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Escuelas deportivas y musicales, un salvavidas para niños y jóvenes del municipio de Ricaurte
Desde la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte se incentiva la participación en estas actividades que los alejan de la violencia y las actividades ilegales. Desde las comunidades indígenas los menores caminan más de ocho horas para jugar la Copa Municipal Interresguardos o asistir a clases de música tradicional.
Más de 270 niños y jóvenes del municipio de Ricaurte, Nariño, integran las escuelas de formación musical y deportiva que está impulsando la Alcaldía para garantizar un mayor aprovechamiento de su tiempo libre. Mario Goyes, secretario de Cultura, Recreación y Deporte de Ricaurte, precisa que el proyecto arrancó hace solo cinco meses pero ya ha logrado mostrarles otros caminos alejados de la violencia y las actividades ilícitas.
Una de las actividades es la Copa Municipal Inter resguardos, un torneo de microfútbol que integra a los 11 resguardos y a más de 15 cabildos del pueblo indígena Awá. Este campeonato también hace parte del Plan de Desarrollo municipal que busca incentivar el deporte y la integración entre las diferentes comunidades indígenas del Cabildo Mayor Awá de Ricaurte. En él participan 280 deportistas de todos los resguardos de los 17 años en adelante.
Christian Caicedo, jefe de la oficina de Asuntos Indígenas del municipio, explica que “hay futbolistas que viven hasta a nueve horas de camino a pie. Es un honor que participen en la Copa. Se debe destacar el gran esfuerzo que hacen los jugadores para venir hasta acá a demostrar su talento, representar a sus comunidades, ponerse la camiseta de su resguardo, competir y convivir con otras personas de su misma edad”. La Copa Municipal Inter resguardos se ha realizado dos veces, y los organizadores y jugadores buscan que se institucionalice para que se pueda jugar cada año.
Julio López, gobernador del Resguardo Vegas Chagüí - Chimbuza y uno de los jugadores que participó, asegura que este tipo de eventos logra que haya más entendimiento, comunicación y sobre todo mayor reconocimiento entre las diferentes comunidades. Además, incentiva el deporte, la salud, la recreación y la cultura futbolística en los indígenas.
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Las escuelas de formación también fomentan deportes como baloncesto, patinaje, natación y fútbol. Peter Cabrera, coordinador deportivo del ente municipal, explica que esta zona del piedemonte costero nariñense fue muy afectada por el conflicto y el deporte es una buena manera de olvidar y sobrevivir al pasado. Además, las escuelas son inclusivas, pues integran todas las comunidades, incluidos jóvenes venezolanos migrantes que llegaron a Ricaurte.
Uno de los atractivos deportivos de las escuelas es la natación, en la que participan 68 niños del municipio entre siete y 16 años. Aliver Gualli, padre de familia de una alumna que está en clases de natación, menciona que fomentar el deporte es fomentar el buen uso del tiempo libre, pues las redes sociales y la tecnología han logrado que la actividad física sea cada vez menor. Otro beneficio importante de las escuelas es que no tienen restricción de edad.
La Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte de Ricaurte también vinculó a más de 100 niños a las escuelas de formación musical y clases como técnica vocal, banda sinfónica y música tradicional. En el municipio también buscan fortalecer la historia y el interés por las músicas tradicionales del Pacífico nariñense, por lo que uno de los proyectos se va a centrar en la marimba, instrumento insignia de Ricaurte. Goyes también menciona que se realizará un recorrido por los resguardos indígenas para incentivar la música en niños y jóvenes.
*Contenido en colaboración con la Alcaldía de Ricaurte
