OPINIÓN
Metástasis en elección del nuevo congreso
Es preocupante que la mayoría de los aspirantes al nuevo congreso, que se elegirá el próximo 11 de marzo, tengan cuentas pendientes con la justicia.
Muchos de los que aspiran a la reelección, tienen prontuario delictivo, que el más avezado de los delincuentes, lo cambiaría por las mieles del poder, donde se conjuga la farsa con la mentira y el engaño, en nombre de nuestra democracia y por autoridad de la Ley.
La batuta de don corrupto nos cogió tal ventaja, que a donde llega es el personaje de las mil y una noche, los súbditos le rinden sumisión y obediencia, pareciendo todo tan legal como la luz del día, que en cientos de contratos y actos administrativos, se confunden con las tinieblas de la noche.
El señor ministro del interior, doctor Guillermo Rivera, presentó un panorama bastante desolador sobre la cantidad de aspirantes al nuevo congreso, que se encuentran incursos en diferentes delitos, que como consecuencia lógica, los inhabilita para ser sujetos de elección popular.
Los hay con antecedentes penales; con cuentas pendientes en la corte suprema de justicia por paramilitarismo; vinculados al caso de Odebrecht; por inasistencia familiar, entre otros delitos; esto quiere decir, que los futuros “padres de la patria”, antes de posesionarse, ya están recorriendo el código penal en todas las instancias y modalidades.
Se imaginarán, con las trapisondas que están colocando los nuevos congresistas aún sin posesionarse, el zafarrancho que van a armar en el congreso y diferentes instancias judiciales, que no les va a quedar tiempo para legislar, puesto que gracias a nuestro voto de estúpidos borregos, entrarán a devengar más de treinta millones de pesos mensuales, fuera del sinnúmero de prebendas a que tienen derecho, para poderse defender.
¿Será que el Consejo Nacional Electoral, que últimamente ha dado muestras de ser eficiente y serio, toma cartas en asunto tan delicado, revisando cada uno de estos casos, obligando a los partidos y movimientos políticos a retirar el aval otorgado a los aspirantes, que se encuentran moral y jurídicamente impedidos?
Considero que en última instancia y siendo la situación tan crítica como está, deberían suspender las elecciones del congreso de la república, con el fin que se convoque después de las presidenciales, a una Asamblea Nacional Constituyente, que nos permita elegir un congreso serio y eficiente.
Hagámoslo por la salud de nuestra Patria, no utilicemos los fueros democráticos para elegir un congreso espurio.