MUNDO
Advierten que unos 4.000 niños están en “riesgo de abuso” en la frontera de EE. UU. y México
Las autoridades estadounidenses han insistido en que las fronteras no están abiertas a pesar de la expiración del Título 42.
La ONG Save the Children advirtió este viernes que unos 4.000 niños y niñas se encuentran en riesgo de sufrir “abuso y abandono” en las principales ciudades mexicanas fronterizas con Estados Unidos, cuyas autoridades han insistido en que las fronteras no están abiertas a pesar de la expiración del Título 42.
El anuncio del final del Título 42, la legislación implementada por el Gobierno del expresidente Donald Trump durante la pandemia que permitía las devoluciones en caliente en las fronteras, ha atraído a unas 15.000 personas a la región con la “esperanza de cruzar hacia territorio estadounidense, y la gran mayoría duerme en las calles o albergues saturados”.
“La situación puede ser muy crítica, podríamos decir que son casi 4.000 niñas y niños los que están expuestos a riesgos importantes como la violencia, el abuso, afectaciones graves a su salud física y mental e incluso la separación familiar (...). Las familias están desesperadas y muchas de ellas pueden estar dispuestas a arriesgar sus vidas al intentar cruzar la frontera por puntos peligrosos como el desierto o el río Bravo”, ha afirmado la directora de Save the Children en México, Maripina Menéndez, en un comunicado.
Save the Children ha asegurado que la exposición a estos riesgos se suman la “ansiedad, miedo e incertidumbre”, sentimientos que se ven intensificados por las dudas sobre su futuro y después de huir de la pobreza y la violencia en sus países de origen.
“La verdad que me pone triste saber que no podemos intentar cruzar, ahora con la aplicación (CBP One) esperamos entrar de buena manera, pero es muy lento el proceso y poco claro, a mis hijos trato de no decirles nada, pero si se dan cuenta y me ven muy triste. Ellos se ponen tristes de saber que llevamos mucho tiempo acá. Es injusto que ahora nos hagan ver como delincuentes, nosotros solo buscamos protección para nuestros hijos”, ha contado Susana, una venezolana de 29 años, a la ONG.
Menéndez ha explicado como la organización ha presenciado la devolución de migrantes a territorio mexicano, y ha mostrado su preocupación por el “descuido” de la infancia debido al “alto estrés” que sufren los padres, y ha informado de la presencia de mafias en la zona cuyo objetivo es “sobornar” o “reclutar” a los migrantes.
La organización ha llamado al Gobierno mexicano a “fortalecer los programas y políticas internas de protección de la niñez y la adolescencia”, y ha asegurado que tienen una “responsabilidad importante” respecto a garantizar los Derechos Humanos de todos los migrantes que llegan a la región.
Organizaciones prenden alarmas porque política migratoria de Joe Biden es más severa que la de Donald Trump
La finalización de la medida conocida como Título 42 y la entrada nuevamente en vigor del Título 8 tiene asustados a los migrantes y organizaciones de derechos humanos.
Precisamente, la ONG Human Rights Watch (HRW), especializada en el seguimiento de la situación internacional de los derechos humanos, alertó que la nueva política migratoria anunciada por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, prácticamente se trata de una continuación de la doctrina marcada por su predecesor, Donald Trump, y sigue representando una grave amenaza para la seguridad personal de los migrantes que aguardan en la frontera sur con México.
En teoría, la nueva ley migratoria de Biden anula definitivamente el llamado Título 42, una disposición de salud pública que autoriza la expulsión colectiva de cualquier migrante y solicitante de asilo que intente cruzar las fronteras terrestres de Estados Unidos, sin una evaluación individual de sus circunstancias y necesidades de protección.
HRW, sin embargo, aduce que la nueva legislación no ataca las consecuencias directas de la anterior normativa: la desprotección a la que se exponen los migrantes y con esto, sería mucho más severa que la impuesta por Trump anteriormente.
Esta cita, asegura la ONG, es casi imposible de obtener, ya que el cupo diario de admisiones “es extremadamente limitado y se agota en cuestión de minutos”.
En términos generales, el nuevo sistema vuelve a ampararse en la nociva presunción de que un solicitante de asilo está incapacitado por defecto para entrar en el país.
Muchos de los migrantes esperan de manera angustiosa en Ciudad Juárez, México, en condiciones precarias y bajo presiones de las fuerzas de seguridad mexicanas, para que abandonen sus campamentos y se trasladen a albergues donde son presa fácil de los cárteles, quienes los usan como esclavos o directamente los secuestran para pedir dinero a sus familias en sus países de origen, denuncia HRW.
Con información de Europa Press