Moda
Visibles: una colección inspirada en las historias de los migrantes venezolanos que llegó a las pasarelas colombianas y pronto estará en almacenes
La joven diseñadora venezolana Carmen Nava, de 25 años, presentó un retrato de la diáspora que millones de sus compatriotas han afrontado en los últimos años. Una oportunidad que además atrae nuevos y potenciales compradores de Venezuela que hoy residen en nuestro país.
Según un informe de la Organización de los Estados Americanos (OEA), por lo menos 5,6 millones de ciudadanos venezolanos han tenido que abandonar sus hogares en condición de migrantes o refugiados. Esto quiere decir que cerca del 18 por ciento de la población de ese país hoy se encuentra en otro lugar, probando suerte o huyendo de la crisis.
En esta larga lista está Carmen Luisa Nava Castillo, quien llegó a Colombia hace tres años. Desde pequeña soñó con viajar por el mundo, pero nunca imaginó que debía salir de su natal Maracaibo por los problemas políticos y económicos.
Sin embargo, lejos de sentirse mal por esta situación, se armó de valor y cruzó la frontera con destino al departamento de La Guajira. “Yo sé que no estaba viviendo el mejor momento, pero me aferré a lo positivo, que es algo que siempre suelo hacer”, le dijo a SEMANA.
Carmen salió de Venezuela poco después de graduarse como diseñadora de modas, en 2017. Con muchas ideas, talento y una vieja máquina de coser heredada de su abuelo, llegó para hacer su pasantía junto a Blanca Yaneira Fernández, una diseñadora colombo-venezolana y wayuu.
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“Si yo antes era humana, La Guajira me hizo más humana”, recuerda de su paso por ese departamento que la inspiró con su gente, sus artesanías y la “gran variedad de colores”. Y cuando Carmen decidió dar un paso más en busca de sus sueños, viajó a Medellín, una de las ciudades más tradicionales de la industria textil en Colombia.
A su llegada, comenzó a trabajar en una empresa de herrajes donde, además de cumplir con sus labores, aportó ideas novedosas y demostró su criterio y curiosidad. Infortunadamente, la pandemia del coronavirus la enfrentó a un nuevo reto, como le pasó a muchas empresas, la que empleaba a Carmen entró en crisis y ella perdió su puesto.
Pero esta joven diseñadora, fiel a su temple, no se dejó apabullar por la situación, por el contrario, descubrió que era el momento de dar el primer gran golpe de su sueño como diseñadora. En un pequeño apartamento y con las telas que compró con el dinero de su liquidación, se encerró a crear su primera colección: Eterna Primavera.
Gracias a esto, Carmen entró en el radar de la Fundación Inexmoda y del programa de Alianzas para la Reconciliación de USAID. Posteriormente, en febrero, ingresó al programa Valiente II, un proceso donde se capacitó en temas de moda, sastrería y emprendimiento. Junto a ella también estaban otros 83 creadores, 56 venezolanos y 28 colombianos.
La iniciativa contemplaba un premio especial al mejor estudiante: mostrar su trabajo en una pasarela de Colombiamoda el último día del evento. Carmen cumplió todos los retos profesionales y ganó. Según ella, este era un sueño que no esperaba cumplir tan pronto.
Homenaje a los migrantes
La primera pasarela de Carmen en esta importante feria no podría estar cargada de otra cosa que de su propia historia. Apelando a sus emociones y a la experiencia de migrante, diseñó y cosió una serie de prendas que hacen alusión a los millones de venezolanos que caminan por carreteras, pueblos, trochas y hasta páramos para llegar a Colombia, Perú, Panamá, entre otros países.
“Visibles es una colección que hice con todo mi corazón para contar la historia de miles de caminantes y migrantes venezolanos. Incluso, también es la historia de millones de migrantes alrededor del mundo. Se trata de un ejercicio para dar ese mensaje, pero sin dejar a un lado la moda. La verdad, todo encajó perfecto”, le dijo Carmen Navas a SEMANA.
El desfile se llevó a cabo el pasado jueves 29 de julio. El escenario de Colombiamoda fue testigo de la fuerza de su creación. Camisetas, pantalones, sobretodos y morrales; elementos comunes en las caminatas de los migrantes, se robaron el protagonismo. En total, se presentaron 10 outfits, acompañados de piezas pintadas por la diseñadora.
Asimismo, las modelos presentaron carteles con mensajes de sensibilización frente a la xenofobia y otras situaciones a las que se ven enfrentados los migrantes. “Todos somos visibles”; decía uno de los carteles. Al final, “moda sin fronteras” fue la consigna de la colección de Carmen, quien comenta que pronto saldrán a la venta las prendas que más impactaron al público.
“Ella demuestra que el talento venezolano aporta nuevas ideas a las pasarelas de Colombia en creatividad e innovación. Por otra parte, las compañías textiles pueden ver como un buen negocio que nuevos y potenciales compradores que vienen de Venezuela se interesen en reactivar la economía consumiendo los diseños que se produzcan en el país de la mano de creadores de ambos países”, complementan desde USAID.
Carmen asegura que los diseñadores colombianos la han recibido y apoyado en varias oportunidades, incluso en temas psicológicos y emocionales. Se muestra agradecida, dice que ese apoyo no tiene precio y no duda en repetir una y otra vez que “Colombia es un país sin fronteras, que nos abre las puertas para soñar”.