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A pesar del tiempo, las madres de los desaparecidos de la dictadura en Chile siguen con la búsqueda de sus hijos

El próximo 11 de septiembre se cumplirán 50 años del golpe de Estado en Chile y el inicio de la dictadura militar de Augusto Pinochet.

Redacción Semana
6 de septiembre de 2023
Presidente chileno, Gabriel Boric, anunció el plan de búsqueda de detenidos desaparecidos en dictadura.
Vista de tumbas en el sector denominado "Patio 29", declarado Monumento Histórico en 2006, que fue utilizado durante la dictadura militar para enterrar clandestinamente a políticos ejecutados, en el Cementerio General de Santiago, tomada el 30 de agosto de 2023, día en que El presidente de Chile, Gabriel Boric, presentó el Plan Nacional de Búsqueda de Desaparecidos para encontrar víctimas desaparecidas de la dictadura de 1973-1990. (Foto de MARTIN BERNETTI / AFP) | Foto: AFP

En un pequeño bote alquilado, Luz Encina, de 94 años, lleva un puñado de flores rojas. En el mar cree que puede estar su hijo, uno de los miles de desaparecidos por la dictadura de Augusto Pinochet en Chile.

“Los militares dijeron que tiraron varias personas al mar y ahí podría estar mi hijo”, señala Encina, una de las pocas madres aun con vida de detenidos desaparecidos. El 5 de agosto de 1974, Mauricio Jorquera cumplió 19 años. Fue la última vez que Encina vio a su hijo, un universitario militante de izquierda.

Jorquera fue capturado por la policía política de Pinochet. Su madre lo buscó sin éxito en los centros adonde eran llevados y torturados los detenidos. Ni los militares ni la justicia le dieron respuesta. Encina, con la foto de Mauricio adherida al pecho, presiente que su hijo fue arrojado al mar, quizá desde uno de los “vuelos de la muerte” organizados por el ejército para hacer desaparecer los cuerpos de los prisioneros detenidos.

Presidente chileno, Gabriel Boric, anunció el plan de búsqueda de detenidos desaparecidos en dictadura.
Un hombre se sienta entre tumbas en el sector denominado "Patio 29", declarado Monumento Histórico en 2006, que fue utilizado durante la dictadura militar para enterrar clandestinamente a políticos ejecutados, en el Cementerio General de Santiago el 30 de agosto de 2023, día en el que El presidente de Chile, Gabriel Boric, presentó el Plan Nacional de Búsqueda de Desaparecidos para encontrar víctimas desaparecidas de la dictadura de 1973-1990. (Photo by MARTIN BERNETTI / AFP) | Foto: AFP

El miércoles, el Estado chileno se comprometió por primera vez a asumir la búsqueda de poco más de un millar de detenidos desaparecidos, a través de un plan lanzando por el presidente Gabriel Boric en vísperas de los 50 años del golpe militar que instaló la dictadura de Pinochet (1973-1990) por casi dos décadas.

Durante décadas, la búsqueda de los desaparecidos corrió a cargo casi exclusivamente de las familias, apenas hallando los restos de 307. Todavía se desconoce el paradero de otras 1.162 víctimas. Encina fue una de las invitadas al acto que encabezó Boric. Aun con pocas esperanzas, cree que podrá recibir alguna noticia sobre su hijo.

“Tengo mucha fe, yo creo que todo va a salir bien”, señaló la mujer a la AFP tras el lanzamiento del Plan Nacional de Búsqueda de Verdad y Justicia. En Santiago, Emilia Vásquez, de 87 años, camina por la calle donde vio crecer a sus cinco hijos. En el final del pasaje hay un mural con el rostro de su primogénito, Miguel Heredia, desaparecido el 26 de diciembre de 1973, cuando tenía 23 años.

La dictadura de Augusto Pinochet dejó en Chile 3.200 asesinados y 1.162 desaparecidos, incluidos niños, tras un golpe militar que ha recibido la condena internacional y de muchos en el país.
En esta imagen de archivo, el difunto dictador chileno, entonces comandante del ejército, general Augusto Pinochet, recibe el abrazo de una seguidora al encontrarse con partidarios que esperaban en su casa con motivo del 22do aniversario de su nombramiento como jefe de las fuerzas armadas chilenas, en Santiago, Chile, el 23 de agosto de 1995. | Foto: AP

Efectivos de la Fuerza Aérea lo sacaron de su lugar de trabajo y lo trasladaron a un centro de detención, adonde llegó Emilia para darle frazadas y medicamentos, pero no pudo verlo. Heredia militaba en las juventudes comunistas, de niño sufrió una enfermedad que le dañó el pulmón de por vida. Fue bombero voluntario.

Tras la detención de su hijo, los militares allanaron la casa familiar y se llevaron casi todas sus pertenencias, incluido el traje de bombero, evoca Vásquez. La mujer se enteró luego que Heredia fue entregado al Ejército y recluido en el regimiento de Tejas Verdes, en San Antonio, uno de los principales centros de detención y torturas de la dictadura.

Hasta allá también fue su madre, pero tampoco le dieron noticias sobre la suerte de su hijo. Vásquez recuerda haber llorado amargamente frente a la sede militar. Casi cinco décadas después siente que se le secaron las lágrimas. Apenas le brillan los ojos. “Este es mi llanto, el que usted ve”, se lamenta.

La dictadura de Augusto Pinochet dejó en Chile 3.200 asesinados y 1.162 desaparecidos, incluidos niños, tras un golpe militar que ha recibido la condena internacional y de muchos en el país.
Hugo Toledo lleva pantalones con retratos ensangrentados del dictador chileno Augusto Pinochet, izquierda, y del antiguo comandante de la Armada de Chile Juan Cheyre, a los que considera responsables de detenciones y torturas al inicio de la dictadura militar, en un acto por la victoria electoral de 1970 de Salvador Allende fuera del palacio presidencial de La Moneda, Santiago, Chile, el lunes 4 de septiembre de 2023. | Foto: AP

Sin el hallazgo de los cuerpos, la justicia chilena comenzó a tratar el caso de los desaparecidos a la fuerza como un “secuestro permanente”, para evitar que quedaran cobijados por una Ley de Amnistía para el período 1973-1978, cuando se cometieron los crímenes más cruentos de la dictadura, que dejó más de 3.200 muertos y desaparecidos.

En 2014, seis militares en retiro fueron condenados a entre 5 y 15 años de cárcel por el secuestro de Miguel Heredia. En marzo pasado, la Corte Suprema condenó a 59 exmilitares por el “secuestro y tortura” de 16 militantes de izquierda, entre ellos Mauricio Jorquera. Sin embargo, no se pudo determinar dónde están. “Yo no tengo esperanza, porque a mi hijo lo lanzaron al mar, más no se puede hacer”, se resigna Emilia Vásquez.

Con información de AFP.