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Erasmo Zuleta, gobernador de Córdoba 2024- 2027. | Foto: GUILLERMO TORRES REINA

Regiones

¿Qué tanta autonomía territorial hay en Colombia? Así lo analizan algunos gobernadores del país

Algunos mandatarios explican por qué no se ha invertido lo suficiente en la transformación de los territorios. Aumentar la participación territorial en el Sistema General de Participaciones podría ser la clave para el desarrollo regional.

Redacción Semana
31 de julio de 2024

En Colombia los temas de descentralización y autonomía territorial han hecho parte de la agenda nacional por décadas. Pues en algunos departamentos señalan que, como está concebido institucionalmente, el manejo de recursos públicos y la aprobación de proyectos regionales están muy centralizados en Colombia, lo que ha representado un gran desafío para el desarrollo de las regiones.

Bajo este panorama, los gobernadores de los departamentos de Córdoba, Santander, Caquetá, Arauca, Guaviare y San Andrés, Providencia y Santa Catalina hicieron su diagnóstico sobre este tema en la actualidad colombiana.

Erasmo Zuleta, gobernador de Córdoba, señaló que debido a la centralización que existe en Colombia, “las regiones con mayor potencial han sido olvidadas y nunca han llegado los recursos para hacer las grandes inversiones que transformen el territorio”.

A su vez, resaltó la urgencia de implementar cambios significativos en su región. “Hoy tenemos un departamento con 80 % de informalidad, 26 % de desempleo juvenil y 22 % de acceso a la educación superior. Tenemos que cambiar esa realidad y para eso tenemos que tener autonomía territorial”, afirmó.

Los gobernadores hablan de la necesidad de descentralización en Colombia

Por su parte, el gobernador del Santander, Juvenal Díaz, explicó que aunque en el país sí se ha establecido una descentralización de funciones en las entidades territoriales, esta no ha venido acompañada de autonomía financiera.

“En Colombia sí se ha descentralizado, eso es una realidad. Es decir, a nosotros nos mandaron la responsabilidad del PAE, de la educación, de la salud, de las pensiones, de una cantidad de cosas, porque descentralizar es asignar competencias y roles a un ente territorial. Lo que pasa es que no nos han dado la plata, entonces no nos dan autonomía”, enfatizó el mandatario.

Asimismo, Renson Martínez, gobernador de Arauca, subrayó la necesidad de mayor autonomía territorial en sectores como salud, educación, agua potable y saneamiento básico. Pues, actualmente, la asignación de recursos para infraestructura y educación es insuficiente.

“En nuestro departamento la limitada capacidad presupuestal de las transferencias del Sistema General de Participaciones se prioriza al pago de la nómina de los docentes en el departamento de Arauca para cada una de las instituciones educativas y, de esa manera, no existe la posibilidad de hacer inversión para infraestructura y para otras prioridades que se tienen frente a la educación en Arauca”, aseguró Martínez.

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En el 2023, los docentes de Arauca tuvieron que encabezar protestas y bloqueos para acordar con el Gobierno nacional, garantías en la educación del departamento. | Foto: Ministerio de Educación

Yeison Rojas, gobernador del Guaviare, reconoce la inevitable dependencia de su departamento hacia el gobierno nacional, al no poder hacer un uso de otras fuentes de ingreso.

“Nosotros no somos productores de regalías, de hecho, con una reforma de regalías, pues a nosotros se nos generaría una gran posibilidad de llevar a cabo más obras a través de esos importantes recursos. Pues, hoy en día no tenemos producción, ni industria. Entonces, sí dependemos mucho del gobierno nacional”, advirtió.

Entre tanto, Nicolás Gallardo, gobernador del departamento de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, argumentó que para él, la descentralización debe ser una realidad si se quiere tener una distribución de la riqueza en el país, especialmente en territorios lejanos. “Nosotros deberíamos tener una sostenibilidad económica y especialmente una sostenibilidad integral, ya que no tenemos esa conectividad fluida para desplazarnos a otro departamento cercano en comparación con el resto del país”, sostuvo.

Pero, además del reto que enfrentan estos departamentos en hacer una adecuada gestión con recursos limitados, se suma la complejidad de los procesos centralizados para obtener viabilidad en la ejecución de sus planes o proyectos territoriales.

Luis Francisco Ruiz, gobernador del Caquetá, resumió así la situación: “Que uno tenga que venir a pedirle permiso a una agencia, a un ministerio de cómo va a ejecutar los recursos, o venir a llorar por recursos, no es algo eficiente. Hoy las necesidades del departamento las priorizan desde Bogotá personas sentadas en escritorios que no conocen el territorio”. Este sentimiento es compartido por los otros gobernadores, quienes abogan por una mayor autonomía financiera que les permita tomar decisiones informadas y eficientes.

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Luis Francisco Ruiz, gobernador del Caquetá 2024 - 2027. | Foto: JUAN CARLOS SIERRA PARDO / SEMANA

Planes para una autonomía territorial

Los gobernadores del país coinciden en la necesidad de reformar el Sistema General de Participaciones (SGP) para lograr una distribución más equitativa de los recursos entre la nación y los territorios. Esta propuesta, que surgió en una cumbre convocada por la Federación Nacional de Departamentos, es clara: aumentar gradualmente la participación territorial en este sistema hasta llegar a un 47%. Esto permitiría a los entes territoriales contar con los recursos necesarios para cumplir con las responsabilidades descentralizadas, como educación, salud, y otras áreas críticas.

Pero, para que Colombia avance hacia una descentralización efectiva, es crucial que el gobierno nacional y los entes territoriales trabajen de manera articulada en la implementación de estas reformas. Solo así se podrá asegurar un desarrollo más equilibrado y justo para todas las regiones del país. La propuesta de aumentar el Sistema General de Participaciones busca corregir esta disparidad, otorgando a las regiones la capacidad financiera para enfrentar sus desafíos específicos y mejorar la calidad de vida de sus habitantes.