Sophie Pontramier creó Casa Cocotte Palomino, un proyecto autosostenible con dos componentes: uno económico, que sostiene al social.
Sophie Pontramier creó Casa Cocotte Palomino, un proyecto autosostenible con dos componentes: uno económico, que sostiene al social. | Foto: Cortesía Sophie Pontramier

Perfil

Sophie Pontramier, una publicista francesa que cambió su vida en París por un proyecto autosostenible en Palomino

Quería hacer una pausa y más tiempo para ella. En ese viaje descubrió este corregimiento del municipio de Dibulla, en La Guajira, y aquí volvió a empezar de nuevo. Abrió un restaurante de alimentación consciente, un centro para enseñar idiomas y otro de formación laboral para que la comunidad pueda aprovechar las oportunidades que llegan con el turismo.

4 de mayo de 2021

Mónica Pardo*

Fue un viaje muy largo. Durante 15 meses recorrió Suramérica. Primero llegó a Colombia, luego estuvo en Ecuador, Perú, Bolivia, Chile y Argentina. Iba y volvía. Tenía un trabajo intenso como directora creativa de publicidad y quería hacer una pausa, tiempo para ella. Esa fue la razón de su aventura. Después de tres meses sabía que no quería regresar a Francia a su vida de antes. Descubrió muchos lugares y, entre todos los que visitó, escogió para su nueva vida a Palomino, un corregimiento del municipio de Dibulla, en La Guajira.

Vivo entre el mar, el río y la Sierra, en un pueblo increíble y hermoso del que me enamoré. Antes vivía en París y creo que no estaba lista para volver a la ciudad y la verdad, Palomino tiene su onda, tiene su magia y lograba todo mi sueño”, cuenta.

Ya son cuatro años desde que Sophie Pontramier, de 42 años, conoció Colombia. Y han pasado tres desde que vive en Palomino.
Ya son cuatro años desde que Sophie Pontramier, de 42 años, conoció Colombia. Y han pasado tres desde que vive en Palomino. | Foto: Cortesía Sophie Pontramier.

A Sophie la ‘mueven’ los temas sociales y en esta pequeña población identificó que en medio de ese ‘boom’ turístico, los propietarios de los hoteles y restaurantes encuentran dificultades para contratar fuerza laboral local y prefieren recurrir a personas de ciudades grandes y no a los habitantes del pueblo, quienes se pierden estas oportunidades laborales por falta de conocimiento.

Como le gusta aprender, investigó sobre esta problemática y se dio cuenta de que muchas personas son analfabetas o que apenas tienen el bachillerato. Esto la entristeció y la llevó a crear Casa Cocotte Palomino, un proyecto autosostenible con dos componentes: uno económico, que sostiene al social. Por un lado, diseñó una lavandería ecológica y un restaurante con un concepto de alimentación consciente en el que todos los días se cambia el menú de acuerdo con la disponibilidad de productos frescos; por el otro, abrió un Centro de Desarrollo para el Trabajo dedicado a la formación laboral; y además, un Centro de Idiomas donde se enseña a leer y a escribir, y se dictan clases de español para los turistas e inglés y francés para la comunidad de Palomino. “Los cursos son muy accesibles y también tenemos madrinas y padrinos que apoyan a algunos estudiantes que no pueden pagar el mes”, detalla.

Ya son cuatro años desde que Sophie, de 42 años, conoció Colombia. Y han pasado tres desde que vive en Palomino, donde lucha por mantener en pie su proyecto soñado, que el 7 de abril cumplió dos años y ahora espera recuperarse de los embates de las cuarentenas.

*Periodista