Ucrania
“A muerte”: la condena de prorrusos contra mercenarios extranjeros en guerra en Ucrania
Los mercenarios fueron capturados en la región del Donbás, más precisamente en el marco de la disputa por Severodonetsk, y corresponden a dos ciudadanos británicos y uno marroquí.
Este jueves -9 de junio- se conoció una fuerte noticia en el marco de la guerra que se libra en Ucrania, cuando autoridades de la región separatista de Donetsk revelaran que, tras la aprehensión de un grupo de extranjeros que estaban al servicio de las tropas de la resistencia ucraniana, se dispuso condenarlos a la pena de muerte.
Dentro del grupo de ‘mercenarios’ que llegaron a Ucrania para apoyar la defensa de ese país, y que ahora han caído en manos de un grupo de ucranianos prorrusos, durante combates por el control de la ciudad Severodonetsk, se destaca la presencia de dos ciudadanos británicos y uno marroquí, quienes actualmente hacen parte del grupo de resistencia que se opone a que Rusia logre el control total de la región del Donbás, en el este del país.
Actualmente, según detallan medios internacionales, las ciudades de Severodonetsk y Lysychansk, se han convertido en el centro de los combates entre rusos y ucranianos, siendo puntos importantes para el control del Donbás, un territorio que Ucrania reconoce que, en su gran mayoría ha caído bajo la ocupación rusa.
Sobre los tres detenidos y sentenciados a muerte, medios internacionales han revelado su identidad, afirmando que los dos ciudadanos británicos corresponden a Aiden Aslin y Shaun Pinner, mientras que el ciudadano marroquí es Saadun Brahim.
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En el caso de estos tres mercenarios, estos cayeron en manos del bando prorruso en los territorios del Donbás, cuyas provincias de Luhansk y Donetsk adelantaron referendos independentistas en 2014, pero sus resultados no fueron reconocidos por el poder de Kiev, desatándose una guerra que tiene su punto álgido desde la ocupación rusa el pasado 24 de febrero.
Los delitos imputados
De acuerdo con lo trascendido a través de los medios internacionales, tras ser capturados, estos tres extranjeros fueron señalados de “haber participado en los combates como mercenarios”.
En consecuencia, los tres extranjeros, que se declararon culpables de actos encaminados a “tomar el poder y derrocar el orden constitucional de la República Popular de Donetsk”, como se autodenomina la región, fueron condenados a muerte, de acuerdo con la agencia rusa Interfax.
Según precisa dicha agencia de noticias, la entidad encargada del juzgamiento de los tres extranjeros fue la Corte Suprema de la República Popular de Donetsk, un órgano que solamente cuenta con el reconocimiento ruso.
El desarrollo como mercenarios es una situación que actualmente viven miles de extranjeros que han llegado hasta Ucrania con el propósito de adherirse a la defensa de ese país, y su deseo de plantar cara a los invasores rusos, rechazando la ocupación que ya se acerca a los 110 días, desde el inicio de la que Rusia llama ‘operación especial’.
Tras conocerse la sentencia en contra de los tres extranjeros, el gobierno británico se expresó para rechazar dicho juicio, solicitando que los prisioneros tomados por las fuerzas prorrusas, reciban el trato de prisioneros de guerra, y no sean sometidos a la pena de muerte.
Según Rusia, las operaciones contra los mercenarios que apoyan a Ucrania también ha consistido en el desarrollo de bombardeos en la zona de Zhitómir, al oeste de Kiev, donde se concentran los centros de entrenamiento de los extranjeros que se adhieren a las fuerzas de defensa.
La cruda guerra por el Donbás
Luego de que, ante la férrea defensa ucraniana, las tropas usurpadoras de Rusia hubieran decidido concentrar sus esfuerzos en el sector del este, retirando sus tropas del objetivo de alcanzar Kiev, la guerra se ha centrado en el territorio del Donbás, territorio al este del país, donde se encuentran las provincias prorrusas.
En ese sentido, desde el poder de Ucrania, su presidente, Volodimir Zelenski, ha reiterado los llamados a la comunidad internacional a la entrega de armas más potentes que les permitan retomar el control cedido con el avance de los rusos.
Así, dentro de las armas solicitadas por Kiev, se encuentran cohetes de largo alcance, entre los que medios internacionales referencian los Himars, armas prometidas por Estados Unidos, y que tienen un alcance estimado de 80 kilómetros.
De acuerdo con las autoridades proucranianas de Luhansk “con esos dispositivos, las tropas ucranianas podrían retomar el control de Severodonetsk en dos o tres días”.
Sobre los enfrentamientos que se libran en la ciudad de Severodonetsk, cuyo dominio, en su mayoría, ya cayó en manos rusas, los expertos advierten que allí se define gran parte del dominio del Donbás.
En referencia al particular, medios internacionales también han referido que, según el reporte de las autoridades, se estima que cerca de 800 civiles permanecen resguardados en la planta química Azot, en dicha ciudad, una información que, aunque no ha sido confirmada por las autoridades, si fue la entregada por personas cercanas al dueño de la fábrica.
La tensión se centra en el Este
De acuerdo con medios internacionales, la noche anterior, la del miércoles 8 de junio, fuerzas rusas adelantaron fuertes ataques en la zona, afirmando que allí se desarrollaron bombardearon en contra de la fábrica mencionada, según confirmó el gobierno ucraniano.
Sobre el día a día de las confrontaciones, el Ministerio de Defensa de Ucrania, ha señalado que las bajas de las filas locales, las de la defensa, se estiman en cerca de 100 soldados diarios, y cerca de 500 heridos.
En ese mismo sentido, se ha advertido que otra de las ciudades claves de la zona, Lysychansk, que aún está bajo en control del gobierno de Kiev, presenta también fuertes ataques por parte de fuerzas rusas que intensifican sus bombardeos.
Según el Ministerio de Defensa de Ucrania, las tropas de Rusia están desarrollando ataques tachados en el Derecho Internacional Humanitario, como atentados a hospitales y centros de distribución de ayuda humanitaria.
*Con información de AFP.
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