La cultura en Colombia se vive con el Banco de la República

Desde sus primeros años, el Banco de la República ha venido cumpliendo un rol en Colombia que pocos imaginarían tratándose de un banco: ser un bastión de la cultura del país. A través de sus colecciones de arte, bibliográficas, arqueológicas y de música, el Banco de la República ha creado una rica oferta cultural que gestiona desde sus bibliotecas, museos, salas de conciertos y centros culturales en 29 ciudades de Colombia, y se divulga a través de sus redes sociales y su portal web www.banrepcultural.org.

El pasado de Colombia, contado en objetos

El poporo Quimbaya, esa especie de vasija dorada que adorna algunas de las antiguas monedas de veinte pesos, no solo es un ícono de la historia de nuestro país y territorio; es un ícono del momento en el que nuestro país y territorio empezó a preservar su historia, los objetos que dan cuenta de nuestro pasado y nuestra identidad. Esta pieza fue la primera que se adquirió para establecer el Museo del Oro, el 22 de diciembre de 1939.

Desde ese momento, el Banco de la República se ha dado a la tarea de preservar piezas de orfebrería, cerámica, textiles, líticos y demás materiales que dan cuenta de nuestra historia, desde los tiempos prehispánicos (hay objetos de hace más de 2.500 años) hasta los días de la Conquista y la Colonia española. Son más de cincuenta mil objetos en total que se encuentran repartidos en Museos del Oro y Etnográfico del país.

Aparte del que está en Bogotá, los otros Museos del Oro son:

• El Museo del Oro Quimbaya en Armenia, abierto al público desde 1986. Rinde homenaje con su colección, a los indígenas que poblaban la región del Cauca Medio.
• El Museo del Oro Calima, en Cali. Cuenta con 615 objetos de orfebrería, cerámica, piedra, madera, concha y otros objetos etnográficos de la región Calima.
• El Museo del Oro Zenú en Cartagena cuenta con 902 objetos arqueológicos (747 de metal, 105 de cerámica, 11 de hueso; 34 de concha, y 5 fragmentos de cerámica) que exhibe orgulloso a sus visitantes.
• El Museo del Oro Tairona - Casa de la Aduana invita a conocer las sociedades de la Sierra Nevada de Santa Marta a través de las 565 piezas arqueológicas que contrastan con la hermosa casa colonial en la que están alojadas.
• El último de estos museos es el Museo del Oro Nariño, ubicado en Pasto. Fue renovado en 2016 para contar la historia de aquellas sociedades que vivían en la región, desde el altiplano sur-colombiano hasta la sociedad Tumaco en las costas del Pacífico.
• El Museo Etnográfico de Leticia, en el corazón de la amazonía colombiana, exhibe y da contexto a más de 200 objetos recogidos por el capuchino español Fray Antonio Jover Lomaña. Estas piezas son una muestra de los rituales y la cotidianidad de las etnias Ticuna, Uitoto y Yucuna.

Entre libros y documentos

Es difícil dimensionar la colección bibliográfica que guarda la Red de Bibliotecas del Banco de la República. Ya debería decirnos algo el hecho de que cuenta con sede en 29 ciudades del país, y eso sin contar la biblioteca virtual que se ha venido expandiendo desde su creación en 1997, cuando fue la primera biblioteca virtual de Latinoamérica. Es una colección masiva en la que cualquier persona, investigador, historiador, estudiante o curioso, se puede perder dichoso por días.

Es mucho más que libros y literatura, claro: en esta colección bibliográfica puede encontrar revistas de hace décadas, mapas y planos de toda la nación, documentos oficiales y hasta material audiovisual en varios formatos. Hay archivos que son patrimonio documental, materiales que sirven de fuente primaria para la investigación y que son piezas que dan cuenta de la cultura colombiana.

Es muy probable que encuentre la obra que busca de algún autor extranjero, pero es casi seguro que encontrará en su colección los libros de autores colombianos sin importar fecha o región, o si fue editada en Colombia o en el extranjero, esté en español o en otro idioma. Hay que destacar las colecciones de economía, ciencias sociales, humanidades, derecho, música (con grabaciones y partituras incluidas), y hasta una colección sobre países de América Latina.

Arte de Colombia y para Colombia

La colección de arte del Banco de la República empezó de manera modesta: con solo tres obras de arte adquiridas en noviembre de 1957. Mandolina sobre silla, de Fernando Botero, Ángel volando en la noche, de Cecilia Porras, y El Dorado #2, de Eduardo Ramírez Villamizar, fueron los tres cuadros que se exhibieron en la recién inaugurada biblioteca Luis Ángel Arango.

Hoy, tras años de juiciosa adquisición y generosas donaciones, esa colección tiene más de 6.000 obras que abarcan pinturas, videos, esculturas e instalaciones de artistas de Colombia y el resto del mundo.

¿Curioso por saber qué obras componen esta colección? Desde el año 2004 está disponible para todos los amantes del arte un montaje de la colección que exhibe más de 800 piezas de más de 250 artistas diferentes. Basta con pasarse por los edificios del Museo de Arte Miguel Urrutia (MAMU), el Museo Casa de Moneda y la Casa Republicana dentro de la Biblioteca Luis Ángel Arango. Allá encontrará obras tan antiguas como Monjas Coronadas del siglo XVI, pasando los maestros impresionistas europeos del siglo XIX y de principios del siglo XX, hasta encontrar obras de la presente década, que dan cuenta del arte en el mundo y en Colombia.

Música y cultura para todos

Hay pocos espacios tan emblemáticos para la música en Colombia como la sala de conciertos de la biblioteca Luis Ángel Arango. Estrenada el 25 de febrero de 1966, en este bellísimo espacio han sonado cientos de piezas de música clásica y de cámara, jazz, canciones del mundo y composiciones netamente colombianas gracias a la Temporada Nacional de Conciertos.

No es solo el lugar en el que se presentan interpretaciones de grandes maestros como Mozart y Bach, sino que también es un espacio para el talento colombiano: desde los años noventa se han estrenado obras comisionadas a artistas nacionales, armando una colección que evidencia el desarrollo musical en el país. Además, desde 2012 se han presentado y grabado reseñas de las obras de varios artistas nacionales, conmemorando y guardando el legado musical de Colombia con cada concierto.