Especial Pacífico
El Valle del Cauca concentra la mayoría de remesas que giran los colombianos desde el exterior. Este ha sido su impacto económico
El departamento cuenta con un 25 por ciento de participación, seguido de Antioquia y Cundinamarca. Estos recursos son un impulso importante para el crecimiento del departamento y la capacidad de compra de los hogares.
Dentro del contexto económico del Valle del Cauca, los ingresos de divisas por concepto de ayudas de los colombianos que han migrado a otros países en busca de mejores oportunidades se han consolidado como una fuente importante de recursos, que inciden directamente en la capacidad de compra y crecimiento del departamento.
En el caso del Valle del Cauca, algunos analistas atribuyen el fenómeno migratorio a la necesidad de contar con fuentes formales de empleo porque la mayoría de labores se automatizaron o requieren estudios universitarios, sumado a que, en tiempos de violencia aguda, especialmente en el norte, más personas salieron del país.
Durante 2021 el total de remesas que entraron al país fue de 8.597 millones de dólares, con un crecimiento de más del 24 por ciento. Para este año creemos que se registrarán 9.500 millones y 10.000 millones de dólares, un monto de por sí muy representativo, siendo Colombia uno de los principales países en Suramérica que reciben remesas, según el Banco de la República.
Los buenos resultados que hasta el momento han registrado las economías de Estados Unidos, Europa y Chile (este último, que ha estado aumentando su participación en el envío de esos recursos), son los responsables de las buenas cifras en las remesas, que le compiten en volumen a la Inversión Extranjera Directa.
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¿Pero el Valle del Cauca cómo participa en esta afluencia de flujos externos? El departamento es el que concentra la gran mayoría de las remesas, con 25 por ciento de participación, seguido de Antioquia y Cundinamarca, y una menor proporción del Eje Cafetero y la costa Atlántica. Los principales emisores son Estados Unidos, España y países de nuestra región.
Contrario a lo que podría pensarse, estos flujos de dinero no dependen directa y proporcionalmente de las fluctuaciones de las tasas de cambio, pero sí lo puede hacer la tasa de inflación en los países en donde se originan los recursos. Como se conoció hace poco, la inflación en septiembre en Estados Unidos se ubicó en 8,2 por ciento y la subyacente estuvo por encima de las expectativas de los analistas. Este tipo de comportamiento en los precios podría afectar el desarrollo de estos volúmenes, así como las tasas de cambio en los países emisores con monedas diferentes al dólar.
Por otra parte, debido al fenómeno migratorio, los volúmenes han ido cambiando. De tener una participación muy activa en España, un país en donde se concentró hace muchos años la afluencia de personas, pero que se redujo debido a las dificultades para encontrar empleo, ahora la atención está en Norteamérica, el nuevo destino favorito de los migrantes colombianos.
* Director de Soluciones de Divisas y Derivados Acciones & Valores - Western Union.