Los Rolling Ruanas vuelven a la escena musical con “Nueva Tierra”, un disco para la memoria histórica del país

Las movilizaciones sociales que iniciaron a finales del 2019, trabajar junto a Naciones Unidas en distintos territorios del país y el encierro producido por la pandemia del covid-19 fueron los tres momentos que marcaron la génesis de “Nueva tierra”, el nuevo disco de los Rolling Ruanas que se podrá escuchar en plataformas a partir del 25 de junio.

Las canciones de este trabajo discográfico resaltan, por una parte, la introspección en momentos de rupturas y desamores, pero con un ánimo de transformación, más allá de una simple historia de despecho. Por otro lado, reflejan la problemática social, por la que pasa Colombia. Es así como cada composición se convierte en una fotografía sonora para dejar huella en la memoria histórica del país. Todo esto con el fin de motivar la transformación y la toma de decisiones de aquellos que siguen a los cuatro enruanados.

“Nueva tierra” refleja la evolución compositiva de la agrupación bogotana. Además, incluye la participación de artistas independientes como Lucio Feuillet, Las Áñez y Edson Velandia. Aunque este último no canta, su participación fue fundamental en la dirección musical y artística.

En diálogo con SEMANA, Juan Diego Moreno (cantante y guacharaca) y Jorge Mario Vinasco (tiple y coros), hacen una retrospectiva de lo que ha sido su evolución musical desde el 2014 y analizan los elementos que conforman “Nueva tierra”, un disco para el que dicen han escrito sus mejores letras.

SEMANA: ¿Qué significó grabar este disco en un estudio propio y sin presiones de tiempo o costos?

Jorge Mario Vinasco: Uno de los integrantes del grupo, Fernando Cely, realizó un estudio en su casa. Este se ha convertido en un espacio para grabar, echar ideas, tomar tinto, hablar y todo eso se ve plasmado en el trabajo, donde la gente va a poder escuchar nuevos elementos, eso sí, siempre conservando la tradición carranguera que es la base fundamental de este grupo.

SEMANA: Ustedes utilizan mucho el término fotografías sonoras, ¿cuáles podremos encontrar en este disco?

Juan Diego Moreno: Hay fotografías de la realidad del país que vienen desde hace mucho gestándose en el campo, pero que hasta ahora las empezamos a sentir en las ciudades, entonces hay escenas como la de unos padres despidiéndose de su hijo para que no sea reclutado por grupos armados. También tenemos una fotografía del desamor, sin embargo, esta es mucho más resiliente. En parte cantarle a una nueva tierra es hacerlo a nuevas emociones que nos han tocado y transformado mucho en medio de la pandemia.

SEMANA: Hablemos de Mario Miguel, el primer sencillo de este álbum...

J.D.M: Mario Miguel es la historia de una persona muy allegada a la familia de Luis Guillermo, quien toca la guitarra. Se trata de un joven humilde que emigró del campo a la ciudad al no tener oportunidades en su tierra y decide venir a probar suerte. Eso le dejó a Memo la inquietud de volver esa historia una canción y cuando empezamos a trabajarla con el aporte de Edson Velandia caímos en cuenta que a partir de esta podríamos fotografiar la realidad para muchos en el campo.

SEMANA: Musicalmente esta canción tiene varios elementos…

J.M.V: Hay un aire muy marcado del vallenato de los 70, porque Memo tiene una influencia muy grande del bajo del vallenato, su banda favorita es el Binomio de Oro. Entonces esta canción es una rumba lenta con influencias costeñas de porro sabanero, además cuenta con la participación de un amigo de ascendencia ucraniana que se llama Gianco y toca el acordeón con una sonoridad muy gitana.

SEMANA: ¿Qué impacto tuvo para el grupo la pandemia?

J.D.M: A partir del encierro no pudimos hacer dos giras que estaban planeadas a Europa a mitad y final del año pasado, entonces nos cambiaron todos los planes y nos encontramos de cara con un momento de reflexión interior que nos permitió componer música todos los viernes virtualmente. Por ahí fueron surgiendo estas canciones con conciencia, social, natural y por supuesto, campesina.

SEMANA: Ya han pasado sietes años desde aquellas primeras grabaciones, ¿qué análisis hace de su evolución musical?

J.M.V: Ha sido un crecimiento bastante divertido, porque cuando empezamos no sabíamos que estábamos haciendo, literalmente. Nos encontramos con la carranga tras hacer covers del maestro Jorge Veloza y después, en un accidente feliz -como lo llamamos- se nos atravesó un cover de rock and roll. En todo este camino han estado presentes nuestras influencias musicales y así hemos ido formando esta sonoridad “rollingruanezca”.

SEMANA: El crecimiento y la evolución también se ven marcados por lo que pasa en el ámbito personal…

J.D.M: A nivel individual y colectivo también han pasado muchos cambios, por ejemplo, Fernando y Memo decidieron emprender proyectos de huertas caseras. Jorge es papá desde hace dos años y cuatro meses. En mi caso me divorcié hace un año. Todas esas experiencias, más lo que nos ha pasado como grupo, nos dejan muchas anécdotas y enriquece la vida para contar nuevas historias.

SEMANA: En este momento del país, ¿cómo conciben ustedes la responsabilidad artística?

J.D.M: Cuando se trata de derechos humanos, de las juventudes y las oportunidades para las nuevas generaciones y el campo, la voz de los Rolling Ruanas debe ser coherente porque su música nace de allí, así que siempre defenderemos la dignidad de la vida sin afiliarnos a un partido político o ideología, pero sí con un mensaje muy claro. “Nueva Tierra” fue grabado, producido y mezclado por Fernando Cely, requintista de la banda en su estudio, y masterizado por Julián Guerrero. El disco será lanzado con conciertos el 24 de junio en el teatro Julio Mario Santo Domingo; y en Medellín el 26 de junio con dos conciertos el mismo día. Son las mejores canciones que hemos escrito, así que esperamos que la gente también lo sienta así.

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