Ambiente

Gracias a las comunidades indígenas y campesinas se preserva el bosque de paz de Ricaurte, Nariño

Sus árboles crecen en la Reserva Natural La Planada, uno de los lugares de mayor diversidad biológica en Colombia.

22 de noviembre de 2021
Guillermo Cantillo, coordinador del equipo de investigadores de La Planada, llegó por primera vez a este territorio en 1981.
Guillermo Cantillo, coordinador del equipo de investigadores de La Planada, llegó por primera vez a este territorio en 1981. | Foto: Guillermo Torres Reina

En la vía que conduce de Tumaco a Pasto se encuentra Ricaurte, un municipio con una gran diversidad natural y cultural que une a las comunidades afrocolombianas, mestizas e indígenas de la región. Por formar parte de la cuenca del río Guiza, el paisaje es rico en guaduales, cultivos de caña, cascadas y bosques de niebla en los que habitan especies endémicas de fauna y flora. Además de ser un municipio reconocido por su tradición marimbera, panelera e indígena, Ricaurte se destaca por sus maravillas naturales.

Natalia Araújo, coordinadora ambiental de Ricaurte, precisa que dentro del Plan de Desarrollo de la Alcaldía se trabaja por impulsar el turismo comunitario y el desarrollo sostenible en las reservas naturales. “Ricaurte tiene muchos tesoros por mostrarle al departamento, a Colombia y al mundo, y con el turismo y el deporte estamos incentivando que los beneficiados sean las mismas comunidades indígenas y campesinas”, explica.

LA PLANADA

En el resguardo indígena Pialpí Pueblo Viejo, a 20 minutos del casco urbano, más de 3.300 hectáreas de bosque húmedo conforman la Reserva Natural La Planada, uno de los lugares de mayor riqueza biológica en Colombia. Es un territorio en el que habita una gran variedad de plantas y animales endémicos de la zona andina como el tucán de montaña, el gallito de roca, el venado de soche y el oso de anteojos. La Planada es reconocida como el área de mayor concentración de aves de Suramérica, con más de 416 especies. Esto la ha consolidado como uno de los destinos más importantes para el aviturismo en el mundo.

En 1981 Guillermo Cantillo llegó por primera vez a La Planada mientras hacía un estudio ecológico sobre la vertiente occidental de Colombia, que incluye el Chocó, Cauca, Valle del Cauca y Nariño. En ese entonces, el territorio hacía parte de una finca privada. Cantillo cuenta que en ese primer año encontraron 13 especies de aves endémicas, por lo que desde el primer momento supo que era un sitio interesante para la investigación y conservación. Un año después este santuario natural pasó a ser propiedad de la Fundación para la Educación Superior y desde 2010 la Reserva Forestal Protectora Nacional La Planada hace parte del Resguardo Integrado Pialapí Pueblo Viejo, uno de los 11 resguardos que conforman el Cabildo Mayor Awá de Ricaurte.

Cantillo, quien ahora es el coordinador del equipo de investigadores de La Planada, explica que la reserva se encuentra repartida en dos planicies, cinco cerros y dos caños, y además cuenta con siete senderos ecológicos. El reconocido botánico estadounidense Alwyn Gendry describió a La Planada como el “imperio supremo de las epífitas” por la cantidad de líquenes, bromelias, musgos y sobre todo, de orquídeas. Cantillo asegura que si Colombia es el país con mayor concentración de orquídeas en el mundo, La Planada es el área geográfica con mayor diversidad de estas plantas en el planeta, pues se han reportado más de 370 especies.

Obed Ortiz, indígena awá y actual director de La Planada, precisa que la reserva se enfoca principalmente en el turismo científico y de naturaleza. Desde 2017 está registrada como un Bosque de Paz, es decir, un territorio de conservación, restauración y formación ambiental, además de un escenario de construcción de paz en el que se prioriza el desarrollo de la comunidad awá.

*Contenido elaborado con apoyo de la Alcaldía de Ricaurte, Nariño