que nos sorprendió a todos. Teníamos la responsabilidad de 1.200 jóvenes, empleados directos, muchos de los cuales mantenían a sus familias. Decidimos apoyarlos, que se fueran y se protegieran en sus casas, pero seguimos manteniéndoles el sustento económico para que no tuvieran la dificultad. Para nosotros fue una gran satisfacción porque pudimos mantenernos vigentes. Somos unos convencidos de que las empresas se crean, no por la marca, ni el producto, la tecnología o el respaldo financiero, sino por su gente.
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¿Qué les permitió superar ese gran desafío?
M.M.: Tenemos la fortuna de que el producto nuestro sea de fácil acceso para la gente, no es un producto costoso. Muchos colegas tuvieron lastimosamente que cerrar, pero el consumidor continuó allí y encontró en nosotros un sitio donde siempre nos preocupamos por la sanidad alimentaria, por la atención al cliente y por buscar un precio del producto adecuado al bolsillo de los colombianos. Hoy nos llena de orgullo haber tomado el camino correcto.
¿Qué viene para el futuro?
M.M.: Somos una franquicia internacional y tenemos un compromiso anual de aperturas para que la marca se fortalezca y ese es el objetivo. Nuestra meta es abrir 5 tiendas anualmente. Así, esperamos que de aquí al 2030 podamos abrir 50 tiendas más, continuar ofreciendo oportunidades de empleo y seguir aportándole al crecimiento del país. En Colombia hay muchas posibilidades, necesitamos dedicarnos a construirlas y desarrollarlas.
