Economía
Vivienda: una prioridad de inversión para los colombianos
La recuperación del sector inmobiliario no se detiene. La comercialización de vivienda nueva en Colombia alcanzó un máximo histórico en el primer trimestre de 2021, al registrar 54.874 unidades vendidas.
El sector vivienda en Colombia cerró el pasado mes de abril con cifras bastante alentadoras. No solamente logró la estadística más alta de los últimos 9 años para el mismo periodo, sino que triplicó las del 2020, cuando se reportó una contracción del mercado al inicio de la pandemia. Según el más reciente reporte de La Galería Inmobiliaria, compañía especializada en generar herramientas para el sector, se comercializaron más de 18 mil unidades habitacionales en abril de 2021, lo que representó un incremento de cerca de 270 por ciento frente a abril de 2020, cuando se negociaron unas 5 mil.
El segmento de Vivienda de Interés Social (VIS) creció considerablemente en el cuarto mes del año al lograr vender 13.228 unidades, 240 por ciento más que el mismo mes en 2020; mientras que el No VIS reportó un crecimiento de 350 por ciento con la comercialización de 5.395 unidades.
Según cifras de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), dos de cada tres viviendas que se comercializan en el país utilizan el programa Mi Casa Ya para su financiación, una iniciativa del Gobierno que facilita la adquisición de vivienda nueva urbana a familias cuyos ingresos no superen los 4 SMMLV. “Esto ratifica que la vivienda social sigue siendo la prioridad de inversión de las familias”, advierte Sandra Forero Ramírez, presidenta ejecutiva de Camacol. En materia de proyectos con oferta disponible, “75 de cada 100 viviendas nuevas que se construyen, corresponden a Vivienda de Interés Social, una tendencia que va al alza” precisa. Este segmento seguirá siendo el eje central del mercado.
El economista Tito Yepes, investigador asociado de Fedesarrollo, también atribuye este crecimiento al actual programa de Gobierno “que al calibrarse ha logrado mejorar el cierre financiero, es decir, que la relación entre la capacidad de ahorro de los hogares y la estructura financiera permita que las familias puedan adquirir vivienda”. Sin embargo, afirma que no es el único factor. El incremento de la curva en el sector tiene que ver con un fenómeno que se ha visto a nivel global: la pandemia ha generado un ahorro relativo.
“La gente se ha dado cuenta que no ir a restaurantes, no incurrir en una serie de gastos que antes se hacían, les ha permitido ahorrar y visualizar la oportunidad de adquirir bienes de capital, más durables, dentro de ellos la vivienda”, explica Yepes, quien puntualiza que es un fenómeno que ocurre en EE. UU., Europa y en algunos países de América Latina, entre ellos, de forma positiva, en Colombia, “de ahí que valga la pena resaltar el rol de estos programas para aprovechar el momento que se ha generado con los cambios en los patrones de consumo”, concluye.
Como Yepes, para Alberto Isaza Robledo, gerente general de La Galería Inmobiliaria, lo que está ocurriendo en el sector es parte de una tendencia internacional,”aunque inaudito, hace un año nadie lo esperaba”. El especialista también atribuye el crecimiento del sector de vivienda nueva, con respecto al de la usada, a los beneficios generados por el fresh No VIS, “un subsidio de alrededor de 37 millones de pesos, que representa unos 437 mil pesos mensuales en 84 meses, y que es una plata que el comprador va a pagar de menos, y que no tendría si fuera a arrendar o a comprar vivienda usada”.
En las estadísticas de La Galería Inmobiliaria se recuperó la pérdida de participación en el mercado de la vivienda nueva frente a la usada y el arrendamiento. “Entre los años 2009-2011 la participación de la vivienda nueva era cerca del 33 por ciento de las transacciones inmobilirias y bajo hasta cerca del 22 por ciento. En el último periodo, desde que salió el fresh No VIS, está por encima del 36 por ciento”, explica Isaza, quien precisa que la vivienda de interés social, fomentada por el efecto de los subsidios, ha venido creciendo en ciudades como Barranquilla, Cali, Ibagué y más recientemente Bogotá.
Máximo histórico
Las cifras de abril ratifican una tendencia positiva en la compra de vivienda en Colombia. Marzo de 2021 fue el mes, en toda la historia del país desde que se tiene registro, en el que más familias adquirieron una casa propia. En total se comercializacion 21.124 unidades. De hecho, según Camacol este fue el mejor primer trimestre de la última década en términos anuales, con 54.874 unidades vendidas. De acuerdo con el sistema de análisis e información de Camacol Coordenada Urbana, 37.004 corresponden al segmento VIS.
“Este comportamiento del sector es un claro mensaje de la confianza que tienen los hogares colombianos en la adquisición de vivienda como fuente de bienestar y consolidación del patrimonio, ya que invirtieron en vivienda nueva entre enero y marzo de este año 11.9 billones de pesos, lo cual demuestra que siguen considerando la vivienda como una prioridad de inversión”, asegura Forero.
En lo corrido del año, con cierre al mes de abril, se han comercializado más de 75.762 unidades de Vivienda de Interés Social (VIS) y No VIS en el país. Para el ministro de Vivienda, Jonathan Malagón, la tendencia positiva permite ser optimista de cara al segundo semestre de 2021. “Estos buenos resultados se han visto reflejados en el mercado laboral, con más de un millón de trabajadores en el sector edificador”, puntualiza Malagón. Con base en el comportamiento del primer cuatrimestre, el ministerio estima que este año se podrían llegar a comercializar hasta 230 mil viviendas; unas 60 mil más que en 2020.
El sector de la construcción también inició el año con buenos números: 38.140 viviendas en el primer trimestre del año, el mejor registro de los dos últimos años según Camacol. “Estos nuevos proyectos han generado 165 mil puestos de trabajo, 69.000 directos y 96.000 indirectos, y su ejecución implica una demanda de insumos por 4.2 billones de pesos”, explica Forero.
Mejor nuevo
Entre enero y marzo de este año se negociaron más viviendas nuevas que usadas en Bogotá, frente al promedio del año 2020. Según el más reciente informe de Ciencuadras sobre el ‘Comportamiento de la vivienda en Colombia, nueva, usada y en arriendo’, “lo anterior se presenta por la mayor participación de la vivienda de interés social en los estratos 4, 5 y 6, y el nuevo subsidio a la cuota mensual del crédito de las viviendas No VIS (con precios de hasta los 500 SMMLV)”, que equivalen a 136′278.900 pesos para el año 2021. Adicionalmente, las tasas de financiamiento disminuyeron con respecto al 2020.
El informe también determina que los estratos bajo y medio bajo destacan en las búsquedas de viviendas en todo el país. En el segmento de propiedades para estrenar, las más cotizadas cuentan con al menos un parqueadero, mínimo dos habitaciones y un baño y tienen entre 30 y 75 metros cuadrados de área construida. En el caso de inmuebles usados, los compradores buscan tres habitaciones mínimo y al menos dos baños.
El promedio del valor de los apartamentos ofertados en este primer trimestre del año oscila entre 100 y 300 millones de pesos, según el mismo estudio.