Adelantan audiencia de Álex Saab en Estados Unidos

El próximo 6 de diciembre se llevará a cabo la audiencia de Álex Saab, ciudadano colombo-venezolano que es considerado de ser el presunto testaferro de Nicolás Maduro. La diligencia judicial en Estados Unidos inicialmente estaba pactada para el 28 del mismo mes.

El juez Robert N. Scola Jr. aprobó adelantar la audiencia de “estatus” en contra de Saab, acusado de lavado de dinero en una corte de Miami, luego de una moción solicitada por la defensa. Se tratará de una diligencia judicial, previa a al juicio programado para el 3 de enero de 2022, según señalan documentos judiciales del caso.

En el juicio en enero del próximo año, Álex Saab deberá estar presente y tendrá una duración de dos semanas. Además, estará a cargo de un jurado que será seleccionado con anticipación.

El caso de Álex Saab en Estados Unidos ha sido uno de los más polémicos y esperados, pues además de tener información importante sobre Venezuela, está vinculado a empresas y políticos colombianos y de América Latina.

El pasado 15 de noviembre, Saab se declaró inocente de los cargos de lavado de dinero en Estados Unidos, en la audiencia realizada en la sala del tribunal federal de Miami.

Además de lavado de dinero, la justicia estadounidense señaló a Saab de formar parte de una red de corrupción con la que obtuvo ingresos económicos de contratos irregulares durante el mandato de Hugo Chávez en Venezuela.

Piedad Córdoba acusó a EE. UU. de “secuestrar” a Álex Saab

La exsenadora colombiana Piedad Córdoba rompió el silencio y se refirió a la extradición del barranquillero, durante las elecciones regionales y municipales de Venezuela que se realizaron el pasado domingo.

La excongresista afirmó que Saab fue “secuestrado” por Estados Unidos. Además, señaló que este tipo de acciones han perjudicado bastante los diálogos con la oposición.

“El presidente [Nicolás Maduro] tiene total razón en la inconformidad que ha demostrado frente al secuestro de Álex Saab, que es una violación al derecho internacional humanitario. Es una violación a la Convención de Viena”, precisó.

Pese a que no entregó mayores detalles, reiteró que por culpa del traslado de Saab a Estados Unidos el proceso de diálogo con la oposición se rompió, mostrando su respaldo a Maduro.

“Este tipo de decisiones que toma Estados Unidos violenta brutalmente la posibilidad del diálogo”, agregó Piedad Córdoba, quien además le pidió al presidente Iván Duque reconocer los comicios de la vecina nación.

De acuerdo con las autoridades estadounidenses, Saab y su socio Álvaro Pulido transfirieron 350 millones de dólares obtenidos ilegalmente en Venezuela para blanquearlos a través del país norteamericano.

Aseguran, de igual manera, que ambos firmaron un contrato con el Gobierno del vecino país en noviembre de 2011 para construir cientos de viviendas de interés social mediante un esquema de sobornos, aprovechando el tipo de cambio controlado por las autoridades bolivarianas.

Saab no solo enfrenta cargos en una corte penal en Estados Unidos, sino que también es investigado en Colombia, donde logró escaparse junto con algunos de sus familiares de una orden de captura. Decenas de sus propiedades, avaluadas en miles de millones de pesos, han sido ocupadas por la Fiscalía, entre ellas una mansión en Barranquilla.

Camilla Fabri, esposa de Saab, dijo en días pasados que: “No hay nada que ‘cantar’, no hay mentira que puedan poner en su boca”.

Fabri, modelo italiana, ha sido enfática en decir siempre lo mismo: que su esposo está secuestrado en Estados Unidos y que su suplicio no comenzó con su traslado en la Florida, sino con su arresto en Cabo Verde.

Hasta antes de la detención de Saab, de Camilla Fabri se había escuchado hablar muy poco. Se sabía de ella porque la justicia italiana la tenía en la mira y se había llevado titulares por ser propietaria de millonarias propiedades confiscadas en el Viejo Continente. La mujer, de hecho, despertaba sospechas porque había comenzado vendiendo ropa con un salario de 1.800 euros y terminado con un apartamento en la lujosísima Via Condotti de Roma. La justicia italiana decidió abrirle un proceso por blanqueo de capitales.

Allá tendrá que explicar cómo terminó con este inmueble de cinco millones de dólares, situado unos pisos más arriba de la prestigiosa tienda Bvlgari, lleno de valiosas obras de arte en su interior y 1,8 millones de euros en dinero.