Medio ambiente
El Valle de Aburrá tiene un plan para enfrentar el cambio climático
La entidad cuenta con una hoja de ruta para que el territorio y sus habitantes mitiguen y se adapten a este reto global. Los programas tienen una meta a 2030, reducir en 35,7 por ciento la emisión de gases efecto invernadero en los diez municipios antioqueños que la conforman.
Quedan siete años y un poco más de 200 días para evitar cambios irreversibles que impactarán de manera definitiva la forma en la que habitamos el planeta. Es por ello que el llamado para la humanidad a cambiar hábitos y comportamientos es de urgencia.
Esta cuenta regresiva buscó sensibilizar a los asistentes a la Feria Metropolitana Acción Climática, que realizó el Área Metropolitana del Valle de Aburrá el pasado 25 y 26 de octubre en Plaza Mayor de Medellín. El objetivo es generar conciencia acerca de la necesidad de acelerar acciones que permitan contener el calentamiento global y sus consecuentes afectaciones a los seres vivos y el planeta.
En palabras de Juan David Palacio, director de la institución ambiental, “el mundo está en cuenta regresiva. Debemos generar corresponsabilidad y conciencia ambiental con acciones reales y contundentes como la construcción de políticas públicas en las que las instituciones responsables tenemos el deber legal de actuar, pero generando reflexiones y compromisos para que el sector privado, las empresas, la academia y la ciudadanía aportemos en la mitigación de los efectos, pero también nos adaptemos a ellos”.
Durante la feria la entidad dio a conocer sus programas más importantes asociados con el cambio climático. Uno de ellos es el Plan Siembra, que tiene la meta de sembrar un millón de árboles en el Valle de Aburrá a 2023. También están EnCicla, el sistema público de préstamos de bicicletas que en diez años ha evitado la generación de 10.500 toneladas de CO2 con sus 103 estaciones y 1.800 bicicletas que se usan para hacer en promedio 9.000 viajes diarios; y el Siata, el Sistema de Alertas Tempranas del Valle de Aburrá, que acompaña las acciones de prevención, anticipación y adaptación a episodios de riesgo natural como inundaciones, episodios de contaminación del aire, sequías, incendios y sismos, entre otros.
El objetivo es que, gracias a estas iniciativas, en el territorio metropolitano se disminuyan en promedio un 35,7 por ciento la generación de gases de efecto invernadero a 2030. Paola Andrea Arias, investigadora, climatóloga y docente de la Universidad de Antioquia, explica que el planeta tiene un límite de 1,5 grados en su calentamiento, que al superarse, podría generar graves afectaciones a la biodiversidad y la vida humana tal y como la conocemos en la actualidad. La Tierra se ha calentado 1,1 grados centígrados en las últimas décadas.
Mirar hacia el futuro
Para avanzar en la generación de soluciones, que contribuyan a la mitigación y adaptación del cambio climático en la región, el Área Metropolitana presentó durante la feria el Plan de Acción ante el Cambio y la Variabilidad Climática, que fue aprobado mediante Acuerdo Metropolitano en febrero de 2019, y plantea, con miras a 2030, una serie de acciones que deberán ejecutar entidades públicas y privadas.
Diana Montoya, subdirectora ambiental de la entidad, comentó que el plan contiene 14 programas de adaptación y varias medidas para mitigar los efectos de este fenómeno.
Las líneas estratégicas comprenden componentes de cultura y educación; formación y sensibilización de públicos; ordenamiento territorial y planificación urbana; ciencia, tecnología e innovación; gobernanza, institucionalidad e instrumentos financieros para la generación de recursos que permitan implementar las orientaciones de este documento.
“El plan estudió las variables climáticas con las que se modelaron escenarios a mediano y largo plazo como cambios en las precipitaciones y la temperatura entre 2050 y 2100, y con base en esos escenarios futuros se identificaron acciones que se requieren para enfrentarlos”, precisó Montoya.
*Contenido en colaboración con Área Metropolitana Valle de Aburrá.
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